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Nota: la introducción al capítulo es bastante larga. La canción en sí empieza como a la mitad. Esq si no, no veía como hacerlo. Srry.

Cualquiera pensaría que nacer en una familia de padres adinerados es una ventaja en toda regla, pero Anne discrepaba

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Cualquiera pensaría que nacer en una familia de padres adinerados es una ventaja en toda regla, pero Anne discrepaba. Sí, podía tener todo lo que ella quisiese: ropa, maquillaje, libros e ir a todas las premiers de sus películas favoritas. Incluso una vez, sus padres trajeron a su grupo favorito a tocar en su cumpleaños. Durante su infancia todo fue perfecto, pero llegó la adolescencia.

Anne no era para nada como sus padres. Ellos eran una de las familias más ricas y poderosas de todo Londres, lo que los convertía en gente de mucho prestigio y honra. Sus padres no deseaban que nada de eso cambiase costara lo que costara, inclusive la felicidad de su hija.

Anne nunca pudo tomar una decisión por sí misma. Tenía que vestir de una manera porque sus padres la obligaban, maquillaje natural, pelo ondulado siempre, postura de "señorita". Eso era insufrible a su parecer. A veces sentía que se encontraba en el siglo XIX y no en el XXI, pero ella no les reprochaba nada a sus padres porque habían trabajado mucho para llegar a esa posición. Todo lo aceptaba, ni siquiera se quejó de que sus padres la obligaran a estudiar empresariales para seguir con la empresa que ellos crearon. Sabía que algún día sería la consejera delegada del negocio familiar. Todo era tolerable según ella, hasta que su madre le anunció que tenía que hacer una puesta de largo para su introducción en la sociedad.

-¿Y si no quiero celebrar mi puesta de largo, madre? -reprochó la adolescente-. ¿Te has parado a pensar alguna vez lo que yo quiero hacer en mi vida? ¡Es mi vida, joder!

-Cuidadito con el lenguaje, jovencita -habló su "correcta" madre-. Esos no son hablares de una señorita. Además, tienes que ir. ¡Ya tienes 16 años, por Dios! Debemos presentarte como la "heredera" de nuestra empresa, ¡nuestra fortuna!

-Está bien, lo haré. Pero con una condición, madre.

-Lo que sea.

-Que Oliver venga conmigo y sea mi acompañante.

Oliver era un chico que conoció en el instituto y del que quedó completamente enamorada en el preciso momento en que lo vio. A sus padres no les gustaba para nada su relación amistosa porque el era un alumno becado en el instituto más prestigioso de todo Londres. Ellos se conocieron en el undécimo curso, y se hicieron inseparables desde aquel momento. Ambos tenían fuertes sentimientos por el otro, pero nunca nadie se animó a dar el primer paso puesto que los padres de Anne se lo tenían completamente prohibido y aprovechaban cualquier situación para recordárselo.

Sí que hubo una vez en la Oliver no pudo aguantar más y besó a Anne, pero fue la primera y última vez que aquello ocurrió porque los padres de la adolescente, al enterarse por terceros, montaron un escándalo a su hija y casi le prohíben volver a verlo. Prefieren que dirija la empresa sola, que con un joven de barrio obrero del brazo, a pesar de que ambos progenitores fueron, alguna vez, de un barrio del mismo estilo.

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