LOVERS -imagina con Kim Namjoon.

Me has arruinado la vida.

El recuerdo de aquella tarde , estando frente a ti tomando tu mano en el altar, se me hace una imagen fría y la melancolía llega a mi como una vieja amiga. ¿En qué momento dejé de amarte? Perdóname por arruinar nuestras vidas... Perdón..

Narra Namjoon.

Me encontraba en algún bar de la ciudad , estaba tan destrozado por dentro. Sentía que ni todo el alcohol que pudiera consumir me quitaría lo que sentía. Jamás,  jamás.

Sentía angustia,  furia , miedo, impotencia,  nervios ,  vergüenza, tristeza,  quería llorar y a la misma vez gritar , tenía ganas volver al pasado y remediar lo que hice. Mi error.

Y con cada copa de licor que pasaba por mi garganta parecía  que me perdía en los problemas y de la vida real.

Sentía que mi vida estaba a unas horas de acabar, en fin. Creo que yo mismo decidí acabar con ella en el momento que dije "sí" a aquella mujer que estaba a mi lado.

Mientras estaba perdido en mi mente  vi que un señor se sentó al lado mío, parecía de unos cuarenta y dos años , el cantinero se acercó a él y le preguntó que iba a tomar. No presté atención a lo que hablaron y pedí otra copa más de licor.

El cantinero me vio con ciertas dudas.

—¿Vienes en auto hijo? —preguntó el cantinero.

—Sí —confesé.

—No deberías de tomar mucho, puedes tener algún accidente —advirtió este mismo.

—Ese "accidente" podría ser un gran favor. —respondí. Mientras que el cantinero y el señor me vieron algo sorprendidos.

—Debes tener serios problemas para desear que un accidente termine con tu vida —esta vez habló el señor que tenía a mi lado— ¿has pensado en qué pasaría sí eso sucede?.

Guardé silencio y empecé a procesar lo con mi mente , entonces ese hombre volvió a hablar.

—De seguro tienes una esposa e hijos que te esperan en casa,  no es nada bueno decir que necesitas un accidente para resolver todo.

—Es lo menos que merezco.

—Lo perderías todo.

—Señor, lo he perdido todo, no tengo nada, arruine la vida de mi esposa y la mía. Destruí todo lo que había construido a través de los años —sentía que cada palabra que decía mi garganta se cerraba más— perdí a mi hijo, me interesé más por mi que mi esposa, la dejé de un lado, le rompí el corazón , no lo merecía,  soy la persona más cruel de todo el mundo.

—¿Y por eso piensas que deberías morir? —preguntó el señor de lo más simple, no se sorprendió por todo lo que le había dicho, solamente soltó sin ninguna emoción.

Me quedé en silencio.

—Hay muchas formas de resolver tus problemas,  una de ellas seria hablar con tu esposa , remediar todo, no por que ya todo esta hecho , significa que no tenga remedio o mínimo perdón. Lo que has hecho sí,  merece castigo pero no la muerte hijo.