Luciale ❤

Anéctodas

Alex se quedó callado y yo ya no aguantaba el silencio que se había formado – Alejandro, vas a hablar o te quedarás callado!! – Alex giró su rostro y tenía un semblante entre asustado y triste – Lo siento Lu, solo no es por dónde empezar – Su voz sonaba opaca y fue ahí donde entendí que mi tono de voz había sido más fuerte de lo que esperaba y me arrepentí de haberle hablado así – No Alex, la que se tiene que disculpar soy yo, no debí haberte hablado así, solo es que tu silencio hizo que me pusiera nerviosa – El me quiso dar una sonrisa pero más bien fue un mueca – No tienes que disculparte Lu, solo que sabía desde donde empezar, pero ya lo sé y tengo después de que me dejarás o más bien dejaras a Ale – Sin querer mis ojos se llenaron de lágrimas  al recordar ese día – Lu, no llores, quiero contarte desde ahí porque me parece que debes saber cosas que pasaron después de esa semana y no quiero que llores por favor, eso ya pasó y lo importante es que ahora estamos juntos – Alex era el mejor, yo solo me acerque a él y lo bese, esta vez sí me sonrió – Verás, el día que me dejaste me dolió, pero entendí que era difícil para ti y no sé como pero acabe en un parque que no conocía, estaba solitario y  comenzó a llover demasiado, me quedé sentado en un banco que estaba allí y llore demasiado, estaba completamente empapado y decidí regresar a mi casa, pero de camino pasé por el dinner y te vi – Cuando dijo eso recordé que ese día había quedado con Benjamín – Estabas con Benjamín y casualmente se besaron enfrente de mí, me dolió bastante y corrí lo más lejos que pude durante horas, estaba realmente enojado y triste, no sé como pero justo pare enfrente de un bar y entré, comencé a beber sin importarme nada hasta que la señorita de la barra me preguntó si estaba bien y ya no pude más y comencé a llorar, ella me ayudo a caminar ya que iba demasiado mal y me guio hasta un cuarto donde supuse que dormía, sabía que probablemente jamás nos volveríamos a ver así que decidí contarle lo que había pasado esa tarde, también le conté sobre mi orientación sexual y que me sentía como un varón, pensé que me rechazaría y me pediría que me fuera, pero al contrario me abrazó y me dijo que no llorara por nadie y que hiciera caso a tus palabras y me alejara de ti, también me dijo que les contara a mis padres de cómo me sentía. Como estaba demasiado borracho me llevó a mi casa en cuanto termino su turno, pensé que se iría pero no fue así, entró conmigo y estuvo a mi lado mientras les contaba a mis padres como me sentí, cuando deje de hablar Reme y Emiliano estaban con una cara seria y yo baje la mirada y enseguida sentí como me abrazaban dos pares de brazos, eran mis papás, enseguida me dijeron que nos les importaba que me sintiera un varón, también les conté que había tenido novia y que me había dejado por ser trans, estaba realmente dolido y borracho, así que decidimos que lo mejor sería irnos – Las lágrimas se hicieron presentes al oír todo lo que había pasado ese día por mi culpa – Luego de la charla con mis papás me sentía mejor aunque no dejaba de pensar en ti y eso hacía que el enojo se hiciera un lugar en mi corazón, me alegraba que fuera sábado porque no tendría que verte a ti y a Benjamín juntos, el domingo salí de casa porque quería despejarme y pasó el accidente con Benjamín – Yo asentí al recordar lo que me había contado antes – Cuando me dieron el alta y regresé a mi casa Sofía la chica del bar me había hecho un pastel y desde ahí nuestra amistad creció, ella iba a verme todos los días después de su turno en el bar que trabajaba, cuando me recuperé del todo decidí que era momento de contarle a mi abuelo, pensé que me entendería pero al contrario de eso me rechazó y se fue de su propia casa, me dolió bastante su actitud así que deje de usar el auto que me había regalado meses atrás – Enseguida recordé su incomodidad con el carro que Tania le había mencionado – Te refieres al BMW negro? – Pregunté dudosa y el asintió – Si exactamente ese carro, después de eso mis papás decidieron que lo mejor era mudarnos así él regresaría a su casa y fue ahí donde yo di la idea de irnos a Miami, ellos enseguida aceptaron mi propuesta ya que ambos tenían ofertas de trabajo ahí, me dolió dejar a Sofía y Dani, pero ellos lo entendieron y me apoyaron en todo – Se notaba en sus ojos que el simple hecho de recordar eso le causaba tristeza – Y tú abuelo? – Me atreví a preguntar por Don Ramiro pero Alex apretó la mandíbula – Mi mamá lo llamó para decirle que ya se podía regresar a su casa porque nos íbamos de Houston y dijo que sería lo mejor ya que no quería saber nada de mí, de ahí mi mamá lo llamaba a diario pero cambió de número y jamás llamó y yo no lo busque, la verdad no sé nada de él aún – Una lágrima se abrió paso por su mejilla y la limpio bruscamente – No te da curiosidad saber de él – Pregunté y vi que la vena de su cuello se marcó en señal que estaba molestando– No y no quiero ser grosero pero no quiero hablar de él – Estaba realmente molesto y no quería seguir insistiendo – Está bien, mejor sigue contándome – Soltó un suspiró y continuó – Cuando llegue a Miami comencé el tratamiento de testosterona, de ahí la mastectomía y por último la reasignación de sexo – Me quedé sorprendida en cuanto mencionó las dos últimas cosas – Y te dolieron mucho las cirugías? – Noté como sonrió triste – La verdad me dolió demasiado, pero valió la pena, aparte mis amigos estuvieron siempre ahí, incluso recuerdo que Sofía estaba en la sala de espera junto con mis papás, de verdad me sorprendió y creo que saber que tenía el apoyo de mi familia y amigos me ayudo a sobrepasar todo – Sus palabras sonaban muy emotivas – Cuando me recuperé comencé a entrenar con un coach privado ya que quería estar en el equipo de Fútbol Americano del High de Miami, el coach Mikel me hizo entrenar demasiado todos los días para poder mejorar mi técnica y  ponerme en forma, en cuanto entre al High me sentía raro, ya que todo era más grande, gracias a mis notas tuve una beca en uno de los mejores High School, las primeras semanas me costó adaptarme pero gracias a mis amigos logré incorporarme y en una ocasión dije delante de todo el salón que era trans y para mi suerte todos me aceptaron, eran los mejores, me fueron a apoyar cuando hice las prácticas para entrar al equipo, todos mis compañeros y amigos estaban en las gradas con carteles, siempre estuvieron ahí de la misma forma y me atrevo a decir que cada vez me sorprendían más ya que a cada partido que teníamos ellos mandaban a hacer una playera con mi nombre, los que más marcaron mi vida son Andrés, Miguel, Carlos, Martín, Ethan, Cristopher, Michael, Santiago, Henry, Samm, Verónica, Sandra, Lola, Joana, Natalia, Macarena y Fernanda, la mayoría de los chicos eran del equipo y las chicas eran porristas q excepción de Lola, a ella la conocí gracias a Ethan, todos son especiales para mí - Los ojitos de Alex brillaban y eso me encantaba - Se nota que los quieres demasiado - El me vió y asintió - Los quiero muchísimo - Daría lo que fuera por regresar el tiempo y estar a su lado - Y como se conocieron Tania y tú? - Alex se tenso por mi pregunta - La conocí un día que estaba fuera del edificio donde trabajaba mi mamá, nos chocamos accidentalmente, ella estaba buscando a su mamá ya que trabajaba ahí también  y debido a que ella no conocía muy bien el lugar me ofrecí a ayudarla a buscar a su mamá, al final resultó que su mamá, Verónica, era amiga y compañera de trabajo de mi mamá, desde ese día nos hicimos inseparables ya que ella iba a estudiar en el High donde yo estudiaba, la verdad que al principio me costó reconocer mis sentimientos hacia ella porque tenía miedo pero al final terminamos juntos, salíamos a diario después de nuestros entrenamientos ya que ella era la capitana de las porristas - Me dieron un poco de celos cuando Alex me estaba contando su historia con Tania, así que decidí tambiar de tema - Me alegro que hayas encontrado a alguien que te quiera, y bueno, cuéntame cómo es que bailas tan bien o mejor dicho dime qué cosa sabes hacer - Pregunté en tono divertido ya que por lo que tenía entendido Alex baila, juga Fútbol americano, juega Soccer, Basquetbol y un montón de cosas más que desconocía -  Bueno jaja no es que sepa todo, se algunas cosas - Dijo modestamente y yo abrí los ojos en señar de asombro y el se rió - A ver, se bailar por culpa de Tania, al salir de los entrenamientos nos íbamos a nuestro Arcade favorito para jugar en la maquina de baile como a ella le encanta bailar yo accedía, un día vió que había una competencia de baile y nos inscribió y me obligó a aprender, fue divertido y al final aprendí a bailar, cuando terminó la temporada de fútbol la selección de soccer necesitaba un jugador ya que uno se había lesionado y como yo era buen pateador apoye al equipo, el básquetbol era un pasatiempo que heredé de los León, a todos les gusta ese deporte al igual que el béisbol, se un poco de gimnasia gracias a Tania, ella siempre hacia coreografias conmigo que terminaba bailando frente a todos, la verdad hay más cosas pero no sé cuáles son - Yo lo miraba asombrada, Alex no podía ser más perfecto - De verdad que eres perfecto - noté como Alex se sonrojaba y yo me moría de ternura, estuvimos hablando un rato más hasta que Remedios nos llamó a comer, yo ya me sentía más tranquila después de saber lo que pasó en la vida de Alex.

Siento mucho no haber actualizado en varios días, pero la verdad no me convencía lo que escribía, aparte de que tengo que estudiar para los exámenes y esas cosas, espero les guste el capítulo de hoy, se que es largo pero se me hizo importante explicar algunas cosas.

Mañana quizá suba 3 capítulos por el estreno de 100 días para enamorarnos en Netflix.

LOS AMOOO