—Loren!. ¿Crees que tu habitación se limpiará sola?. Escuché los gritos de mi madre desde la cocina, reclamándome para organizar mi habitación. No tenía ganas, no me sentía preparada. Estaba cansada y lo menos que quería era escuchar sus quejas de todos los días.
—No quiero!—. Grité como respuesta con enojo.
—Ven acá—. Empezó a advertirme. Sé cómo es su juego. Grita y vuelve a gritar hasta que no pueda más y tenga que pedírmelo a las malas maneras pero no pensaba responder aún. Era cómo un león esperando a su presa solo que mi situación era un poco distinta.
—Si no vienes te iré a buscar yo—. Gritó por tercera vez.
Madres pueden ser un amor algunas veces pero otras veces no tienen mejor trabajo que pedir y pedir. Así era mi madre. No paraba de pedir y nos colocaba a ambas a la esquina de un Barranco pensando quién caería primero. Es por eso que algunas veces pienso doble sobre mí y los que me rodean.
Bufé, tomé mi celular y bajé las escaleras por más que no quisiera para encontrármela en la cocina y debo decir que el camino fueron horas ( 5 minutos) .
Estuve exactamente 10 minutos "ayudando" en la cocina. Escucharla mandarme de un lugar a otro para organizar, limpiar y arreglar.
—Algún día yo tendré control de mi vida—. Pensé
—Ahora que piensas?—. Preguntó en un tono tranquilo sabiendo lo curiosa que puedo llegar a ser cuando no hago nada y me quedo segundos o minutos mirando a la nada. Alguien podría morir a mi lado y no habría forma de que yo me entere si estoy mirando a la nada. —En que es hora de irme—. Salí de mis pensamientos, tomé un vaso de agua y sin respuesta de su parte salí por la gran puerta. Estaba muy cansada asi que decidí ir a la casa de Ana, mi mejor amiga desde que tengo memoria. Siempre presente pero molesta algunas veces.
Salí y crucé las calles hasta llegar a su apartamento.
En casa de Ana...
—Dios!! dime—. Dije sacudiéndola y ansiosa por saber de que me estaba hablando.
—No!. No te voy a decir!.—. Me gritó.
Ella me había dicho que conoció a un chico muy lindo en una tienda y que de repente ya eran novios lo cual no me parece raro ya que esta chica está acostumbrada conseguir uno cada año por sus características físicas. Sus claros ojos, su melena rubia y rostro fino, piel clara. Hermosa y graciosa es cómo podía describir a mi amiga pero igual de molesta que mi madre.
—Si no me dices, gritaré que eres lesbiana—. Dije retándola. Moría por saber su nombre y no podía dejarlo así. Amaba retarla forzándola a decir las cosas que quería ocultar recordando esos momentos en primaria cuando la retaba a que le diría a él curso que su merienda era falsa o que se copió de un niño para hacer la tarea.
—Qué?. Tú no lo harías—. Dijo y lo único que consiguió fue activar mis ganas más con más deseo para hacerlo.
—Crees que no?—. Me detuve a observarla y inmediatamente ya estaba lejos de su vista. Me asomé a su ventana y grité: LA CHICA QUE VIVE AQUÍ ESSS.. justo cuando iba a decirlo Ana me tomó de la cintura y me tapó la boca para callarme aunque lo único que ganó fue una mordida de mi parte en su mano.
—¿Estas loca?—. Me dijo apartándose de mí y sobando su mano. De respuesta la observé sonriente, unas de esas miradas asesinas.
—Acéptalo porque no te diré nada—. Se volteó para darla la espalda y se cruzó de brazos.
—No me hables—. Dije en tono bajo como si fuéramos niños otra vez cuando el mejor castigo era no hablarnos la una a la otra.
—Aww yo tambiem te amo—. Se volteó denuedo y se acercó a abrazarme.
—Ahora debo decirte algo—. Mañana iremos a una fiesta en casa de Justin—. Dijo sentándose a mi lado en la cama y aclarando bastante rápido mis próximos planes los cuales no me molestaba. Me gusta ir de fiesta y cuando es con amigos, se vuelve aún más interesante. Asentí en forma de respuesta y sonreí.
Justin es otro amigo nuestro. Es calmado algunas veces y otras no es el chico más amable del planeta. El problema para las mujeres es que es muy lindo pero es gay y eso lo daña. Sus ojos cafés y pelo negro pero suave provocan las ganas de tocarlo y verlo por horas. Viste a su forma entre chaquetas y pantalones apretados para mostrar que está disponible aunque no fuera para mujeres. Igual de gracioso y nos conocimos gracias a nuestra maestra, quien decidido castigarnos a ambos.
*Flashback*
—Ahora me caes bien—. Dijo una voz extraña detrás mío.
Observe a la maestra y mientras escribía algo en la pizarra volteé para ver de donde provenía aquella voz . A menos de un metro, tenía unos ojos cafés brillantes y una sonrisa mirándome dejando su comentario atrás y apreciando toda su belleza. Llevaba una chaqueta de cuero y mordía una goma de mascar pero no dejaba de mirarme.
—Tu eres...—. Sostuve mi oración esperando una respuesta. —Justin—. Sonrió y extendió su mano hacía mí la cual acepté y volvimos a sonreír.
—Un gusto estar aquí entonces, contigo—. Me detuve para pensar que acababa de decir?. No tenía una mejor manera de coquetear?.
—Dejémoslos como amigos—. Respondió.
*End of flashback*
—Ahora vete—. Dijo Ana señalando la puerta y forzándome a levantarme de la cama mientras me arrastraba por la espalda y me sacaba de su habitación. ¿Por qué?. Pregunte antes de que cerrara la puerta en mi cara.
—Porque vendrá mi nuevo novio y no lo verás—. Dijo y resaltando la palabra Novio.
—Como digas mala amiga—. Me volteé enojada y caminé hasta la salida.
En el camino recibí una llamada de Lauren. Otra de mis mejores amigas aunque no tan "amiga" ya que no hablamos tanto como suelo hacer con Ana pero es alguien que confío si la necesito.
—Deje su mensaje después de la señal—. Dije apenas contesté la llamada.
—No me cuelgues—. Amenazo pero no obedecí. No quería que me contara algo más sobre su vida y las cosas que pasa en un momento cuando yo estaba pasando por un momento estresante con Ana y su novio enmascarado.
Continué mi camino en paz y alegría hasta mi casa.
Hola!. Estoy empezando a editar la novela otra vez >.<. Que creen de esta edición?. Espero que les guste y como recompensa, una escena extra.
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El novio de mi mejor amiga
Teen Fiction[Editando. Algunos capítulos ya están actualizados] Loren suele ser una chica un poco alocada y con un orgullo alto. Junto con sus amigos forman el grupo perfecto. Ana, una de sus mejores amigas y ella siempre fueron inseparables pero ¿Qué pasará cu...