Prólogo.

34 8 1
                                    

La vida de Kim Wooseok siempre fue sencilla y corriente, su familia tenia una buena posición económica así que a él y a sus hermanos nada nunca les faltó.

Su infancia fue muy buena y feliz, con unos padres amorosos que siempre lo engreían, esto debido a que nació con un rostro bello, que ha decir verdad él cree que es la causa de todas sus desdichas, pero gracias a su angelical apariencia su padre siempre tuvo cierta preferencia hacia el menor de los Kim, convirtiéndolo así en un niño algo mimado que nunca aceptaba un no como respuesta y era muy dependiente de las cosas.

Nunca tuvo problemas con ser un omega, es más, hasta le gusta la idea de alguien cuidando de él y complaciendo sus caprichos. No le interesaban los temas del amor ni del cariño hasta que, claro, le tocó a él enamorarse.

Han Seungwo era un alfa guapo, amable, siempre atento y dispuesto, caballeroso e inteligente, un hombre por el que preguntabas y cualquiera te respondería que es una deidad caída del cielo, todo el mundo caía rendido a sus encantos y por supuesto Wooseok no sería la excepción.

Eres muy lindo cuando sonríes, ¿lo sabes?

—Cállate.

—Eres muy lindo cuando me callas.

—¡Seungwoo!

Cuando el menor apenas tenía 18 años iniciaron su noviazgo, una relación llena de cariños, besos, salidas románticas y palabras tan dulces dedicadas por ambos. Sus citas eran casi diarias debido a que ambos estudiaban en la misma universidad y nunca se separaban, como si el estar más de doce horas lejos el uno del otro fuera quitarles la vida, simplemente no podían alejarse.

Para Wooseok, Seungwoo era de las pocas personas que lo comprendía realmente, más que un novio era su mejor amigo y confidente, el que siempre le hacía sonreír con cualquier tontería, era su lugar seguro.

Para Seungwoo, Wooseok era la cosa más preciada y delicada que podía tener, cada vez que lo veía sentía la necesidad de protegerlo, de amarlo y de cuidarlo, como si de una rosa se tratase.

¿En qué tanto piensas?

—Nada, solo estoy tan feliz de haberte conocido.

—¿A qué viene eso?

—Te amo, Wooseok.

Rápidamente los padres de ambos muchachos formalizaron la relación, y  propusieron que se casaran, aunque al señor Kim nunca le termino de converser ya que pensaba que nadie era suficiente para su bebé. Ambos jóvenes más que contentos  aceptaron y contrajeron matrimonio, comapron una casa y un perro y se mudaron.

Ambos terminaron la universidad y buscaron sus respectivos empleos, y a pesar de que trabajaban mucho, siempre tenían tiempo para estar juntos, supieron organizar bien sus horarios y se adaptaron. En las vacaciones iban a las afueras de la ciudad, a una cabaña que le pertenecía a la familia de Seungwoo, ahí pasaban las fiestas navideñas y de año nuevo, junto con su pequeño perro, Ginger.

¡Yah! ¿Por qué siempre tienes que cargarme como si fuera una novia en su noche de bodas?

—Porque siempre eres una novia en su noche de bodas.

—Ja ja ¿Qué quieres decir con eso?

—Tú lo sabes bien.

Eran un matrimonio muy feliz, casi nunca discutían y su amor iba creciendo cada día más y más, alfa y omega, ambos se complementaban tan bien juntos.

Sin embargo cuando las cosas no podían estar mejor, cuando eran una pareja fuerte y estable, cuando incluso tenían planes para tener niños, cuando ya habían pasado más de seis años juntos, la enfermedad tocó la puerta de su pequeño hogar y lo destruyó completamente.

A los veintiséis años su alfa murió.

Y Kim Wooseok se juro si mismo nunca más volver a enamorarse.

¿Si pudieras pedir un solo deseo cuál sería?

—Poder amarte para siempre.

_

hola, es mi primer libro (hace mucho quería escribir pero no me atrevía a hacerlo). prometo que los próximos capítulos serán más largos. aún no sé si hacerlo omegaverse o no:( si hay algun error me avisan porfa, mejorare con el tiempo y procuraré que esto no salga muy mal jdksdk.

 let's not fall in love (seungseok) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora