"Cuando la angustia llegue,
Cuando la depresión acose, miralas pero no las abraces, contemplalas pero no las invites"Anónimo
La Depresión, ese feo y agrio sentimiento de que todo está mal, de que tú estás mal. Ese momento donde pasó todo de ser blanco y negro, a ser solo negro.
Unas nubes oscuras que nublan nuestra vista y percepción del mundo, que nos hacen ir hasta el borde de la abismo para luego arrepentirse y no saltar. Dónde todos son más felices que nosotros y todo nos molesta, no sentimos nada... ni tristeza, ni felicidad, ni ira.En esos momentos estamos obsoletos, no servimos para nada, nuestro cerebro no procesa ninguna información o situación, por lo que si, somos inútiles. Y esa sensación solo nos hace sentir peor.
Te sientes vacío, desolado, ves a tu alrededor y no ves nada. Es como estar en una habitación llena de ventanas pero nadie puede verte u oírte, tú lo ves todo, escuchas todo, ves la vida de los demás pasar y la tuya solo está estancada ahí condenada a ver el mundo correr y girar, las agujas del reloj solo parecen ir más rápido cuando tú no sientes nada. Te sientes roto, como si algo te faltará pero no sabes qué, algo en algún momento se rompió, rompió tu espíritu, tu alma, tu motivación desapareció y ya no queda nada dentro tuyo.El peor momento es cuando la única persona que lo sabe y lo nota eres tú, porque nadie a tu alrededor parece darse cuenta de que te pasa algo, porque has estado así por tanto tiempo que ya piensan que eres así. Cuando en realidad sólo ven lo que tú les muestras y nada más, ven esa sonrisa falsa, la risa ensayada frente al espejo, te haces invisible para que nadie pregunté. Tu atención disminuye y todo lo que antes amabas se vuelve aburrido.
A mí me gustaba pintar y escribir poemas, pero ya hace mucho tiempo que no lo hago y no es porque no lo intenté, lo intento todos los días con la esperanza de que me vuelva a gustar, de volver a ser esa niña feliz y social, que amaba la vida tal y como era. Ahora todo es gris, todo es aburrido y no hay nada que me haga sentir algo, solo vacío. Te adaptas luego de tanto tiempo a esto, hay días en los que estás contento y otros en los que quieres tirarte por las escaleras de un octavo piso. Esas noches sin poder dormir porque mil cosas pasan por mi cabeza, tantos errores que recuerdo, tantas imperfecciones, tanta infelicidad que solo me hace querer llorar con todas tus fuerzas, hasta quedarte seca y dejar de sentir. Pero nunca puedo llorar, solo no me sale o algo dentro mío no quiere para no estar más mal de lo que ya se está, para no sentirse más roto de lo que ya estamos.
Pero por alguna razón jamás he pasado de intentar, nunca me he animado, siempre hay algo que me dice que no lo haga, que algún día algo dentro de mi va a cambiar, que talvez y solo talvez alguien se de cuenta de que me pasa algo grave de que realmente esto es serio y me ayude, porque después de muchos intentos sola yo no puedo, no puedo intentar cambiar algo que no piensa de otra forma. El sentimiento de soledad es mucho, estoy rodeada de personas que solo son personas, ni amigos ni nadie que me quiera, solo personas, exceptuando a mis padres claramente, que se niegan a ver de qué pasa algo o simplemente están muy ocupados como para notarlo.
Aún tienen esa imagen de niña pequeña que está sola y aislada del mundo, viviendo en un mundo de fantasía y alegría. Pero esa niña se murió hace mucho tiempo, tanto que ya ni la recuerdo.
No recuerdo esa época en la que llegaba a casa y no me sentía sola o triste, donde en la escuela tenía amigos que me hablaban y me querían. Ya no recuerdo a esas personas, ni esos momentos ni a mí.Pero de eso trata la depresión, de estar mal, de ver quienes son tus amigos y quiénes no, quienes te prestan atención y a quienes no les importas. Pero más importante aprenderás a amarte a ti mismo, poco a poco, porque sí, las personas que tenemos depresión necesitamos ayuda, apoyo y amor, y aunque no queramos, es un problema y uno muy grande, uno que necesita de un psicólogo o medicamentos para mejorar, para seguir adelante y para poder empezar a vivir, romper una ventana de la habitación y salir a correr al mundo, a ser parte de él.
Y gritar tan fuerte que todos van a tener que mirarte, a prestarte atención y a darse cuenta que tú no eras así, esa persona triste con cara larga que ellos veían, no eras tú sino esa pantalla oscura que no dejaba que vieras nada, solo oscuridad y que con el tiempo te vuelve loco.Pero con mucho trabajo y aceptación podrás encontrar a alguien que te ame más de lo que tú te amas a ti mismo que vea algo más en ti, que nadie ni tú ves, que te dé un motivo para seguir adelante y finalmente ser feliz.
Aunque sabes que son palabras falsas, a veces hay que vivir una mentira para empezar a sentir la realidad.
GRACIAS POR LEER❤️