Once

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"J-Jungwoo" Yukhei se separó, inhalando fuertemente.

El mayor miró el menor un poco impaciente, molesto con que haya roto el beso tan pronto "¿Si?".

"Tu... ni siquiera sabes como me siento y ya eres así?"

Jungwoo abrió sus ojos sorprendido "Lo dice el que me ha besado primero".

Yukhei no le miró a la cara cuando le respondió "Para ser honesto... a veces mis acciones no reflejan como realmente me siento".

"Yo..." el menor mordió su labio antes de decir "He hecho eso de impulso".

Jungwoo parpadeó "¿Qué?".

"Todo lo que he hecho era solo diversión... yo no siento lo mismo que tu, perdon por ser tan impulsivo antes. Si -Si te he hecho daño lo siento".

Jungwoo ni siquera pudo formular una palabra cuando el otro chico se había ido, dejando la puerta de la cabina completamente abierta.

Jungwoo caminó fuera de la cabina, la ropa de pareja siendo olvidada. Sus ojos buscaron por la tienda a Yukhei, pero ya había desaparecido.

La chica del staff que les había ayudado miró a Jungwoo preocupada, pero no le dijo nada mientras él salía de la tienda con indeferencia.

Fue solo cuando estuvo fuera, que las palabras que le dijo Yukhei le calaron.

Jungwoo sintió lágrimas amenazando con salir de sus ojos, pero consiguió retenerlas mientras caminaba, ¿a donde?, no tenía idea. Decidió ir a donde sea que sus piernas le llevaran.

Me usó como entretenimiento  para sus coqueteos y me abandonó así sin más. Justo cuando estaba empezando a sentir algo por él.

Jungwoo metió sus manos en los bolsillos de su sudadera, sus dedos enrredándose entre ellos y con la tela de dentro fuertemente.

Justo cuando pensé que podríamos tener algo.

La tristeza se transformó en enfado y Jungwoo se encontró furioso con Yukhei.

Cerdo de mierda.

Jungwoo por fin se dio cuenta de a donde se dirigía.

El edificio donde se encontraba el apartamento de Sicheng se mostró, y Jungwoo suspiró aliviado. Realmente necesitaba consuelo ahora.

Especialmente de un ángel como Sicheng.

Jungwoo no sabía si el chino estaba en casa, pero tocó el timbre igual.

La puerta se abrió un poco y ahí estaba el chino sonriéndole.

"¡Hu-la Jungwooie!" saludó Sicheng con una sonrisa.

Jungwoo sonrió brevemente de vuelta "Hola Sicheng".

Sicheng frunció sus cejas mientras observaba los ojos rojos y los hombros encorvados del coreano confundido "Oh no... tu estar triste?".

Jungwoo se encogió de hombros y sorbió su nariz un poco "Si... un poco. ¿Te importa si paso?".

Sicheng asintió. Caminó detrás de Jungwoo y rodeó sus hombros adentrándole al apartamento.

Jungwoo se dejó caer en el sofá del pequeño salón de Sicheng. El chino se sentó junto a él y le miró preocupado.

"No pareces un poco triste" dijo Sicheng "Pareces muy triste".

Jungwoo no dijo nada. Si hablaba no sería capaz de contener las lágrimas.

Sicheng negó con la cabeza "Jungwooie... ¿Q-Qué ha pasado?".

Jungwoo negó, sin mirar a Sicheng.

Sicheng puso un brazo sobre los hombros del coreano y dejó que Jungwoo descansara su cabeza sobre él "E-Está bien llorar Jungwooie".

Con eso, Jungwoo dejó salir sus lágrimas.

Sicheng acarició el pelo de Jungwoo y hizo circulos sobre su espalda.

"Está bien".

Doubt. LuwooDonde viven las historias. Descúbrelo ahora