Capitulo 33: Buenas intenciones

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Después de que Obito se reuniera con Naruto fuera de la aldea de los Sonidos, pasó la mayor parte de su tiempo entrenando diariamente con Fugaku. No había mucho más que hacer.

Minato todavía no había regresado. Fugaku estaba convencido de que había encontrado algo que valía la pena perseguir, pero el Sandaime estaba siendo opaco sobre lo que podría ser. Mientras tanto, el Equipo Minato no recibió más misiones.

Una vez, Obito se arriesgó a volver a la línea de tiempo de Naruto nuevamente. No podía dormir, y pensó a medias: si, tal vez, este punto muerto continuaba… tal vez el puro peso del aburrimiento sería suficiente para hacer que conocer a su yo mayor fuera una opción atractiva.

Pero cuando Obito llegó allí, no pudo obligarse a decir las palabras. Naruto y Jiraiya habían acampado en algún lugar, y todo estaba oscuro y silencioso. Jiraiya estaba acostado de lado de espaldas al campamento, mirando hacia una gran vista del cielo y el bosque debajo. Naruto estaba sentado contra un árbol con un libro suelto en su mano, como si se hubiera quedado dormido leyendo. Estaba inclinado al azar a un lado, roncando levemente.

Al final, Obito no dijo nada.

Regresaré mañana, decidió. Primero debería hablar con Kushina, tal vez ella sabía cuándo se suponía que Minato regresaría. Hasta que lo supiera, Obito no podía prometer nada. Y sería tonto despertarlos en medio de la noche solo para saludarlos.

Una suave brisa hizo susurrar los árboles. Nada más cambió, pero Obito de repente tuvo la impresión de que Jiraiya estaba despierto. Quizás el Sannin estaba demasiado quieto, o quizás era la forma en que su cabeza estaba ligeramente inclinada en la dirección de Obito, como si estuviera escuchando.

Mañana , se dijo Obito de nuevo. Después de la reunión del equipo y después del entrenamiento. Para entonces, podría saber algo. Se apartó de ellos y desapareció.

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Kushina se había tomado muy en serio la idea de organizar una fiesta de felicitaciones para Obito y de hacer que Kakashi asistiera.

Fue bajo el disfraz de una reunión de equipo en la casa de Minato y Kushina. Y Kakashi apareció, porque a pesar de todo su ceño y quejas, quería una actualización sobre Minato tanto como cualquier otra persona. E incluso él no se atrevió a ignorar la invitación de Kushina.

"Estaba furiosa ", anunció Kushina desde la entrada de la cocina, sosteniendo un cuchillo de chef como si fuera a apuñalar a alguien retroactivamente. "¡La mayoría de los equipos tienen tiempo libre garantizado después de una misión como esa! Pero cuando regresó, Minato me dijo que todos debían estar de guardia. Luego lo enviaron inmediatamente de regreso al territorio enemigo ... apenas tuvo tiempo de despedirse de mí. ! "

"¿Sabes por qué?" Preguntó Rin, inclinándose hacia adelante en su silla.

"Sandaime-sama está presionando demasiado", continuó Kushina, haciendo girar el cuchillo en su mano. "Quiero decir, claro, hemos ganado algo de impulso después de que Iwa se rindió. Y todos quieren que esto termine rápidamente. Pero no podemos contar con que Kiri esté tan asustado de Minato que lo dejarán entrar."

"¿Pero por qué tuvo que ir solo?" Dijo Obito. "Somos un equipo. ¿Cuál fue el punto de que volviéramos aquí solo para sentarnos?"

"Tuvo que dejar todo el exceso de equipaje", dijo Kakashi.

"Sabes que eso te incluye a ti, ¿verdad?" Obito respondió de inmediato.

Kushina frunció el ceño y dejó de girar el cuchillo. "Eso es algo a lo que quizás tengas que acostumbrarte. No dejarás de tener misiones juntos, pero estarás dividido más a menudo con tres jounin en el equipo".

Me convertire en el vientoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora