¿Y si nos volvemos a encontrar?

Capítulo 3: primer día de trabajo

*Matthew*
¡Mierda, mierda, mierda!- digo mientras veo la hora en mi reloj. La maldita alarma no funciono. Mientras me levanto de la cama rápidamente, me dirijo a la ducha y cuando salgo me visto en segundos. -¿Por qué tenías que fallarme justo hoy?- Digo enojado mirando a mi reloj en mi mesa de noche como si este pudiera sentir culpa o remordimiento. Primer día en un nuevo trabajo y llegó tarde, las primeras impresiones cuentan mucho. 

Salgo velozmente de mi apartamento, y aunque llevo viviendo poco tiempo acá desde.... ¡no Matt!-me digo a mí mismo-no quiero pensar en eso. Hoy es un nuevo día, empezando un nuevo trabajo en una buena empresa, positivismo ven a mí.

En lo que llego al estacionamiento, voy comiendo mi croissant y bebiendo mi café, abro la puerta de mi Toyota y pongo la dirección en el GPS. Mientras me dejo guiar por la voz de este maravilloso invento, pongo en aleatoria mi playlist, sonando Come on mess me up de Cub Sport, mis gustos musicales son muy variados, si alguien me pusiera a cargo de la música sería un desastre, escucho desde pop hasta metal.

Al fin llegó y menos mal estoy justo a tiempo, -uf que suerte- susurro, no quería llegar tarde mi primer día y además esta compañía trata muy bien a sus empleados, ya que quienes lo soliciten les proporcionan un lugar de estacionamiento, por lo que encuentro rápido el lugar que me asignaron y bajo velozmente del auto para luego apretar el botón y cerrarlo mientras me alejo. Entro al ascensor y parece que no soy el único al que le paso un imprevisto hoy, ya que escucho un grito -¡Detengan el ascensor! - pongo mi brazo velozmente para detener la puerta del ascensor. Era un hombre bien vestido diría que en sus 30, como yo.

-¡Muchas gracias!- me dice mientras extiende su mano, recuperando el aliente, a lo que yo le devuelvo el saludo.

-Es mi primer día aquí- a lo que mis ojos se abren de sorpresa.

-El mío también- le digo a lo que él me sonríe-Me llamo Klaus- dice.

-Yo Matthew, pero me suelen decir Matt -me presento. Ahora que lo veo más de cerca es rubio de ojos azules.

-Vaya que día nos espera -me dice Klaus con un tono preocupado.

-Si la verdad espero que todo nos salga bien en nuestro primer día- digo con el mejor tono que puedo. 

-sí, bueno hay que dar lo mejor! En que área estarás?-me pregunta.

-En el área de tecnología- le contesto.

-Yo también! Eres ingeniero de sistemas-me dice casi afirmándolo.

-Aa... no estaba enterado de que contratarían a varios de nosotros-digo sorprendido.

-De hecho sí ... si no me equivoco han contratado 3 ingenieros contándonos a nosotros 2, la compañía buscaba desesperadamente personal altamente calificado para su desarrollo de software, entre otras cosas- me explica.

-Vaya... - digo pensativo.

-¿No lo sabías?- me dice en tono de pregunta, riéndose un poco.

-De hecho...por los nervios no pregunte muchas cosas - digo mientras mi mano va a frotar la parte trasera de mi cuello, en señal de vergüenza.-Solo me enteré que estaban buscando ingenieros de sistemas y esta al ser una buena empresa para trabajar postule de inmediato.

Se ríe -Solo te estoy molestando, no te preocupes, seguro hoy se te van los nervios y te adaptas bien- me dice con una sonrisa tranquilizadora.

-Sí, esperemos que sí, intento ser positivo-me rio por lo bajo, a lo que Klaus me coloca su brazo sobre los hombros como si fueramos amigos de toda la vida y me dice- Tranquilo saldrá bien- bueno parece que ya hice un amigo del trabajo pienso. 

Sonrió por lo rápido que Klaus agarro confianza conmigo. En lo que las puertas del ascensor se empiezan a abrir, aclaro mi garganta como señal de que hay que mostrarnos profesionales y Klaus capta la situación también y baja su brazo rápidamente. Cuando las puertas se terminan de abrir salimos a paso apresurado, dirigiéndonos a donde estaría el jefe del departamento de informática y tecnología, a quien debíamos reportarnos hoy al llegar solo por ser el primer día.

Tocamos la puerta de vidrio opaco de la oficina del jefe de nuestro departamento.

-Buenos días- decimos Klaus y yo al unísono.

-Buenos días- nos dice el jefe de nuestro departamento con una sonrisa amigable-Me presento soy Raúl.

-Mucho gusto señor Raúl, mi nombre es Klaus y él es Matthew- dice Klaus señalándome, ahora que se me habían ido un poco los nervios podía analizar a mi jefe, era un señor en sus 40 diría yo, cabello castaño oscuro y ojos de un gris fascinante.
-Mucho gusto- le digo mientras aprieto su mano extendida en forma de saludo.
-Bien! Klaus y Matthew hoy es su primer día. Y por eso se les asigno un mentor, cualquier duda pueden preguntarle, esta para guiarlos, ya si sucede algo que requiera mi intervención, háganmelo saber. 
- Hola jefe, quería verme?- en eso Klaus y yo nos giramos hacia la voz que acabábamos de escuchar. Era un hombre en sus 30, cabello castaño claro y ojos ... diría entre un azul y verde. Porque todos aquí tienen ojos tan bonitos? Y yo con un color común como café.
-Hablando del rey de Roma -dice mi jefe extendiendo su brazo hacia el hombre en la puerta- Este es su mentor, Daniel, uno de los mejores empleados del departamento. Lleva con nosotros 6 años ya. 
-Oh... ellos son los recién llegados- nos dice extendiendo su mano a ambos- Mucho gusto, soy Daniel- se presento. Y este es Jack-dice señalando a un hombre con rasgos asiáticos que apareció a sus espaldas.
-Perfecto, ya se conocen los 3 recién llegados- dijo nuestro jefe-Daniel los guiará en como funcionan las cosas aquí. Bueno a trabajar!- dijo juntando sus manos y causando el sonido de un aplauso. Cosa que me hizo sobresaltar un poco. Bueno a comenzar bien el día de trabajo, pienso dando una leve sonrisa y asintiendo.

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LV16