– CAPÍTULO 2: AFLORANDO LO INEXPICABLE –
Había transcurrido más de una semana desde la visita de Saint a la casa de Zee y casi nada había cambiado desde entonces en cuanto a sus rutinas y las actividades a realizar, pero dentro de lo que se podía llamar "casual" para los dos, la realidad estaba un poco distorsionada.
Zee no sabía con exactitud lo que pensaba Saint sobre aquella noche, mucho menos cuando no se había dado la oportunidad de verse. Últimamente Saint estaba muy ocupado con su agenda y poco era lo que conversaban. Tampoco ayudaba el hecho de que sus mensajes no contenían nada especial o diferente a sus conversaciones anteriores. Saint era el mismo de siempre, y por lo tanto Zee también. En pocas palabras, parecía como si nada hubiese ocurrido.
Acaso, ¿todo había sido un sueño? ¿Lo imaginó? Llegaba a preguntarse cada vez que terminaba de mandarse textos con Saint, pero los mensajes que se enviaron aquél día le confirmaban que no había sido producto de su imaginación o mente necesitada por lo que su esperanza se renovaba.
Pero entonces... ¿qué ocurría? Si Saint actuaba con normalidad con él era porque probablemente no quería que las cosas entre los dos cambiaran. Mentiría si dijera que prefería mantener su relación justo como lo hacían antes de ése día, pero tampoco esperaba que se alejaran. No quería para nada eso. Saint era sumamente importante en su vida, no se imaginaba estar sin él. Desde que se conocieron no hicieron más que apoyarse, cuidarse y compartir momentos juntos, momentos que atesoraba y resguardaba fielmente en su corazón. Sabía que para Saint era igual, ya antes lo habían hablado y era claro que ambos compartían un vínculo lo suficientemente poderoso como para decir abiertamente cuánto se querían.
Sin embargo, existe una fina línea entre quererse como amigo a quererse como algo más. Era ahí en donde radicaba el asunto.
Zee antes ya había besado, pero Saint fue el primer hombre al que besó. Cuando sus labios se tocaron por primera vez, su corazón golpeaba dentro de su pecho con fiereza, como si en cualquier momento fuera a salir disparado. Era imposible olvidar ésa sensación y sabía que siempre lo llevaría en sus recuerdos como un secreto silencioso. Después de todo, admiraba a Saint y saberse su compañero para una serie de contenido bl logró que todo su ser fuera un revoltijo de emociones que nunca antes había experimentado. No era nuevo en el medio, pero sí dentro del campo de la actuación por lo que debutar como actor sumando los objetivos que tenía la serie, lo llenaron de expectación y emoción; y Saint se convertiría en prácticamente su mentor.
Un beso llevó a otro, y a otro más. Fueron en aumento, así como en intensidad. Zee y Saint siempre estuvieron comprometidos en desempeñar su respectivo papel con profesionalismo, pero entre más pasaba el tiempo, menos se contenía. Todo tiene un comienzo, y lo que en ellos inició como una chispa ahora era una serie de eventos en donde su amistad y poderosa química se convertían para revelarse en un fuego ardiente que se mantenía apaciguado para no arrasar con todo a su paso.
Así es como Zee lo sentía. Ya no podía seguir guardando y soportando el brioso fuego que se acrecentaba tras cada noche, cuando recordaba los labios de Saint y su arrasadora manera de provocarle y entregarse.
En medio de su habitación, recostado boca arriba sobre su colchón, Zee guió la mano derecha a sus labios, cerrando los ojos y suspirando, sintiendo su aliento caliente chocar contra sus yemas. Sumergido en sus pensamientos – una vez más – trataba de averiguar qué es lo que pasaba por la mente de Saint. Lo cierto era que no quería presionarlo, ni hacerlo sentir incómodo, sobre todo cuando sabía lo ocupado estaba. Suficiente era con que él mismo se mantuviera con el perfil tranquilo y normal con el que era caracterizado. Se incorporó sentándose y estiró un poco, masajeando su cuello en el proceso para aminorar la tensión de la zona. El día había sido satisfactoriamente productivo, puesto que sus clases de actuación, las cuales habían abarcado gran parte de su tarde, le dejaron un muy gratificante sabor obteniendo buenas enseñanzas y experiencias que esperaba aplicar muy pronto en un nuevo proyecto.
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SERENDIPITY OR DESTINY
RomanceZee y Saint saben perfectamente lo que significa ser famoso y reconocido: pueden ser amados, seguidos, juzgados o criticados, pero eso depende del punto de vista de cada quien; eso no impide que ambos continúen viéndose, hablando y divirtiéndose, si...