cheerleader [TordTom]

2-

Tom

Tord me invitó a una fiesta hoy en la noche también las chicas me dijeron que yo le guste ay que joto, no es mi tipo pero un palo no se le niega a nadie.

Después de media hora de mi hermana hablando de cosas sin sentido llegamos a la casa, abrí la puerta con rapidez entrando de inmediato a la sala me lanze al sofá.

— se te ve la cola.— sentí una fuerte nalgada.

— celosa de que tengo más que tú.— dije con la cara presionada sobre el cojín.

— cállate.— otra nalgada aún más fuerte.

— ya dame mis 100 dólares y la botella, tengo cosas que hacer.— me levanté, extendí la mano exigiendo lo que me pertenecía.

Tamara no me prestó atención sus dedos se movían con rapidez sobre el teclado.

— ¿con quién hablas?.— asome mi cabeza sobre el celular viendo toda la conversación.

— con Tord, pregunta si vas a ir a la fiesta.— guardo silencio y leyó un nuevo mensaje entre dientes al terminar su rostro se iluminó.

— no lo sé es fiesta de niños de preparatoria suena aburrida.— me aleje de ella recargando mi cuerpo el sillón.

— puedes hacerme otro favor.— rio viéndome la mire, sabía que no me daría el dinero si no accedía.

— no y ya dame mi dinero.— cruce los brazos con indicación..

— vamos has esto por tu hermanita, porfi.— los ojos de perrito como me molestan.

— antes que nada ¿Que favor? Y si accedo me vas a dar el doble de lo que me prometiste.— propuse.

— es solo ir a la fiesta.— fruncí el seño.— solo un ratito una hora dos como máximo, vamos va a ir el futuro padre de mis hijos por favor. Tord me dijo que si te convenzco de ir él va a llevar al amor de mi vida.— rodé los ojos ni loco que tal y si ese asqueroso hetero me quiere tocar no.

— No.— dije levantándome.— ya no estés jodiendo me voy a dar un baño y dormirme, estar rodeado de tanto machito me dió asco.— me sorprendió que no siguiera insitiendo, se que ese tipo le gusta mucho a ella pero óyeme no, no voy a poner la poca virginidad anal que me queda por qué la niña se quiera miar por un poste de 1.90.

Entre a mi cuarto palpando la pared en busca del interruptor, la luz inundó la habitación mostrando el chiquero de hay tengo que recoger el cuarto en algún punto aún aguanta otra semana pero me duermo preocupado por el tiradero.