Varias peleas que amenazan su relación separándolos.
Una pareja con temor a ser descubiertos manteniéndose ocultos.
El inicio de un romance que no sabe lo que pasara a futuro por ello.
Un error al haber confiado en la persona equivocada que sacará t...
Sentía mucho frío y por más que intentará taparme con las cobijas seguía sintiendo frío así que abrí los ojos y me sorprendió que no vi mi habitación ni ada parecido si no el tablero de un coche.
Mire alrededor y vi a Tae manejando, no sabía a dónde me llevaba pero se notaba que era muy temprano, revise en mis bolsillos y no encontré mi teléfono así que solo me senté.
Talle mis ojos para alejar el sueño y me sorprendió ver el lugar en el que estábamos, teníamos de frente un enorme lago, un poco lejos del lago se podía ver una hermosa cabaña.
Salí del auto y corrí hasta donde estaba el lago, la brisa golpeó en mi cuerpo provocando que me diera frío y que mi cabello revoloteara, sonreí al ver todo aquel hermoso paisaje, me di la vuelta y observe a Tae a lo lejos sonriendo.
Se acercó hasta mi y lo abrace para no sentir frío, sentí como me ponía una manta en mi espalda y me abrazaba.
- Gracias Tae.
- Esto te mereces y más.
- Te amo.
- También te amo.
-¿Me amas con el corazón?
- No te amo ni con el corazón ni con mi mente.
-¿Que?
- Mi corazón se podría detener y mi mente olvidar. Te amo con mi alma porque nunca se detendrá ni olvidará.
Sabía que mi novio era cariñoso pero me gusto más por lo que dijo, le dejé un pequeño beso en su mejilla y sentí como cargo estilo princesa, me sostuve de él y comenzó a ir hacia la cabaña, entramos y sentí como el ambiente cambio.
La cabaña era hermosa, se veía simple pero me gustaba eso, sentí como me dejaba en la suave cama y se alejaba, regreso con una pequeña maleta y me la dio, la abrí y encontré dos cambios de ropa, prácticamente escogí el mismo conjunto blanco que use en nuestra cita, me cambie rápido y salí de la habitación.
Al verme me sonrió y camine hasta el para volver a abrazarlo.
- Ven vamos.
-¿A dónde?
- Es una sorpresa.
Tomo mi mano y me saco del lugar, llegando hasta el auto y emprendimos marcha a un nuevo lugar.
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El auto se detuvo y me sorprendió ver el hermoso lugar al que me había traído, salimos del auto y tome su mano para comenzar a caminar por el hermoso lugar.
Sentía que era un sueño, no podía creer que haya planeado todo esto para mí, tome mi teléfono y tome fotos, nos tomamos una foto juntos que ahora sería mi nuevo fondo de pantalla.
- Tae esto es hermoso.
- Pero no tanto como tú.
- O-oh basta harás que me sonroje.
- Ninguna maravilla se compara contigo cariño.
Se acercó hasta mi y hundí mi rostro en su pecho, sentía mis mejillas arder por sus palabras, me separé de él y le di un pequeño beso, después de eso seguimos caminando.
Habíamos caminado por el lugar casi por dos horas, después de ver los cerezos me llevo a un bonito restaurante en donde desayunamos a gusto porque podíamos ser tan melosos como quisiéramos sin temor a ser descubiertos.
- No puedo creer que lo hayas hecho de nuevo.
- Necesitabamos un día los dos solos.
- Parece como si hubieras planeado secuestrarme.
- Eso pensé hacer pero mejor no.
Le sonreí, simplemente me enamora casa día más, seguimos desayunando entre risas y lo más raro es que no haya sonado ningún celular eso de alguna forma me agradaba porque no quiero salir de este hermoso sueño.
Al terminar de comer salimos del restaurante y nos dirigimos al lago, era nuestro por un día entero así que que mejor que disfrutarlo.
Entramos y sentí como me cargaba en su hombro, después de eso sentí la suave cama debajo de mi, le di un beso rápido y el me correspondió, obvio sabía lo que pasaría o bueno tal vez no.
Se acostó en mi pecho y me abrazó, lleve mi mano a su cabello y comencé a dar leves caricias.
- Hobi
-¿Mmm?
- Te amo.
- Lo se.
- Es enserio, Te amo, te amo mucho Hoseok no quiero estar lejos de ti.
Lo mire a los ojos, creí que yo era él único que lo amaba de esa manera pero al parecer no, le sonreí y deje un beso en su frente.
Estuvimos un rato en la pequeña cabaña hasta que decidimos salir al lago, salimos y corrí hacia el lago, Tae venía detrás mío y se me ocurrió una idea.
Comencé a quitarme la ropa hasta quedar solo en boxers, Tae solo me observaba pero ahora que recuerdo no nos habíamos visto desnudos más que cuando teníamos relaciones, no habíamos observado cada detalle del otro.
En ese momento me sentí un poco tímido, vi como comenzaba a quitarse la ropa también, sabía que mi novio era hermoso pero no sabía que lo era al nivel de parecer un hermoso Dios Griego.
Me acerque hasta él e hice como si fuera a abrazarlo, sonreí y lo aventé hacia el lago, comencé a reírme al ver su cara de sorpresa y susto.
Asomó su cabeza y solo me miró, quise correr cuando vi que se acercaba a mi, me tomo con un brazo de mi cintura y se arrojó al agua conmigo, comenzamos a jugar en el agua hasta que simplemente nos quedamos sin fuerzas, talle mis ojos para evitar que les entrara agua y al abrirlos vi como me tendía una pequeña flor.
La tomé y la oli como siempre lo hacía, desde la primera vez que recibí aquel girasol Tae me da una flor todos los días, no siempre es la misma, todas han sido diferentes pero el sentimiento es el mismo.
Salimos del agua y sentí como el aire frío choco contra mi piel, tome mi ropa pero antes de ponermela ha estaba de nuevo en sus brazos directo hacia la cabaña, entramos a la habitación y nos cambiamos de ropa.
Puse una frazada suavecita en la cama y me metí bajo ella siendo seguido por Tae, me meti que entre sus brazos y sentí como acariciaba mi cabello, el momento era hermoso e único, o bueno así era hasta que escuche aquellas palabras.
- Hoseok.
-¿Si?
- Cásate conmigo.
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