Igual al paraíso

Capitulo 15

Narcisa Malfoy era la presidenta de una de las más famosas compañías mágicas, Malfoy's cauldron ( Calderos Malfoy's), mientras que su esposo Lucius era jefe del consejo escolar, haciendolos unos de los magos más poderoso y ricos en el mundo mágico.

Esa tarde Narcissa se encontraba en su oficina, ordenando varios de los papeles sobre solicitudes de donaciones para los magos de bajos recursos.

Mientras rechazaba cada una de las propuestas sin una pizca de empatía, la puerta de su oficina se abrió, entrando por ella su asistente.

-Presidenta- saludo haciendo una reverencia algo exagerada.

-¿A dónde fue está vez Draco?- pregunto sin siquiera levantar la mirada.

-De acuerdo con el ministerio, Viajo a Nueva Caledonia, al comienzo de las vacaciones-

-¿Por qué fue ahí?- pregunto mientras se acomodaba en su asiento

-Fue de vacaciones, a tomar aire fresco, según sus palabras "necesitaba un ambiente más tropical"-

-Ya veo...- su asistente se comenzaba a retirar, cuando Narcisa lo detuvo- Espera... Confirmaste quien lo acompaño?-

- sí señora, cómo siempre los S4 lo acompañaron-

-Los famosos S4... ¿Hasta cuándo dejará de ser el infantil líder de los S4? Retiraré!-

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Draco estaba en un pequeño jacuzzi aún molesto, por lo sucedido en la tarde.

Decidido a vencer su miedo tomo aire y hundió su cabeza dentro del agua, en menos de un minuto todos los recuerdos del accidente volvieron a él.

Recordó todo lo que había visto ese día, como el hombre que se suponía debía cuidarlo, lo raptaba, y para pasar mucho más desapercibido lo había llevado al mundo muggle, a pesar de que luchaba con sus pocas fuerzas de niño pequeño, era imposible ganarle, así que el hombre lo cargo y lo subió a un automóvil muggle que había robado, abrochando le con fuerza el cinturón para evitar que se pudiese escapar comenzó a conducir, con la esperanza de poder salir del país.

Mientras esquivaba a la policía muggle, el hombre que había raptado al niño conducía atentó a la Aparición de algún mago de seguridad.

Mientras subía por una de las colinas un sonido sordo lo hizo detener el auto, girando su cabeza a los lados y sin encontrar a nadie volvió la vista al frente y allí estaban varias personas vestidas con un uniforme azul bloqueando el camino, frustrado por eso, tomo la palanca de velocidades haciendo retroceder el auto a gran velocidad.

Mientras escapaba de los oficiales, sin medir la velocidad giraba en cada esquina mientras era perseguido por varias patrullas muggles, llegando casi al final de la calle justo antes de girar una anciana estaba cruzando la calle, así que el hombre trato de esquivarla girando el volante a la dirección contraria, el auto salió de la calle cayendo en la orilla del mar.

El auto comenzaba a llenarse de agua, mientras que en la orilla las patrullas se detenían para poder atrapar al ladrón del auto.

El hombre se encontraba aterrado jamás pensó que esto podría pasar, mientras el agua seguía aumentando dentro del auto, se giro hacia al pequeño, dirigiéndole una mirada de culpa, abrió su boca para decir algo, pero nada salió de ella y desapareció dejando al niño dentro del auto.