Best Years

Único

Corría por los pasillos de la impoluta mansión Prince, tratando de esconderse de los adultos y sus primas mayores, queriendo ignorar el llanto desconsolado que se perdía mientras más se alejaba rumbo a los jardines donde intentaría convencer a su hermano menor de mentir para excusarlo de la travesura que acababa de cometer.

En un inicio, cortar el brillante cabello de Severus parecía de lo más divertido, pero ahora el arrepentimiento lo alcanzaba, no solo por las lágrimas que caían por las pálidas mejillas de su amigo sino por la expresión furiosa que se podía imaginar en el rostro de su madre.

Aquello lo tenía preocupado en demasía, el no volver a los terrenos Prince hacía que un nudo se formara en su estómago por la molestia, solo el pensar en que Grimmauld place seria todo lo que vería hasta los once años que partiera a Hogwarts en lugar de él hogar de su encantador mejor amigo que soportaba más de lo que debía, lo llevaba a querer lloriquear en disculpas.

Pues sabía que su exigente madre, Walburga estaría increíblemente avergonzada de tal atentado al único heredero de una familia tan importante como lo era Severus, apenas el año pasado por insistencia había conseguido un encuentro entre ambos dado que el pequeño mago fértil era resguardado por sus abuelos igual que un tesoro.

Teniendo el mínimo de contacto con el mundo mágico ellos eran de los pocos privilegiados en conocerlo y aún más en acceder dentro de las protecciones de la familia, así que, el hecho de hacer llorar a Verus era un sacrilegio. Por ello, arrepentido y jadeando por que el aire llegara a sus pulmones se dejó caer al lado de Regulus, sentado en una manta blanca sobre el pasto del patio, tomando el almuerzo que él se había enneciado en saltar.

Corto de tiempo le dio la misma sonrisa que sacaba al momento de querer obtener algo de él, provocando que le respondiera haciendo una mueca, dejando su recién diente faltante a la vista. Frunciendo el ceño Reg miro por el pasillo, seguramente buscando a su madre que no tardaría en llegar para reprenderlo y el prometió rápidamente —Todas mis ranas de chocolate durante un mes si dices que estaba almorzando contigo.

Su hermanito negando con las mejillas sonrojadas en concentración, de seguro queriendo contra ofertar, le señaló hacia delante para que prestara atención, escuchando los pasos de unos tacones moverse velozmente, preocupado espero que aceptara su oferta y este le dijo —Dos meses.

Boquiabierto por la astucia del menor, apretó los labios en una silenciosa queja y asintió, para al fin ver a Walburga llegar a su dirección, todo roja de la rabia y apretando sus rojizos labios, mirándolo únicamente a él.

—Sirius Orion Black— dijo, en un tono contenido que mostraba su molestia a la vez que lo alzaba del suelo para sujetarlo de los hombros, clavando sus uñas en el chaleco que traía para ese día caluroso. Fingiendo no saber que sucedía sonrió de forma feliz diciendo —¿Si madre?

—¿Te atreviste a cortar el cabello de Severus? Merlín, eres la decepción de la honrosa casa Black, ahora sus abuelos no nos querrán nunca más en Prince Manor, ¿Qué demonios estabas pensando? — hablo y el torció los labios, adolorido por el agarre para decir— Todo el tiempo estuve con Regulus almorzando, no sé a qué te refieres madre.

Aumentado la furia de la bruja, la vio alzar su mano y abofetearlo lo suficiente para hacerlo tambalearse, anonadado decidido guardar silencio, sabiendo que la pequeña esperanza de que ella creyera en sus excusas no funcionaria. Miro a Regulus, gacho de la cabeza, asomando sus ojitos asustados pidiendo perdón por no intervenir ni por su trato y solo asintió, haciéndole notar que esta ocasión el problema en que estaba metido era más grave de lo normal.

Por lo cual camino tras Walburga cuando ella se movió adentro de la mansión hasta llegar a la habitación en que Severus estaba sentado en un diván, hipando ligeramente al verse en el espejo que lo mostraba ahora con el cabello corto y uniforme, de seguro gracias a su abuela que lo consolaba besando su coronilla mientras decía lo bonito que se veía.