El Séptimo Sol

Capítulo I - "Atenta a las sombras"

...
Caminaba por aquellas calles como un ciervo huyendo del depredador. Yo, Amy Finger, con tan solo 17 años, y mi vida corriendo peligro. Tal vez era solo algo de mi cabeza, pero había sentido que una sombra pasaba por delante de mí. Lo más curioso de todo es que... ¡era de día! Había oído antes historias de pueblos embrujados, casas abandonadas, pero nunca como Safedeath Ville, el pueblo en el que vivo. Ahora, no me explico por qué a mí, con tantos seres humanos en la Tierra. Con tantos problemas que maquino en mi cabeza, y ahora estar viviendo con este temor. Mi vida siempre se ha visto envuelta en problemas y vicisitudes. Huérfana desde los 9 años, he tenido que vivir con distintos familiares. Con mi abuela Anne viví desde que mis padres fallecieron en aquel accidente, hasta los 11 años, que la pobre mujer falleció. Luego, hasta los 15, viví con el tío Fred, pero hace poco me tuve que salir de su casa, tras haber él caído en el alcohol. Nunca estaba en casa, se la pasaba de bar en bar, hasta que decidí irme de allí. A pesar de ello, siempre tengo una sonrisa en la cara, para toda situación. Ahora, me encuentro a salvo, o eso creo, en casa de una amiga, con la cual vivo desde hace un tiempo.

_ ¿Quién es? - Pregunta mi amiga Susan Grease, dueña de la casa, pues alguien toca a la puerta-.
_ Abra, por favor - Respondió una voz seca, como si el que habla tuviese problemas de la garganta-.
_ ¡Ya voy, ya voy! - Contestó mi amiga, mientras terminaba de comerse un hot dog-.
_ Buenas. Entrégale esto a tu amiga Amy Finger. Dile que es urgente. - Se mostró un hombre de aspecto siniestro, casi pálido, con ojos expresivos y cabellos rizados-.
_ Ok. Será dado, pero, señor, ¿cómo se llama...? - Se había desaparecido, sin dejar rastros-.
_ Pero, ¿dónde se habrá metido este? - Se preguntó, asustada-.
_ Toma, Amy, te han dejado este sobre. Me dijeron que era de urgencia - Entregábame el paquete, un poco indecisa de dármelo-.
_ ¿Y quién lo ha dejado?
_ Un hombre de un aspecto muy extraño, jamás lo había visto antes - aseguraba mi amiga -.
_ ¿Qué es esto? - Me pregunté, al ver el contenido del sobre-.
_ ¿De qué se trataba el famoso paquete, Amy? - Preguntaba mi amiga, mientras se sentaba a mi lado-
_Una nota, pero, está muy extraña. ¿Qué querrán decir todas estas figuras y símbolos?- Dije, mientras venía un viento feroz, que me la arrebató de las manos, y llegó esta nota a parar en un recipiente lleno de agua que había sobre la mesa-.
_ ¡Apúrate, antes de que se moje mucho! - Decía Susan, agitadamente-.
_ ¡Se puede leer claramente ahora! - Dije asombrada-. _ ¿Qué dice, finalmente? _ Dice: "He oído de ti muchas veces, y sé que tu destino es acompañarme en mi misión. Pronto te unirás a mí, quieras o no. Atenta a las sombras. El séptimo sol te reclama." _ ¿Ese señor estará loco? ¿Qué bromas son esas? - Dijo Susan con indignación-. _ No hagas caso a estas tonterías - Dije, aunque me quedaba la incertidumbre de cuál era el verdadero propósito de este mensaje-.
_ Me debo marchar, tengo cosas que hacer. _ Pero, ¡quédate un poco más!
_ Gracias, amiga. Vengo en la noche. No me esperes despierta.
_ Ok, amiga. Cuídate por ahí. - Me decía, mientras yo cerraba la puerta-.

Me disponía a caminar por un buen rato, aparte de estirar las piernas, pretendía aclarar mi mente de tantos sucesos extraños que atravesaban mi conciencia en estos últimos días. Distraída, como de costumbre, choqué con un chico, de cabellos rizados, de mi misma estatura, que, a mi parecer, éramos contemporáneos.