- Hola Noah - lo salude, el giro su cabeza y me saludo con su mano - Bueno ya estas sentado así que empezemos.
Saque la venda de su brazo para ver unas pequeñas quemaduras enrojecidas son de primer grado no son tan graves. Limpie y luego tome la crema correspondiente para luego vendar.
- Listo - le sonreí.
- Gracias - dijo mirando su pie.
- De nada hasta luego - salí de el cuarto sonriendo.
Seguí con mis pacientes, estaba conversando con Gladis ya que ya me había encargado de mis pacientes de hecho eran las 8:54 de la noche mi turno termina a las 7:00 veo una camilla rápidamente pasar y la madre de Mía coreer junto a la camilla, miro a Gladis se lo que puede estar pasando.
Espero un rato ahora mismo estoy en la sala de urgencia, no hay nada nuevo, en este mismísimo instante se me ocurre ir a ver a Noah, ¿vamos?, mierda ya me dio inseguridad.
- Gladis ya vengo - ella me miro y asintio.
Fui hasta el cuarto y di como siempre tres pequeños golpes.
- Hola, venia a ver como estas - le dije y le sonreí.
- Bien ¿y tú? - pregunto mirandóme on sus bonitos ojos.
- Muy bien gracias - la sala quedo en un silencio hasta que el hablo.
- Sientáte si quieres - me invito, me sente en la silla.
- ¿Y qué te gusta hacer? - empeze a hablar.
- Me gusta escribir - contesto - ¿y a ti te gusta escribir?.
- No lo he intentado no me llama mucho la atención - le dije, mire arriba descansando y relajando mi cuerpo en la silla ya lo necesitaba.
- Mmm deberias aveces escribir dejar salir todo, hay un lugar donde voy en mis ratos libres... no sé talvez ¿quisieras ir conmigo?- pregunte sonrojandose como el otro día.
- Claro, solo que sería el jueves mi día libre - cruze mus piernas para mas comodidad .
- Oh yo salgo mañana, ¿entonces el jueves? - pregunte sonriendo.
- Si no tienes algo que hacer, si - lo mire a los ojos.
- ¿Me das tu número? - dijo tomando su telefóno que estaba al lado de la camilla.
- Claro, anota - le dicte mi número y salí de el cuarto.
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Sé eterno corazón
Teen FictionTe amo, palabras marcadas que tienes, ¿porqué?, porque es su único recuerdo valido, el que perdura en tu mente manteniendóte firme en la idea de que nada fue un sueño, de que él si existio, ¿o no?, sino fue así no me explico, pero se sintió tan real...