-Imagino que tienes una buena razón para despertarme tan temprano -dije adormilado y rabioso por el sueño robado por mi amigo.
-¡Si que la tengo! ¡Es martes y tienes que llegar a todas las clases! -respondió Louis recordándome mis deberes.
-¡Ya estaba despierto! -mentí.
-Si, lo que tú digas Zayn -dijo Louis. Lo escuché subirse a su auto -Recuerda que tenemos clase con la Sra. D, así que saca tu culo de la cama y muévete. Tienes exactamente 20 min. Pasaré por tu casa, más vale que te vea sobre tu moto con unas enormes gafas negras para que tapes la resaca que debes tener y dirigiéndote hacia la institución a la que tú, con tanto cariño, llamas el purgatorio en la tierra.
-Prácticamente ya estoy en la moto -respondí huraño.
-Por lo menos péinate y arréglate un poco -me dijo como si fuera un niño. Sonreí por lo bajo.
-Me urge acostumbrarme a estas horas de entrada -respondí mientras sacaba ropa del armario y entraba al baño -Por cierto Louis...
-¿Si? -dijo él.
-Gracias -dije.
-No es nada hermano -respondió.
Corte el teléfono y terminé de vestirme. Salí del baño y entré en la cocina para tomarme rápidamente un café. Reí por lo bajo al pensar que Louis ahora debía estar intentando despertar a Harry.
Terminé el café y tomé mis cosas. Salí de la casa y me acerqué a mi linda moto. La única mujer que nunca me reprochaba nada.
A lo lejos vi el auto de Louis y sin seguir dando vueltas prendí mi moto y seguí su auto hacia la institución. Pronto llegamos.
-Louis ¿Acaso nunca te cansas de ser tan responsable? -preguntó Harry recargándose en el coche de Louis en el lugar habitual donde nos reuníamos antes de entrar a clases, con una nota de admiración hacia su amigo.
De alguna forma había logrado que se levantara de la cama para llegar temprano y además había llegado a una cafetería y había traído cafés para los tres.
El aludido solo se encogió de hombros.
-Solamente trato de asegurarme de que mis futuros socios no sean unos completos y verdaderos inútiles -dijo quitándole importancia y mirando distraídamente hacia otro lado para evitar las miradas de gratitud de nosotros.
-De todos modos un día de estos te lo retribuiremos -dije mientras sorbía un poco de café y miraba hacia otro lugar al igual que Louis en un intento por que la situación no se volviese más sentimental de lo que ya estaba.
-¡Eso es un hecho! -afirmó Harry mientras le daba un golpecito afectuoso a Louis. Ciertamente Harry era el más afectuoso de los tres, Louis el responsable... y eso me deja a mí el lugar de.... Soy el patán del grupo. Esa conclusión me hizo sonreír -¿Ves? ¡Hasta Zayn esta sonriendo! Somos tan afortunados al tenerte Louis -dijo y le dio otro golpecito esta vez uno más fuerte provocando que Louis derramara un poco de su café.
-¡Genial! ¡Esta hirviendo Harry! -dijo cambiando la taza de mano y secándose la otra en la ropa del castaño.
-Lo siento -dijo resignado a que valía más dejar que se secara en él.
-Mira quien viene ahí -dijo Louis mientras prendía un cigarrillo y hacia que Harry sostuviera su café -¿No fumas hoy? -me preguntó sorprendido.
-Esta mañana me es más urgente tomarme este café para despabilarme un poco -dije.
En ese momento el auto al que había llamado mi atención Louis estacionó al lado de mi moto, justo enfrente de donde estábamos nosotros reunidos.