Capítulo 9

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-Espera!-Esa palabra hizo que obviamente me detuviera, yo seguía con mi mano aferrada al frio picaporte

-La puerta esta algo trabada, no podras abrirla tu sola linda-Sentí la tibia respiración de Kendall chocar en mi cuello. Abrió y forzó la puerta por detrás mío. Quise darme vuelta para pedirle que me lleve a mi hotel pero volví a pederme en su penetrante mirada verdosa.

-Sabes, me encantaria darte más sorpresas como estas Mika.-Me sonreía.

-Y a mi me encantaria recibirlas Kendall, pero me tengo que ir ahora, ¿Si?.-Lo empuje un poco con mis manos.

-Suspiró-Esta bien.

-Mañana hablaremos sobre esto, no te enojes.

-No me enoje linda-Sonrió-¿Te llevo a casa?

-Eso te estaba por pedir-Le sonreí y no me pregunten porque, pero le di un pequeño beso.

Salimos del depósito y luego del local para que el me lleve en su hermoso BMW gris a mi Hotel.

Kendall venía escuchando un CD de Incubus y como a mi también me encantan, iba cantando la canción que sonaba en el momento.

-Bromeas?-Gritó Kendall haciendome volver a la realidad.

-Eh?-Dije algo exaltada y despegando mi vista de la ventana.

-Estabas cantando "Light Grenades", te escuché! ¿Acaso conoces Incubus?

-Pues, me encantan. Y eso es gracias a mi tío.-Agregué.

Dicho eso Kendall me sonrió y le subió un poco al volumen; veníamos cantando ambos al unísono y el de vez en cuando giraba su cabeza y me miraba risueñamente...de seguro debe ser porque me sabía toda la canción a la perfección. Luego de unos 5 minutos de viaje por fin llegué al Hotel.

-Kendall bajo el volumen del radio-Bueno, gracias otra vez por traerme.-Sentí como la sangre me subia a las mejillas.

-Siempre y cuando quieras linda, Schmidt va a estar a disposición tuya.-Me sonrió calidamente mientras se acercaba para saludarme.

-Eres un id...-No pude terminar la oración ya que fui interrumpida por un dulce, lento y corto beso. Nos separamos y al instante de hacerlo Kendall me habló.

-Mañana hablaremos, verdad?-Su mano izquierda estaba aferrada al volante y la derecha le brindaba caricias a mi pierna.

-Me acerqué a el rosando su nariz-Ya te dije que si Kendall, despreocupate un poco-Reí por lo bajo.

-Esta bien linda-Besó mi nariz-Adiós.

-Adiós Kendall-También besé su nariz y me baje del auto, cerré la puerta para dirijirme a las pequeñas pero largas escaleras de la entrada del hotel, Kendall tocó bocina para despedirse y yo entre a la recepción.

Me encontraba sola, frente a la puerta del ascensor esperando a que se abriera, mientras que mi cerebro seguía tratando de procesar lo que pasó hace un par de varios minutos. La puerta del ascensor se abrió y entre, marqué el número del piso de mi habitación y subí. Lo primero que hice al entrar a mi habitación fue ir a mi cuarto, dejar mi bolso tirado sobre el mini sofá y despojarme de mi ropa para darme una ducha rapida y llamar lo antes posible a May para disculparme con ella y Logan. Salí de la tibia ducha en menos de 10 minutos, me envolví en la toalla, escurri y peiné rapido mi corto y fino cabello y salí del baño para entrar a mi cuarto; me puse mi ropa interior (pero solo la parte de abajo) y mi pijama que consistía en una delgada playera de tiras con nada en la parte de abajo, la verdad hace mucho calor estos días para dormir con mas de dos prendas...

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