Advertencias: Historia de amor BL, sin lemon, recuentos de la vida.
Disclaimer: Los personajes no me pertenecen, así como los fanarts y gifs que se ocuparon para esta historia; con fines de entretenimiento.
Noticias: Anuncios especiales al final del capítulo.
Pensamientos y "Pensamientos"
-Dialogos- y -Dialogos-Infantil. Era una palabra con la que Haru bien podría describir el comportamiento de su esposo en esos precisos momentos. No obstante, acorde a su conducta, lo tacharía más bien como un hombre que ha perdido el juicio. Llevando a cabo un acto verdaderamente irracional.
-¡Daisuke, por Dios! Mira la cara del pobre niño, lo estás aterrando- reprimió Haru no muy lejos de dónde se encontraba su esposo, quién había esposado de ambas manos a un infante en el tubo de un juego de pasamanos.
-Otousan- llamó Suzue entre los brazos de Haru, hipando entrecortadamente. Estaba asustada, y no exactamente por lo que su pelinegro padre pudiera hacerle a ese mocoso, no. Más bien la pequeña Kambe estaba así debido a la sangre que no dejaba de salir a chorros por dentro de su dentadura.
-Ya cariño, todo está bien, no pasa nada- respondió con suavidad, tratando de apaciguar el llanto de Suzue, y sin quitar la vista de lo que Daisuke pudiera hacerle a la pobre criatura desafortunada que le había tumbado por accidente un diente a su hija.
La tarde comenzó apacible. Las últimas olas de frío que siempre frecuentaban a principios de primavera se habían reducido; gracias a una ventisca cálida del sur, acompañada de cielos cubiertos por nubes blancas. En definitiva el tiempo perfecto para salir a dar un paseo en familia.
Con Haru, quién ya no tenía acumulados trabajos pendientes, y con Daisuke, quién se había tomado un día libre, los ruegos por parte de Suzue en ir a jugar al parque recreativo, no muy lejos del departamento, tuvieron sus frutos.
Haru la vistió con una linda y sencilla blusa de manga larga color amarillo mostaza, que bien podía pasar como vestido, dónde en medio lucía un bonito estampado de flores de girasol. Y bajo la misma prenda le colocó unos mallones cálidos qué le permitirían libre movilidad. La peinó en una coleta alta, atando sus finos cabellos negros con un listón amarillo; formando un pequeño moño, mientras Daisuke se encargaba de ponerle el calzado deportivo; unos tenis blancos procedentes de muy buena marca y calidad.
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The Sweet Family
أدب الهواةEstilos de vida totalmente opuestos, y aún así, Daisuke y Haru hacen que la rutina de casa-trabajo funcione; casi de maravilla. Después de todo nadie dijo que la vida de casados sería fácil, menos con una pequeña hija que criar de por medio. -Fora �...