Diarios

12 0 0
                                    

-Ro, deberías venir.

- No Fred, no voy a ir. Dije que me quedaría deshaciendo las maletas y eso haré.

- Vamos, las puedes deshacer en otro momento. ¿De verdad que no vas a venir? Tendrías que ver esto, tu olfato nos serviría de mucho buscando pruebas.

- No me hagas la pelota de esa forma. Necesito tiempo para asimilar esto. Nos vemos luego, seguro que podéis hacerlo sin mí.

Colgué y suspiré. Todo esto era demasiado. ¿De verdad estaba dispuesta a aceptarlo? Quiero decir, todo lo que creía que era un cuento. Aquello que jamás habría creido. Aquello sobre lo que tanto había leido, creyendo que no eran más que palabras que jugaban a ser realidad. Y esque las palabras son lo reales que queremos que sean. No, las palabras son solo ideas, pensamientos, ficción... Pero, ¿qué pasa cuando la ficción es tan real como lo que vivimos o lo que sentimos? Entonces, no es ficción, es realidad. O quizá es la realidad la que ha cambiado de papel y ya no es real, es ficción. Quizá lo estaba pensando demasiado pero no era cosa fácil. Es fácil cuando lo que tienes que decidir si es real o no es algo que se ve claramente. Y a veces ni eso ayuda, a veces tenemos las cosas delante de nuestros ojos, bien claras y aún así no las vemos. Y esque a veces las cosas son tan claras que llegan a ser transparentes, y el ojo no percibe lo que es transparente. Quizá por ello me costaba tanto verlo, estaba tan claro que me resultaba invisible. Pero no podía pasar la mañana debatiendo conmigo misma si iba o no a aceptarlo. Sin darme cuenta estaba sentada en una silla junto a la mesa de cocina y tenía el diario abierto. Podía comenzar por ahí. No dejaría a mo hermano solo. Menos en algo como esto, real o no era peligroso.

***

Del diario encontrado. Narra su autor.

15 de marzo, 1958

Me he decidido por fin a llevar un diario de mis investigaciones. Cada vez son más y descubro cosas que podrían ser útiles en un futuro. Me encuentro ahora mismo en casa, pero no sé si podré volver cuando salga la próxima vez. Todo esto me está metiendo en problemas y la policía me acabará buscando tarde o temprano... Además, si quiero seguir con esto tendré que abandonar mi vida y empezar de cero, con otra identidad. Mi mujer me ha dejado, cree que estoy loco, pero mejor así. Le pedí cambiar de barrio y empezamos a discutir. No me siento precisamente orgulloso pero es la única forma de protegerlas, a ella y a mi pequeña. Esta semana se me está haciendo eterna pero quiero pensar que he obrado bien al alejarlas de este mundo extraño que ahora me persigue...

(...)

20 de marzo, 1958

Me encuentro en algún pueblecito perdido en el norte de España. No sé exactamente dónde estoy, pero me da igual. Persigo lo que llamo "cambiaformas". Es un ser difícil de cazar, su principal característica, que es la que dificulta mi investigación, es la capacidad de cambiar de aspecto. El mayor problema es que no sólo adopta la forma física de la persona que quiera, también adopta sus pensamientos lo que le permite actuar como esa persona. De esta forma se dedica a asesinar a los seres cercanos a esta persona. No entiendo muy bien sus motivos pero sé que debo acabar con este cambiaformas antes de que él acabe con los habitantes de este pueblo. Debo detectar quién es y asegurarme antes de decapitarlo o acabaré siendo un asesino. Luego debo de irme de aquí antes de generar problemas.

***

Narra Ro.

Parece que existen más tipos de criaturas... Y parece que una vez que entras en este lío de investigar sucesos paranormales ya nunca se acaba. Debo hablar seriamente con los chicos. Si no me veo no me creo, ¿de verdad me estoy planteando todo esto? Aún no sé si creerlo y estoy empezando a pensar si quiero meterme en este lío. Por favor, Ro, céntrate, tú no eres cazadora o como sea eso, tú eres abogada. Pero no tengo un caso desde hace meses, el bufete está a punto de cerrar... NO, NO, ni se te ocurra pensarlo... Siempre has sido un poco cotilla, si estuviste a punto de meterte a periodismo, podrías investigar y llevar un seguimiento, como el tipo este... Sería material de prim... ¿Material de primera? ¿Para qué? Nadie, NADIE, te creería Ro, por favor, céntrate, no puedes publicar las investigaciones esperando un Pullizzer... Bueno, nunca quisiste uno, no te van los premios para exponerlos ante tus invitados, nunca fuiste de las vanidosas que iban enseñando sus trofeos... Supongo que siempre podría usarlo para una novela, algo de ficción... Quedaría realista porque usarás experiencias reales... ESPERA, PARA EL CARRO, ni siquiera estás segura de la realidad de la situación...

Sin ser demasiado consciente de ello había cogido el portátil y había empezado a escribir mis pensamientos. Pensé que si había hecho eso era porque al fin y al cabo quería escribir un diario y quería meterme en ese mundo a ver qué sucedía... Lo tomé como oportunidad para empezar el diario y tras agregar la fecha expuse las circunstancias del caso.

***

Narra Joe

Menudo panorama, al llegar a la casa ya sentí un gran escalofrío. Fred estaba hablando con mi hermana por teléfono así que me tocó a mí fijarme en los detalles. Vaya caos, estaba todo patas arriba. Parecía haber pasado un tornado por ahí. Todo estanba tirado por el suelo y la casa daba una sensación muy violenta al entrar. Parecía la casa del tipo de persona que cuida cada detalle y que limpia todos los días de arriba a abajo, lo que hacía un fuerte contraste con el frío estado de desorden y abandono en el que se encontraba la vivienda. No sabíamos si faltaría algo porque no teníamos acceso al inventario de la casa que seguramente realizaría la policía... Creo que podría pedir algún favor a cierto amigo mío.

De momento sólo podía observar el caos. Miré a Fred que negó con la cabeza. Mi hermana necesitaba tiempo para asumirlo... Cree que yo lo he aceptado sin más, y quizá sea mi culpa porque actúo como si esto me gustara, pero el caso es que yo pasé también por lo que ella está pasando ahora. Ah, no quiero recordarlo ahora... Aquel caso fue... No, no, ahora no quiero pensar en ello... Mi incredulidad, lo subrealista que era todo para mí, lo difícil que fue saber qué era real y qué no dentro de lo que me iba encontrando a lo largo de la investigación... Tendré que  hablar con ella y contárselo algún día. Pero, ¿cómo? ¿Cómo le cuento que llevo ya varios casos? ¿Qué reacción tendrá? Ay, ¿por qué la habré metido a ella en esto?.. Bueno, era hora de volver, seguro que ella está examinando el diario que encontró Fred... A propósito del diario, tengo que examinarlo, podría no ser tan fiable como creemos...

Si no lo veo, ¿no lo creo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora