I Kissed A Boy! [BrightWin]

CAPITULO 03

Bright sintió unos suaves labios besar los suyos, no negaría que al principio fue algo incómodo ya que nunca había besado a un chico pero los segundos que fueron pasando se convirtieron en una mini adicción. Los labios del contrario sabían demasiado bien, inconscientemente tomó el rostro de Win entre sus manos para profundizar el beso a lo cual Win no puso resistencia de no ser por la alarma que venía del teléfono de Win anunciando que la hora de descanso había terminado.

Ambos se separaron de golpe y cuando se vieron directos a los ojos agacharon la cabeza tímidos de lo que había ocurrido hacia apenas unos segundos atrás.

—Debo irme —. La voz temblorosa de Win habló mientras recogía sus cosas para salir huyendo del lugar sin dejar hablar a Bright quien quedó parado viendo cómo el chico casi tropezaba al irse.

—Eres interesante Win —. Dijo volteando a ver la comida que dejaron en la banca. —¿Y ahora que hago? —.

Un chico de cabello negro corría directo al salón de clases con la respiración agitada no solo por correr y perderse su clase además del regaño que le daría la profesora. Más bien, su respiración agitada se debía a cierto chico de piel algo morena con unos labios que si besarlos encajaban perfectos con los suyos.

De solo recordar, sintió su cara caliente que no notó a un joven delante suyo con el cuál chocó.

—¡Oh no! Discúlpame, en verdad no me fijé —. Win se disculpó inmediatamente con el chico.

—No te preocupes suele pasar pero, ¿Tú estás bien? Tu cara está roja, ¿tienes fiebre? —. El joven de estatura mayor a la de Win se acercó ofreciendo su ayuda, era cierto que el rostro de Win estaba rojo que cualquier persona pensaría que está enfermo.

—No es necesario, es que voy tarde a mi clase, de nuevo discúlpame por chocarte pero tengo que irme —. Win una vez más salió corriendo a su clase, faltaban unos cuantos salones y llegaba a su destino. El chico quedó de pie mirando como Win se iba corriendo.

—Que lindo —. Sonrió.

—Joven Win, me sorprende que usted llegue tarde a clase, es un buen estudiante ¿Dónde estaba? —.

—Perdón profesora, yo... —.

—¿Usted...? —.

—Yo... me quedé dormido en una banca, dejé mi comida y cuando desperté tuve que comerla rápido porque ya casi era hora de entrar pero en eso el tiempo de receso terminó y yo aún no acababa pero tuve que salir corriendo hacia acá cuando choque con otro estudiante y... —. Fue interrumpido por la profesora quien se tapó los oídos y haciéndole una seña de silencio.

—Entiendo, mejor siéntese y tome nota a la clase —.

—Gracias profesora —. Win agradeció apenado y sintiéndose mal de mentirle aunque una parte era verdad.

Las siguientes tres horas Win estuvo ausente de la clase inmerso en sus pensamientos. Tenía suerte de tener su lugar al lado de las ventanas y hasta atrás, así podía no poner atención sin que se den cuenta. Su mente vagaba en una sola cosa: el beso con Bright.

No podía evitar recordar cada segundo que sus labios estuvieron pegados a los del otro chico. De nuevo sintió su cara caliente de lo vergonzoso que es recordar semejante cosa pero aún así no podía evitarlo. Plantó su mirada en la hoja blanca de libreta mientras movía de un lado a otro su lápiz. Trataba de concentrarse en la clase pero cada vez que cerraba los ojos miraba al otro chico.

—calmate Win, fue solo un beso —. Se habló a si mismo en un tono muy bajo, pensó que era normal. Después de todo era su primer beso.

—¿Cómo que te quedaste dormido? Eso no te lo creo, además me llegó un chisme —. Saint hizo que Win volviera en si en cuanto escuchó la palabra chisme.

—¿Qué chisme? —. Preguntó curioso.

—Tú no estabas solo eh, estabas con alguien —. Dijo Saint.

Win no dijo nada y dejó que Saint continuara hablando.

—Me dijeron que estabas con un chico de los populares, el tal Bright ¿qué hacías con él? ¿Por él llegaste tarde? —. Saint tenía curiosidad por su mejor amigo, el sabía que Win nunca había conocido a Bright o al menos eso pensaba hasta ahora. —No sabía que lo conocías —.

—Recién lo conozco, el me ayudó con un tipo que me estaba molestando y hoy en agradecimiento le invite una comida, eso es todo —.

—¿eso es todo implica un beso? —.

—¡No lo besé! —. Win gritó en medio de la clase no solo asustando a Saint de repente sino a todos los alumnos y a la misma profesora.

—¿Qué pasa joven Win? —. Preguntó la docente.

—No, no es nada, perdón —. Win miró a su amigo dándose cuenta que lo imaginó, no le había echo tal pregunta.

—¿Qué pasa amigo? —.

—Nada, imagine cosas, sabes realmente no me siento muy bien, necesito descansar —.

Win miró hacia la ventana asomándose por esta, se veían los patios de la escuela, vió que un chico estaba recostado en una de las bancas con una sudadera puesta sobre la cara para cubrirse del sol. De cierta forma aquella figura se le hacía conocida. Pero prefiero volver a la clase.

Una vez que el día terminó volvió a su habitación directo dormir, su mente quedó exhausta por aquel beso.

—Bese a un chico —.