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"No puedo creer que accedí a ir a un maldito bar gay".

Hubo una fuerte erupción de risas que casi hizo temblar la mesa en la que Mingyu había estado sentado, y deseaba que su boca tuviera una cremallera para poder levantarla y evitar el vergonzoso resultado de sus palabras contundentes.
Sus amigos ni siquiera podían callarse y tuvieron que restregarle sus malas decisiones tirando comentarios inapropiados, haciendo que la gente alrededor frunciera el ceño ante la conmoción. Mingyu solo quería encogerse debajo de la mesa y comerse sus trozos de pollo frito en paz, pero por supuesto que no podía cuando tenía los brazos sobre los hombros y bromeaba con ellos.

"Eso es lo más divertido que he escuchado en mucho tiempo, ¡oh Dios mío!" Alguien a dos asientos de él se rió en el aire.

"¿De quién fue la idea? ¿Perdiste una apuesta?" Uno de sus compañeros preguntó mientras se reía. Mingyu frunció el ceño, señalando con el dedo a Jaehyun, quien resopló audiblemente.

"Se negaba al principio, pero al final estuvo de acuerdo, así que..." Jaehyun se encogió de hombros, una sonrisa de mierda adornando sus rasgos. Esquivó con éxito una papita frita que iba en su camino, cortesía de Mingyu.

"Tienes suerte de que Wonwoo hyung sea lindo". El chico más alto murmuró entre dientes, pero no pasó desapercibido porque aparentemente, sus amigos, que normalmente eran un grupo denso, tenían un oído muy sensible y podían detectar a la próxima víctima de sus burlas dentro de un radio de un buen metro.

"Maldita sea, tienes que proteger a tu hombre Jae antes de que Mingyu te lo robe", se rió Baekho, su capitán, haciendo reír a todos a su alrededor.

"No va a pasar", suspiró Mingyu, "Wonwoo hyung cree que su novio", señaló con la mano a su amigo rubio sentado frente a él, "es más guapo que yo", estaba haciendo pucheros ahora. Sus amigos, sin embargo, lo encontraron bastante divertido, casi estaban llorando por reírse demasiado.

"Bueno, él sabe que es verdad". Presumido como siempre, respondió Jaehyun, luciendo molestamente orgulloso. Mingyu quería ahogar toda esa arrogancia del rubio, pero podía controlarse.

"¿Realmente vas a ir?" Hansol, el estudiante de primer año, la persona más tranquila que había conocido, preguntó con una ceja levantada. Cuando Mingyu asintió con la cabeza, el joven continuó. "Seungkwan quería ir a uno, pero estábamos tan ocupados con los exámenes y la práctica que no tuve la oportunidad de llevarlo a uno. Escuché que esparcían confeti al final de las canciones, ¿es cierto?".

Mingyu tosió en su comida.

"Uh, ni idea, hermano. Yo tampoco he estado en uno, pero tiene que ser lo mismo que en cualquier club normal, pero éste es solo para tíos" Eso hizo que su estúpido círculo de compañeros de equipo tuviera otro ataque de risa y Mingyu estaba un poco contento de que Jeongguk no estuviera allí con ellos en ese momento. El niño desapareció justo después de que terminó su práctica. A dónde, él no lo sabía, sólo podía adivinarlo. No era de su incumbencia, pero una pequeña pieza en el fondo de su mente le decía que era algo relacionado con Yeri.

"¿Quién es Seungkwan?" Preguntó uno de sus amigos, con la boca llena y grasienta en las comisuras. Mingyu estaba discretamente disgustado por la vista, pero no hizo ningún comentario al respecto y solo centró su atención en Hansol, quien respondió con una sonrisa brillante.

"Mi novio".

De acuerdo, eso fue un poco sorprendente. De todas las personas de su equipo, Hansol parecía ser el último con una orientación sexual distina. Pero quién era Mingyu para juzgar, cuando él mismo estaba dividido entre dejar a su novia y tomarse de la mano del novio de su amigo.

En la salud y en la enfermedad - Minwon [EN ESPERA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora