Erase una vez

Capítulo 16: Perdón

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El palacio estaba en silencio, salvo por el trabajo de los sirvientes y las pocas conversaciones sin sentido que tenían lugar en los pasillos, el palacio estaba completamente en silencio, no había ningún Señor del Fuego Zuko persiguiendo al Avatar, no había ni Miss Beifong ni Lady Katara, reprendiendo al Señor del Fuego por perseguir al Avatar, la princesa Azula y los guerreros Suki y Sokka no se rieron de esto, pero, lo peor de todo, no hubo Avatar cortejando a la señorita Beifong, no hubo más paseos por el jardín, no más charlas de colores, no más abrazos y no más besos secretos (o públicos).

Zuko (de todas las personas), había tenido suficiente, y este hecho se dio a conocer cuando volvió a atar al Avatar en su oficina.

Aang también había tenido suficiente, de Zuko persiguiéndolo, eso es, él miró a su alrededor, al menos no había guardias en esta época. "Pensé que habías terminado de perseguirme."

Zuko continuó caminando, había estado paseando desde que Aang se despertó en su oficina. "¿Qué pasó entre tú y Toph?"

Aang comenzó a tirar de las ataduras, sabía que este era el equipo de Azula, pero esto era ridículo, él era el Avatar, por el bien del Espíritu. "¿Qué te hace pensar que pasó algo?"

"No trates de hacerte el tonto", dijo Zuko. "Katara me lo dijo."

Aang se detuvo, debería haber sabido que Toph podría habérselo dicho a Katara, fue Katara, ella era la máquina de chismes de todos. "Lo siento, pero no creo que esto sea de tu incumbencia".

Zuko se burló, pero siguió caminando. "Es cuando Toph lloró."

Lo que significaba que realmente estaba en un gran problema.

El corazón de Aang se detuvo, tan enojado como estaba con ella, no quería que llorara, ni siquiera quería imaginarlo, no podía, sacudió la cabeza, se suponía que debía estar enojado con ella. "Toph no lloraría, no por algo como esto."

"Eso no es lo que dijo Katara."

El estómago de Aang dio un vuelco, espíritus, se suponía que estaba loco, luego, sacudió la cabeza y se rindió. "Bueno, ¿Qué esperas que haga? No puedo ser el único que haga todas las declaraciones aquí, Zuko".

Zuko dejó de caminar y le dio una cara de '¿Estás bromeando ? "¿De eso se trataba tu pelea?"

Aang tragó saliva, bien, quizás Katara no le contó todo a Zuko, pero, ya estaba dicho y no podía retractarse, el asintió.

"¿De verdad esperas que ella te devuelva los sentimientos? ¿En voz alta?"

Bueno, esperaba que ella lo hiciera, Aang asintió de nuevo.

"Pobre, tonto y estúpido joven Avatar", suspiró Zuko antes de comenzar a caminar. "Toph no es como otras chicas, no es femenina y remilgada como el resto."

"Dices eso como si yo no lo supiera."

Zuko continuó sin inmutarse. "El hecho de que ella no lo diga no significa que los sentimientos no sean devueltos".

"Espera, ¿Qué acabas de decir?"

Zuko lo ignoró y continuó hablando, de hecho, dio un discurso completo sobre la importancia de la paciencia, el amor y las declaraciones.

Aang suspiró y se relajó en sus ataduras, no tenía sentido tratar de decir algo, Zuko acababa de empezar con el honor, lo que significaba que estarían allí por un tiempo.

Él se sentó contra la curva de la pared de la bañera y ella se sentó entre sus piernas, de espaldas a su pecho, estaban callados y en esta posición desde que Katara se fue, pero no le importó, estaba bastante contento con solo abrazarla en el silencio hasta que llegó el momento de irse, apreciaba los momentos tranquilos con ella, le rodeó la cintura con un brazo y le besó la cabeza.