Capítulo 3. "Me dijiste que tu ibas a estar allí"

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• Flashback…

Se escuchó un golpe en la puerta, sobresaltándome. Volviéndome, me encontré con los cálidos ojos marrones que pertenecían a Bruce e inmediatamente mi estómago se retorció.

- Hey, ¿puedo hablar contigo un segundo? Es urgente - El parecía nervioso, al borde.
- Asentí, sentándome - Claro, entra.
- Entrando, él se aseguró de cerrar la puerta antes de mirarme - ¿Estas bien? Llamé a tu teléfono y tu hermano me dijo lo que pasó.
- Si - Hablé, mi voz era ronca. Inclinándome, agarre el vaso de plástico ya lleno y lo llevé hacia mis labios, tomando un largo sorbo de agua - Estoy bien.
- Sus ojos se clavaron en los míos con tristeza - También me dijeron que sabías de lo de Justin... - El murmuró silenciosamente.
- Asentí aturdida - Por eso me desmayé - Respondí secamente, dejando el vaso de nuevo donde lo había cogido - ¿Él está bien?
- Él está... - Bruce se interrumpió, tratando de encontrar la palabra correcta - Nervioso.
- Eso es entendible - Murmuré, mi pecho pesaba con carga.
- Bruce miró hacia abajo a sus manos, sin saber por dónde continuar a aparte de ahí - Escucha, hay algo más que tienes que saber - Tragué saliva, sabiendo que había algo más en su visita y me preparé a mí misma para lo peor - Lo siento por ser el único en decirte esto… - Él me miró - Pero Justin no saldrá por un tiempo.
- ¿Qué quieres decir?
- Él está en un montón de mierda, Selena - Él lamió sus labios, tirando de su parte inferior en su boca - No creo que él vaya a ser capaz de salir de esto.
- Las lágrimas llenaron mis ojos mientras negaba con mi cabeza - No... – Susurré - No, él va a estar bien - Hice un gesto con una mano despectivamente - Él va a salir de esto, él siempre lo hace.
- Ellos tienen pruebas en su contra Selena. Ellos le vieron hacerlo. No hay manera de que él pueda salir en libertad. La policía tiene lo que habían estado esperando, durante años. Ellos tienen la prueba para encerrarlo... para siempre.
- No pude parar que las lágrimas cayeran por mis mejillas – No – Grité - No, él dijo que iba a venir. Él me dijo que todo iba a estar bien...
- Lo siento.
- ¡No! – Grité - Justin va a estar bien. Él va a salir de esto y va a volver a casa.
- Él no va a venir a casa, Selena- Bruce se movió hacia delante para intentar consolarme.
- ¡Él va a venir! - Grité - Él me va a visitar y me va a decir que lo siente por perderse la cena y que él me lo va a compensar - Lloré, golpeando mis puños contra el pecho de Bruce.
- No, él no va a volver - Bruce trató de hacerme razonar, mis puños no hacían nada mientras él me dejaba golpearle, tratando de capturar mis manos mientras tanto
- Justin me dijo él mismo que él lo iba a hacer. Él no me mentiría Bruce - Negué con mi cabeza, tratando de convencer no solo a él sino a mí misma.
- El hizo falsas promesas.
- ¡No! - Grité aún más fuerte, mis manos volaban en todas las direcciones, tratando desesperadamente de que se fuera.
- ¡Selena! - Bruce agarró mis muñecas, deteniéndome de que le golpeara más allá - Él se ha ido - El susurró y eso fue la última gota antes de que me rompiera en los brazos de Bruce esa noche, llorando histéricamente.

• Fin de flashback...

- Me prometiste...
- Esperaba - Justin habló por primera vez desde que empecé a hablar - Esperaba que algo como esto no pasara y no hubiera pasado si Luke no me hubiera tendido una trampa.
- Piensas con tu ira en vez de con tu cabeza. ¿Pensaste siquiera sobre como esto me podría afectar? - Le miré fijamente en shock por su arrogancia - ¿De verdad pensaste que Luke no haría un truco como ese? Si no me equivoco, Bruce te ha dicho innumerables veces que no hagas un golpe contra alguien justo después de que ellos te interroguen. Que esperes, y eso es lo que deberías de haber hecho, pero a cambio, hiciste lo que siempre haces. Nunca escuchas.
- ¿Cómo mierda podría haber dejado ir posiblemente a ese hijo de puta sabiendo lo que hizo…? - Tomando una profunda respiración, Justin bajó su cabeza durante un breve momento antes de mirarme – Yo… ¿Porque el repentino cambio de corazón? - Él se frotó la parte de atrás de su cuello - Estábamos bien y ahora... estamos, ni siquiera es el que - El susurró.
- Luché contra la urgencia de rodar mis ojos - No lo entiendes, ¿verdad? No soy la misma chica que tú dejaste hace tres años.
- Nunca te dejé - Él siseó - Siempre estuve allí... en tu corazón y tú sabes eso.
- Tú no estuviste allí físicamente y eso es lo que yo necesitaba. Necesitaba consuelo; necesitaba escuchar que todo iba a salir bien - Le miré - Y tú no podías hacer eso.
- Si hubiera podido, lo hubiera hecho sabes que es esa es la verdad - El respondió en voz baja, la tristeza envolvía sus ojos mientras el miraba a través de la habitación hacia mí.
- Ya no sé cuál es la verdad, cuando se trata de ti - Respondí sinceramente.
- Significas todo para mí - El murmuró, más para él que para mí, como si él estuviera compartiendo un secreto - Todo el tiempo que estuve encerrado como un animal en esa celda abandonada por Dios, todo lo que podía pensar era en ti; tu tacto, tus besos, tu sonrisa, tu pelo, tus ojos, solo... - El me miró - Tu.
- Basta - Negué con mi cabeza - Nada que digas o hagas va a hacer esto mejor.
- Él me miró hacia mí con completa incredulidad, sin ser capaz de creer las palabras que salieron de mi boca - ¿Qué puedo hacer para hacerte cambiar de opinión?
- Nada – Murmuré - No hay nada que puedas hacer porque ya tengo mi opinión - Susurré en voz baja.
- No puedo perderte - Justin susurró, sus hombros estaban caídos, sus dedos ahora estaban en su pelo - ¡No puedo perderte, maldita sea! - El gritó, poniéndose de pie rápidamente mientras tiraba la mesa, haciendo que cayera con un fuerte golpe. Miré fijamente, con tristes y confusos ojos mientras el paseaba por el suelo, murmurando palabras incoherentes bajo su respiración antes de voltearse para mirarme - No puedes dejarme - El murmuró, derrotado consigo mismo por su débil debilitación ante mi presencia - No después de todo lo que hemos pasado...
- Tragué saliva, sintiendo las lágrimas punzar en la parte trasera de mis ojos. Negué con mi cabeza, tratando de deshacer la simpatía que arañaba en mis entrañas - No podemos hacer esto más.
- ¿Hacer qué? - El escupió, incapaz de entender de donde venía - Te amo, ¿no es eso suficiente?
- ¡Si me amaras no me hubieras mentido! - Desprecié, la ira ahora estaba apoderándose de mí y ahí fue cuando supe que finalmente había tenido suficiente - Me prometiste que estarías allí. Me dijiste que llegarías tarde pero me dijiste que lo harías - Mi barbilla temblaba mientras aguantaba la necesidad de llorar. No me iba a debilitar y hundirme. Traté tan duramente de recomponerme y de ninguna manera en el infierno iba a romperme de nuevo. Justin me miró, sorprendido por mi repentino arrebato - Ni siquiera me dijiste que Luke me estaba viendo... - Hice una pausa, apretando mis ojos dejándolos cerrados - Tuve que averiguar a través de John que Luke estuvo allí... en mi cama - Mordí mi labio, sin ser capaz de creer las palabras que salían de mi boca al igual que no podía creer a John cuando él me dijo por primera vez - ¡Él me tocó y tú me hiciste creer que era algo más! Me hiciste pensar que simplemente estaba imaginando cosas pero en realidad sabías quien era… ¡¿Y no tuviste el atrevimiento de decirme que era Luke?!
- ¡Iba a manejarlo!... ¡Por eso no te lo dije! - El gritó, tirando de los extremos de su pelo, sus ojos tenían un color marrón oscuro - No quería preocuparte. Pensé que iba a deshacerme de él y no habría nada de lo que preocuparse…
- Pero a cambio te arrestaron - Me atraganté, mirando hacia abajo a mis manos mientras sentía una caliente sustancia deslizarse por mi mejilla y fue entonces cuando supe que yo me había fallado a mí misma - Dios, ¿cómo pudiste ser tan estúpido?
- ¡Estaba tratando de protegerte! - El gritó.
- Protegerme - Le imité con una burla - ¿Protegerme de qué? - Escupí, la tirantez entre nosotros se estaba extendiendo rápidamente.
- Luke - El disparó de nuevo - Al principio, cuando me enteré de que ese hijo de puta que no sirve para nada te estaba viendo…
- Espera, ¿qué? - Le miré en shock.
- Justin se quedó inmóvil, maldiciéndose a sí mismo mentalmente – Mierda… - Él dijo con voz áspera, frustrado consigo mismo.
- ¿Él me estaba viendo?
- Justin me miró – Sí - El afirmó, pasando una mano por su pelo una vez más como si el recuerdo estuviera todavía claro en su cabeza - Él me llamó esa noche y me dijo exactamente lo que llevabas por eso vine, para mantenerte a salvo.
- Wow, esto se pone cada vez mejor y mejor - Herví con una fuerte respiración, la ira latía en mis venas - ¿Alguna cosa más que me escondieras esa noche?
- No - Justin susurró antes de negar con su cabeza, calmándose a sí mismo - Lo siento - Él murmuró - Si pudiera retroceder todo, lo haría. Pero, no puedo - Él tomó una profunda respiración, sus manos en sus caderas mientras él se preparaba mentalmente por lo que estaba a punto de venirse abajo entre nosotros - Cuando me dijiste que sentiste a alguien tocarte y no era yo... me perdí. Todo lo que podía pensar era en mantenerte fuera de peligro y matar a ese hijo de puta para siempre, pensé que estaba bien, por poner sus manos sobre ti.
- Las lágrimas pincharon en las esquinas de mis ojos - Mi familia finalmente te dejaba entrar... ellos por fin nos aceptaban, las cosas estaban volviendo a la normalidad... - Levanté mi mirada para mirarle, mi visión estaba borrosa mientras negaba con mi cabeza - Pero tu arruinaste todo -Susurré.
- Podemos arreglar esto - El declaró con sus ojos desesperados - Sé que podemos. Al igual que todo lo demás, podemos trabajar en ello. Hemos pasado por cosas peores…
- Por favor - Alcé mis manos hacia arriba, burlándome - Por favor dime como hemos pasado por cosas peores - Le miré con incredulidad, como si él hubiera perdido su cabeza - Hemos pasado por muchas cosas, sí, pero nada... nada se compara a esto.
- Te dije desde el principio - Él hizo una pausa, apretando con fuerza sus ojos, tomando una profunda respiración mientras él la dejaba escapar a través de su nariz antes de abrirlos y mirarme con los ojos en ángulo recto - Que esto no iba a ser fácil. Te dije que mi vida no era un camino de rosas y, ¿Sabes que me dijiste? - El no esperó para que yo contestara; el en cambio, lo hizo por mí - Me dijiste que no te ibas a ir. Que tú estarías allí para mí no importaba cuantas veces la jodiera.

DANGER'S  BACK {JELENA} segunda temporada. {TERMINADA}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora