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Era temprano, pero se podía apreciar rayos del astro rey entrando por la ventana de la habitación de un niño que todavía descansaba sobre su cama. El chico se quejaba ante la molesta luz que "para su suerte" se había depositado en su rostro, y más específicamente, en uno de sus ojos. El pensaba seguir durmiendo, por lo menos hasta que su tía lo fuera a despertar, pero un fuerte ruido hizo que esa idea fuera imposible .Con un leve gruñido y los ojitos aún cerrados, intentaba apagar el despertador que reposaba en la mesita de noche justo cerca de su cama, pero al no calcular bien la distancia consiguió que saliera de la cama pero no con un buen pie, bueno, con ninguno de los dos, ya que en este caso, fue con la cabeza

--- Itai~ eso dolió --- se quejó mientras se sobaba la cabeza, se levantaba del suelo y se situaba frente al trasto infernal que hizo que su día no comenzara de buena manera; lo silenció dándole con su puño cerrado, no porque estuviera de mal humor sino que ese cacharro ya no funcionaba bien por sus años de utilidad.

El moreno se estiraba y bostezada al mismo tiempo, sintiendo como sus músculos se relajaban, al parecer ya estaba más despierto y más vivaz que nunca. Cuando se disponía a bajar para desayunar escucho el sonido de una notificación procedente de su celular, fue hacia su cama, donde se supone se encontraba el artefacto, lo tomó y vio en su pantalla de bloqueo un SMS de uno de sus amigos. Mostró una gran sonrisa ,y con móvil en mano corrió a su closet o guarda ropa, cogió su uniforme y fue en dirección al baño, ya después llenaría su estómago con la comida más importante del día .

Mi sexy profesor (RESUBIDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora