Dahlia:
—Feliz cumpleaños. —Mamá me felicita cuando bajo las escaleras, directo a desayunar.
Es sábado y me ha recibido con un plato de desayuno típico en Minnesota y aunque lo agradezco, creo que hubiera pasado de esto este año.
—Gracias, mamá.
Ella se sienta a desayunar conmigo, bebé de su jugo y se me queda viendo.
—¿Qué quieres que hagamos hoy?
No respondo.
—Tu padre me dijo que...
Su móvil suena, interrumpiendo la, mamá contesta y por los que dice, todo indica que se trata de papá.
—Si, espera un minuto. —Le pide mamá, aparta el móvil de su oído y me mira. —Tu padre quiere...
Niego y una línea marca los labios de mamá, ella niega despacio.
—Cariño, lo siento... ella no.. —Mama hace una pausa. —Si, esta bien. Hasta luego.
Mamá cuelga la llamada y pone los ojos en mi.
—Quede en salir con Harry hoy... —Le aviso.
—¿Harry, el vecino?
Asiento con la cabeza.
—De acuerdo... pero cuando llegues podríamos.. nosotras.
—Si...—Le interrumpo. —Más tarde sería bien.
Mamá me muestra una sonrisa.
—Gracias, cariño.
(***)
Salgo de casa y encuentro a Harry, limpiando las lunas del vehicular de su madre, al verme para y se acerca a mi.
—¿Lista..?
Observo el coche. —¿A dónde iremos, perdedor?
—Es una sorpresa...
El me abre la puerta de copiloto.
—Beverly Hills.
Con una sonrisa, ingreso al coche.
(***)
Me llevo a la playa y luego a comer cerca de ella, en un restaurante de mariscos.—Vamos...
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No te enamores de la apuesta (#1 Amores Y Apuestas)
Teen FictionPara Dahlia Baker: El reconocimiento. La popularidad. Y ser el centro de atención no es algo que se obtiene o se gana, sino algo con lo que se nace. Dahlia no necesitó esforzarse en conseguir la posición que la identifica, ella es hermosa e intelige...