Abrí los ojos y los cerré de golpe al sentir la luz en mis ojos cégandome por completo. No había tenido mucho tiempo para descansar por lo que había pasado la noche anterior y Carter y Jake me debían una clara explicación sobre lo que le pasó a Derek. Me levanté y me duché para no seguir perdiendo más tiempo.
Cuando salí de la ducha me dirigí al armario y saque unos shorts rosa claro con una blusa azul oscuro y mis sandalias. Tomé mi telefono y mi bolso escolar y bajé para hablar con los chicos.
Cuando llegó al comedor me encuentro con una sonriente Jess y unos preocupados Jake y Carter, Derek no estaba, supongo que se estaba vistiendo o algo así.
-¿Estan listos?-.dije, estaba preocupada y asustada por lo que pueda pasar, Derek era mi amigo y no podía simplemente ignorar el hecho de que haya llegado a la madrugada y golpeado. Simplemente no.
-¿Listos? ¿Listos para qué?-. Preguntó Jess asombrada.
-Desayuna primero, luego les contaré.-dijo Carter
-Te recuerdo que hoy comenzamos las clases y no pienso llegar tarde-.dije, tal vez sueno odiosa y grosera, pero ¿cómo pueden estar tan tranquilos sabiendo lo que había sucedido la noche anterior? ¿Acaso no les importaba lo que le pasara a Derek? ¡Pues a mí si!
-¿De qué hablan?-.dijo una muy confundida Jess.
-Al diablo si llegas tarde o no, desayuna y les contaré todo luego que lo hagan.
Obedecí porque sabía que si seguía discutiendo con él se nos pasarían las horas volando y al final no me dirían nada. Empezé a saborear las tostadas con mermelada rápidamente para saber cúanto antes eso tan importante que había dejado a mi amigo herido.
Jake no dijo si una sóla palabra, era cómo si se sintiera tan avergonzado con lo que pasaría a continuación y prefería no hablar.
Jess, pues, estaba nerviosa y asustada. Terminé de comer y miré fijamente a Carter. Mi mensaje con la mirada era que hablara ahora mismo
-Te escucho-dije, dandóle una pequeña señal porque al parecer no pensaba decir nada.
En ese instante enttó Derek, sus heridas ya no se notabán tanto como ayer. Pero era obvio que había sido golpeado.
-¡OH! ¡POR! ¡DIOS! Bebé que te pasó?-.gritó una alterada Jess muy asustada y preocupada. Tomó el rostro de Derek en sus manos y lo obligó a verla a los ojos.
-Estoy bien reina. No te preocupes
¡Alto! ¿Le dijo Bebé? ¡Le dijo Bebé!
¿Qué pasa entre estos dos?
Y se besaron, Derek la besó.
¿DESDE CÙANDO NO ME ENTERO DE LAS COSAS QUÉ PASAN A MI ALREDEDOR?
¿SOY MUY EGOÍSTA Y NO ME DOY CUENTA DE LO QUÉ LE PASA A MIS AMIGOS?
Y Jess le devolvió el tierno y apasionado beso.
¿¡Derek y Jess tienen algo!?
-Ya que vamos a ser una familia por un muy largo tiempo, creo que lo más importante ahora es que nos contemos lo que pasa.-dije y Carter asintió.
Nos sentamos todos en el gran sófa, Jess a mi lado y al frente los tres chicos. Le dediqué a Jess una mirada especial diciendo {Hay algo que no me has dicho}
- Hace aproximadamente, los tres, tuvimos un pequeño inconveniente-empezó a contar Carter, tenía un mal presentimiento sobre de lo que me enteraría, Derek y Jake tenían la cabeza agachada y jugaban con sus manos- Asistimos a una fiesta, típicamente, como en todas las Preparatorias, hay un grupo de chicos malos, Marcus y sus gorilas, fueron malas personas y el error fue en no querer dejarnos humillar por ellos en público. Marcus empezó a burlarse de nosotros, nos dió una paliza, nos amenazó con herir a quiénes amamos y nos apuntarón con un arma para obligarnos a subir a su auto, esa misma noche. Nos llevó a un lugar en donde se hacían peleas callejeras y apuestas, eran más de 50 tipos golpeándonos y humillándonos. Nos apuntaron con todo tipo de armas, nos obligarón a inscribirnos y pelear, sólo para ellos divertirse, fuimos la burla del lugar, y de verdad se sintió mal.