ʀᴜꜱꜱɪᴀɴ ʀᴏᴜʟᴇᴛᴛᴇ [YUNANDO]

2

El camino a la Sede fue largo y cansado para cierto pelirrojo que se quedo dormido entre los brazos de Armando. El mayor apreciaba el rostro del pequeño, de como sus rosados labios estaban entreabiertos soltando uno que otro suspiro, esas pestañas largas que caían como cortinas sobre sus cachetitos regordetes, le encanta como esos brazos y piernas se ferraban a su cuerpo en busca de calor por la corriente de aire que chocaba con el helicóptero, simplemente perfecto pensaba el mayor.

Ya habían llegado pero Yun seguía dormido y Armando no tenia ganas de despertar al pequeño así que lo acomodo en sus brazo y lo cargo en modo princesa, sentía como Yun volvía a esconder su cabeza en su cuello y se acurrucaba a gusto en sus brazos.

Sinceramente se le había quitado las ganas de regañarle por la falta de responsabilidad que mostró pero decidió que mejor lo haría mañana.

Subió las escalera perezosamente, de ver a Yun dormir tan plácidamente le dio ganas de dormir también.

Abrió la puerta de la habitación como pudo y pensaba que de castigo dejaría  a Yun durmiendo solo pero cuando lo quiso separar de su cuerpo, los brazos de Yun que envolvían los hombros de Armando se volvieron más rígidos. Intento otra vez tratar de dejarlo sobre la cama pero el pelirrojo no se despegaba. 

— Se que estas despierto, suéltame Yun. — El menor que hace unos segundos se había despertado solo negó con la cabeza, volviendo su agarre más fuerte.

Soltó un suspiro cansado y con el menor todavía en sus brazos se dirijo hacia la puerta y la cerro para luego apagar la luz.

Sin siquiera cambiarse de ropa se recostó con el menor en la cama arropando el cuerpo de los dos, cuando Yun aflojo ligeramente su agarre, Armando se quito la mascara y gorro que todavía tenia puesto.

Bajo la mirada a el rostro del pelirrojo encontrándose que este se había vuelto a dormir, suspiro y abrazo la cintura del menor, sintiendo como sus músculos se relajaban y al final pudo dormir tranquilamente.

Se despertó y lo primero que percibió antes de abrir los ojos fue un peso sobre su pecho, los comenzó abrir lentamente pero la luz que entraba por la ventana hizo que los achinara.

Pestañeaba hasta lograr acoplarse a la luz que chocaba contra su rostro, y de pronto escucho balbuceo cerca suyo, agacho la mira encontrándose con el cuerpo de Yun acurrucado sobre su pecho. Una imagen muy bonita a su parecer, cuando dormía se veía tan indefenso e inocente, todo lo contrario a lo que es en realidad.

Su ensoñación fue cortada de golpe al escuchar gritos y risas de la primera planta, cuando no.. sus niños comenzaban a hacer alboroto, y si Armando los consideraba como sus hijos, como familia.

Yun se comenzó a mover encima suyo parece que estaba despertando, Armando solo veía su rostro y como sus cejas se fruncían hasta que Yun abrió un ojo lentamente.

Esto le causo risa al mayor, que soltó una carcajada y el pelirrojo se asusto cuando Armando se movió por la risa. 

Sobresaltado abrió los dos ojos a la par y su boquita formaba una "O", el mayor al ver su reacción se carcajeo más aun en realidad se estaba muriendo de ternura, le causa mucha ternura todo lo que hacia el asiático.

Yun al verlo reírse de el, se le fue el susto y se puso como un tomate , se sentía humillado. Quedo sentado sobre la cintura de Armando y puso sus manos en equis mientras fruncía su ceño y trataba de reflejar fingido enojo.

— No me palece, glacioso. — Dijo avergonzado apartando la mirada.

El pelinegro se levanto poniéndose frente a frente con el pelirrojo y lo agarro de la cintura apegando su cuerpo más a él. Yun se puso nervioso ante la cercanía y para tratar de separarlo puso sus manos en el pecho del contrario.

 — Apalta... malicon — Conectaron miradas y las dos reflejando los mismos sentimientos.

Armando sonrió de lado, le causa gracia como era Yun. Recordó lo de ayer y del porque debería de estar enojado con el menor, suspiro pesadamente.

— Ya aparta, chaval. 

— No pienses que se me olvido lo de ayer.  — Miro el rostro de Yun se deformo en nerviosismo pero lo ignoro y se levanto, saliendo rápidamente de la habitación del pelirrojo dirigiéndose a su habitación.

Mucho soft por ahora, pero ya se vendrá el drama.

 

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