¿Tejiendo alas?
Capítulo 2.
Camino para entrar en la consulta del médico, no le he dicho nada a mis padres, he preferido venir sola.
Varios fans me han parado por el camino y nos hemos hecho fotos después de hablar un poco con ellos.
Siempre suelo salir con tiempo suficiente por si tengo que entretenerme, como en este caso.Una nueva notificación llega a mi teléfono, suspiro antes de abrirla. No le doy al clic, prefiero seguir sin verla, sin saber nada de él.
Ayer logré quitar la foto que tenía como fondo de pantalla de nosotros, ya no hacía nada ahí.
Quizás unos días más y pueda sentirme con fuerzas de hablarle y al menos darle la noticia por teléfono.Me siento a esperar mi turno, me sudan las manos, estoy nerviosa. Es mi primera ecografía, es la primera vez que voy a ver a mi bebé.
Muchas veces me habia imaginado este momento y siempre en mi cabeza estaba la imagen del papá a mi lado.
Ahora no hay papá, no lo sabe y no tengo muy claro cómo se lo va a tomar cuando se entere.
Él ahora está en otra relación por lo que dicen las webs de cotilleos, y yo me quedé en el recuerdo de los dos.
Quizás lo mejor sea no contarle nada, que siga viviendo su vida olvidando mi existencia. Que no sepa nunca que de nuestro amor va a nacer lo mejor que voy a tener en la vida.-¿Eva María Barreiro? -Me levanto al escuchar mi nombre, la mujer de aproximadamente la edad de mi madre me sonríe y me señala el camino hasta dentro de la habitación.- ¿Cómo estás? ¿Náuseas?
-Ya no, al principio era casi diario.
-De acuerdo. -Mira en el ordenador fugazmente y su mirada vuelve a quedarse fija en mí.- ¿Cuando tuviste la primera falta?
-Hace unos tres meses. Fui al médico porque no me encontraba bien y me dijo que estaba embarazada.
-¿Deseado?
-No buscado.
-Bien, ¿Vamos a la camilla a ver como está? -Le sonrío mientras se coloca los guantes. Camino hasta tumbarme donde me indica y levantarme la camiseta ancha que llevo. Apenas se me nota aún el pequeño abultamiento de mi barriga.- ¿Has sangrado?
-No. -Un escalofrío me recorre todo el cuerpo cuando el gel toca mi piel. Está muy frío y la doctora sonríe al ver mi reacción.-
-Apenas se te nota aún. -Yo solo le sonrío mientras veo como empieza a mover el aparato con el que vamos a poder ver como está mi bebé sobre el gel que tan frío está.- Vamos a ver... -Tarda unos segundos en volver a hablar, mira la pantalla que está a mi derecha. Yo no consigo ver nada, todo es demasiado confuso, demasiado borroso.- Ahí está.
-¿Ahí donde? -Señala la pantalla pero sigo sin poder distinguir nada. Me mira sonriendo divertida.-
-Es normal que no lo distingas, es demasiado pequeño aún. Vamos a imprimir la pantalla y te explico donde está. Se ve muy bien. -Me sonríe mientras toca algo en la máquina.- Escucha. Vamos a escuchar su corazón latir. ¿Y el padre? -Un nudo se forma en mi garganta al pensar en él.-
-Es complicado.Las palabras quedan en un segundo plano al empezar a escuchar un ruido, sonrío al saber de que se trata, es el latido del corazón de la personita que está creciendo dentro de mí. Va muy rápido. Como saque el nerviosismo de Hugo me voy a querer morir corriendo detrás. Sonrío al imaginar si será un niño o una niña, intento imaginar si tendrá el pelo rubio o castaño, si sacará mis ojos o los de él... Sea como sea, ya quiero verle esa carita y no dejar de darle besos. Noto como una lágrima cae por mi cara, pero es de felicidad al escuchar como todo va bien.
Poco después salgo de la consulta, con una dieta a seguir y algunas recomendaciones. Guardo el sobre con la ecografía de mi bebé en la mochila que tantas veces nos ha acompañado en viajes. Suspiro y dejo caer sobre mi nariz las gafas de sol.
Marco el número de teléfono de mi padre, está en su casa y es hacia allí a donde me dirijo. Será el primero en ver a su nieto o nieta. Mi madre aún está en el trabajo.
Cojo un taxi que me deja en la puerta de la casa de mi padre. Llamo a la puerta y enseguida me envuelve entre sus brazos, tirando de mí hacia dentro.
Me lleva hasta el sofá donde nos sentamos los dos.
Veo con una sonrisa en su cara como él también sonríe y alguna lágrima se le escapa al ver las manchas que dentro de poco será un bebé que podrá tener en sus brazos.
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¿Tejiendo alas?
Fanfic¿Tejiendo alas? Introducción. Mi vida ya no me pertenece solo a mí, dejé de ser solo yo hace tres meses. Justo cuando nuestra historia llegó a su fin. Parece irónico que de un final, salga un comienzo. El comienzo de un camino nuevo por explorar...