Locura ||C.V. Y TÚ||TERMINADA

C7

Abro mis ojos con pesadez, quiero moverme, pero algo me detiene
Me despierto completamente y estoy recostada sobre una mesa metálica, tengo manos y pies atados a esta, no puedo moverme.
Estoy en una habitación oscura solo con una lámpara alumbrandome

—¿Hola? ¿Alguien? —Dije confundida, ¿Por que me tienen aquí? ¿Qué sucede?

—Oh, por fin despiertas —Me dice un enfermero, lo miro asustada, no se que hago aquí

—¿Qué hago aquí? —Pregunto nerviosa, él se acerca a mi y coloca un pañuelo amarrado en mi boca, comienzo a forcejear, no entiendo que está pasando

Es entonces que él me mira con una sonrisa macabra, puedo ver como hay una cicatriz atravesando la mirada de su cara, sus manos de dirigen a aquel pantalón blanco y lo baja, dejando su miembro masculino al aire, mis ojos se abren con sorpresa

No, por favor... No

Empiezo a rogar a todos los santos que conozco, él se acerca a mi y me abre el overol, yo comienzo a llorar aterrada y niego con mi cabeza, pero eso no parece detenerlo

Con astucia me baja el overol hasta las rodillas, mi mira con una sonrisa macabra y sin compasión, se hunde en mi, dejando suspiros de desahogo, comienzo a poner resistencia, pero no puedo siquiera moverme, él comienza con movimientos rápidos, siento un inmenso ardor en mis genitales, con de mi comienza a salir probablemente sangre, las lágrimas no dejan salir de mis ojos, solo quiero que esté infierno acabe...

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—Fuiste todo un placer —Dice mientras desata mi pies y manos, caigo al suelo totalmente deshecha, mis piernas escurren sangre y apenas y puedo moverme

—¿Por qué lo hiciste? ¿Por qué me tienes aquí? —Dije en medio de llanto y dolor, él solo reía mientras negaba con la cabeza

—Queria un buen rato... Y estás aquí porque empezaste a alucinar con muertos —Me dice y lo miro confundida, ¿Qué? ¿Muertos?

—¿Qué? —Dije apenas con voz audible, él me mira con una sonrisa mientras yo termino de colocarme con esfuerzo mi overol

—Si, eso de que Christopher te perseguía, cariño, los muertos no persiguen a nadie —Dice y yo lo miro asustada

¿Muertos?

Él... ¿Muerto? 

—No, Christopher no está muerto, él está internado en este hospital, él está vivo... Yo lo ví —Dije confundida

No, quieren volverme loca

¡Quieren volverme loca! ¡Quieren volverme loca!

—Ese chico se suicido hace dos años y medio lanzandose de la azotea de hospital... Tú solo eres otra demente que debió haber leído su expediente y ahora alucina con él —Dice y yo niego

¡No! ¡No estoy loca! ¡No estoy loca!

¡No fue una alucinación!

Es entonces que él tipo me ve con gracia, como su fuera yo un circo
Se con la lámpara alumbra unas gabetas, dónde se acerca y comienza a buscar, hasta que al parecer encuentra algo y me lo entrega

Es una noticia de un periódico, con fecha de junio de 1894
Justo en esa nota se ve una imagen de Christopher y está la encabeza un título "El suicidio del joven asesino"

Este artículo hablaba de un chico de 25 años el cual había asesinado a 9 hombres y 2 mujeres, entre estos muertos estaba su padre y su hermana mayor, mis manos tiemblan y siento como mi cabeza comienza a doler

¡No estoy alucinando! ¡No estoy alucinando! ¡No estoy loca! ¡No es mentira lo que digo!

Sin más, salgo de ahí con rapidez, sin importarme el dolor que siento en mis genitales, corro con rapidez hacia la azotea mientras escucho gritos y deseos por detenerme

Corro hacia la azotea y al salir, bloqueó la puerta con un enorme barrote, es metálica, al menos eso me dará tiempo, al darme la vuelta, puedo ver a Christopher

Nos miramos a los ojos y suelto un suspiro

Ya no se que es real y que no, mi mente es mi peor enemigo y me está haciendo sufrir demasiado

—No eres real —Digo y él sonríe

—Si lo soy —Me dice y yo niego

—No, no lo eres, eres un producto de mis alucinaciones —Dije y él niega, lentamente se acerca a mi

—No se que es lo que pasó... No puedo irme al más allá, tengo miedo —Me dice y yo niego, no se que creer

—No, eso...