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Viajó en una de las vans junto a su manager, no era necesario que lo llevará, pero él hombre dijo que no tenía ningún problema, después de dejarlo el iría por su camino. Gracias a esto en 20 minutos llegó al estudio.

Subió por el ascensor para llegar al piso donde se encontraba el chico australiano.

Tocó la puerta, y después entró.

— Hey hola — Saludó en cuanto lo vió.

— ¿No tarde mucho o si?

— No, para nada — Chan sonrió aún más cuando notó a Minho vistiendo una gran chaqueta gris, se veía más pequeño, realmente tierno.

Quitó una libreta que ocupaba parte del espacio libre de su escritorio para que pudieran dejar ahí lo que el castaño traía.

— ¿Cocinaron en el dormitorio? — Preguntó cuando reconoció algunos contenedores.

— Si, Felix y yo preparamos una rica cena, se veía mejor en la mesa — Abulto un poco sus labios — Pero ya qué, eres muy necio — Eso último sacó una risa a Chan.

— ¿Necio? — Preguntó tratando de tomar a Minho por la cintura, pero el otro se alejó, sin ni siquiera notar lo que trató de hacer, para después sentarse en el sofá que había en la esquina de la habitación.

— Si, mucho — Sacó su teléfono para ignorar al chico qué aún estaba de pie.

Bang recorrió a un lado la silla que estaba frente a la computadora y fue a ocupar un lugar en el otro extremo del sillón mirando a Minho.

— ¿No estás molesto conmigo? — Ahora se sentía un poco culpable por haber hecho que el chico dejará la casa para venir a traerle comida.

— No — Bloqueó el aparato y lo dejó en en la mesa de enfrente — Me gusta venir al estudio — Dijo con una sonrisa — Además — Gateó un poco para estar más cerca de Chan — aquí si puedo estar pegado a ti sin escuchar quejas.

Minho se acomodó en el regazo de su novio, pasó sus manos por el ahora negro cabello de Chan peinandolo un poco, delineó su oreja y se quedó tocando el arete que tenía.

— Me gusta, te queda bien — Habló sin despegar la mirada del pendiente.

— Gracias, lo escogí sin pensar mucho — Chan pasó su brazo derecho por la espalda de Minho hasta dejarlo rodeando su cintura mientras que acariciaba la rodilla del castaño con su otra mano.

— Es pequeño pero luce bien — Dejó el arete y está vez miró a Chan — Encontré una película de terror, es un poco vieja pero se ve interesante ¿quieres verla?

— Claro, cuando quieras — Le sonrió.

— ¿Crees que me quedé bien el color rojo? — Preguntó tocando su cabeza con ambas manos — A ti se te ve genial, pero no sé qué tal me quedará a mi.

— Min, todo lo que te pongas te queda bien, el rojo se te vería excelente.

— Mmm, tienes razón, soy muy guapo, todo me queda.

— Sí, muy guapo — Chan lo miró con una hermosa sonrisa.

—¿Me das un beso? — Pidió Minho haciendo boca de pato y cerrando los ojos.

Bang no tardó el cumplir con lo que le pidió, en un rápido y corto beso.

— Dame un uno más largo — Volvió a pedir, Chan juntó sus labios de nuevo pero fue un beso muy simple.

Minho esperaba que lo besarán con más pasión, no lo diría pero, quería un beso que le quitará el aire, que invadiera su boca y mordiera sus labios, ¿Por qué Chan no se lo daba?

Studio Night ∘˳°。*♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora