-¿por que me secuestran?- pregunta el hombre asustado.
-¿Quien eres?- pregunta el otro hombre
-me andan molestando al niño y ya estoy cansada de eso. ¿Sabias que no es bueno tocar a uno de mis niños?- les pregunto mientras jugaba con la pistola.
-yo...-
-No te dije que hablarás- le disparó, miro al otro que miraba al que estaba muerto asustado.
-No me harás nada ¿verdad?- le disparó en el hombro-
-dile a ese cuando se encuentren en el infierno que soy Ariay Vizzini , encantada en matarlos a los dos.- le disparo en la cabeza.
...
Valentina
Ni me pregunten qué pasó ayer, solo sé que entramos y nos pusimos a beber como locas. Estoy aquí acostada en mi habitación sintiendo que me voy a morir. Miro a mi lado y ahí andaba Ethan acostado, ¿que hace el ahí? ni puta idea, me le quedo mirando por un buen rato y podía notar que su respiración andaba rápida, no relajada como cuando duerme.
- se que estás despierto- le digo para pararme de la cama para caminar hacia el baño como puedo, no antes de mirarme en el gran espejo que había en esa habitación, me veo muy destruida pero una chica destruida sexy.
- ¿como sabias que andaba despierto?- lo escuchó decir desde la cama
- tú manera de respirar cambia- le contestó al terminar de orinar, no sé si soy la única pero yo al orinar tengo que concentrarme.
- ¿como sabes eso?- Me asomo desde la puerta del baño y lo miro
-No te conozco hace una hora atrás, te conozco de toda mi vida, como no saberlo.- el me sonríe y se sienta en la cama.
me lavo las manos y al terminar me las seco con una toalla que había ahí, camino hacia la cama y me siento alado de Ethan y él acaricia mi cabello y sonríe. No aguanto más y lo beso, es un beso dulce pero a la vez salvaje como si lleváramos tres años sin vernos. El me toma por la nuca para acercarme más y me siento encima de él, me muevo en círculos sintiendo como algo comenzaba a despertarse. En medio del beso él sonríe.
-habíamos acordado de que íbamos a ser solo amigos-
-es que no aguantaba más, lo siento-me apartó un poco y bajo la mirada
- Nena, no lo sientas. Yo también lo necesitaba, y te digo que mas necesito?- Dice agarrandome por atrás del cuello.
-¿que necesitas?- me hago la inocente
- hacerte él amor...
...
Noah
-No me puedes seguir llegando esos mensajes, Ariay se dará cuenta y no quiero que ella se preocupe, ya tiene muchos problemas encima para tener otro.
-Entiendo, ya sabes quien te los envía?- me pregunta uno de mis chicos.
-No, por eso estoy aquí, necesito que me averigues quien es- le digo entregándole mi teléfono.
-me tardaré unas tres horas, te mantendré al tanto- me dice para salir de la oficina.
Llevan días mandándome advertencias de que algo malo pasará con Ariay y eso me tiene como loco. Lo hablé con el Señor Stiler para que estuviera pendiente y también se lo dije a los chicos menos a las chicas porque serían capaces de decírselo.
Salgo de la oficina de la casa para caminar por el gran pasillo para llegar a la habitación de Ariay, entró en ella y la veo en la cama durmiendo, me le acercó y me le quedo mirando, analizándola, pero algo andaba mal. Su pelo andaba húmedo, su piel era más pálida de lo normal, traía sus labios secos.
