félix por error olvidó cubrir su web cam y ahora ha sido comprado por el mejor postor en la red oscura sin saberlo.
✶ félixharem fanfiction; hyunjin ♡'s félix
✶ au. horror. boys love. cambio de edades. escenario ficticio
✶ se mencionan temas sobre...
❝ Salvum me libera me. Suntlacrimaemeumsanguinem, habetmeispinæetpessimus daemon, quodadremum me.❞
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Mark niega frenéticamente asustado por Félix, confía en él pero sabe que el amor propio del pequeño rubio desapareció en cuanto Hyunjin lo hizo desearlo como a nadie, lo hizo amarlo de una manera tan cruel, lo condenó a tenerlo siempre en sus pensamientos.
─Félix...
─Escúchame, no te vayas.─ Le pide el mercenario mostrando una actitud arrepentida que remueve algo en el interior del adolescente. En cambio, Mark no le cree ni un poco.
─Lixie, sal de la casa, por favor.
─Mark, lo siento.
El rubio mayor le dedica una tajante mirada a Hyunjin e ignora sus palabras, sabe que quiere manipularlos. No sabe porque pero de inmediato logra descifrar las oscuras intenciones del mercenario, se da cuenta de lo obsesionado que está de Félix.
─Félix, hay que ir a casa, te llevaré a tu casa.─ Suelta el chico con el arma temblando un poco entre sus manos, está asustado por la intensa manera en la que el azabache lo está matando en medio de miradas.
A Félix se le iluminan los ojos cuando escucha al rubio, Hyunjin por primera vez después de tantos años está aterrado, sabe que nuevamente va a perder a alguien que ama.
Pero él no sabe amar. Sin embargo, cree que es así y nadie puede llevarle la contraria sin terminar con un disparo en el cuerpo. Ama a Félix, Félix le pertenece sin importar lo que digan los demás y sabe que es así, sabe lo mucho que ha influido en el adolescente pero al parecer no derribó su barrera emocional del todo.
─No me dejes, muñequito.─ Suplica esta vez deseando dar un paso hacia al frente pero Mark no se lo permite, no quiere que dejar que lo manipule a su antojo.
─No...vuelvas a llamarme así jamás.
─Me perteneces.
El rubio tiene que pellizcarse con fuerza el brazo para evitar la ansiedad que está a punto de tener, todo a causa de Hyunjin. ¿Por qué? ¿Por qué siente que va a morirse si lo deja? ¿Qué le pasa?
─¡Yo no te p-pertenezco! ¡A nadie le pertenezco!─ Respondió derramando lágrimas amargas, el mercenario lo observa detalladamente. Su carita está hecha un desastre de llanto, puede ver su pequeña naricita de botón roja y eso causa una desesperación en él. Quiere tocarlo.
─Lix, mierda, por favor. Déjame, y-yo...necesito estar contigo.─ Logra formular entre pequeños balbuceos, ¿Por qué se siente peor? Muchísimo peor que cuando vió morir a su amada, cuando vió a su hermano matarla.