Hail Mary, forgive me.

Capitulo 3: El pasado. Parte 2.

Dedicado a Wolfie Quinn ( 

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2010.

Era un día normal, de hecho algo especial, era mi primer día de clases. Estaba tan emocionado por ver de nuevo a mis amigos, a pesar de haberlos vistos un par de veces en el verano. Le di un beso en la mejilla a mamá antes de despedirme y correr con los demás al interior del colegio. Le pregunté a una profesora cuál era mi nueva sala y ella amablemente me acompañó. Era una muchísimo más grande que la del año pasado.

"Deben dejar tu mochila allá. Luego ve a sentarte, les daré la bienvenida". Resultaba que quien me había guiado era mi nueva profesora. ¡Estaba feliz! La había visto antes pero nunca me había hecho clases. Deje la mochila en el mochilero antes de buscar la silla lo más adelante posible.

"Bueno, a sus lugares, estudiantes". Los demás comenzaron a moverse. Localice de inmediato a mi amigos Bill y a Michael. Ellos se sentaron a mi lado y a los momentos casi toda la sala se quedó en silencio.

"Muy bien, les doy la bienvenida a un nuevo año de estudios. Soy la profesora Palmer, seré su profesora encargada durante este año y conmigo aprenderán ciencias naturales. Este año, en comparación al pasado, no tendrán solo una profesora que les enseñe cada materia, serán varios que iran conociendo con el pasar de los días. Espero que la pasaran muy bien en sus vacaciones, y hablando de ello y para que el primer día sea relajado, tendrán que dibujar cualquier momento importante que hayan pasado. Puede ser un viaje, una junta con amigos durante el verano. Pueden ocupar los materiales que están en la mesa y luego pasarán adelante a contarnos un poco de que hicieron".

Luego de un par de saludos y cortas conversaciones, comencé a dibujar la playa. Ese año había viajado a la costa junto a mis padres y acampamos. Fue la primera vez que nos quedamos tantos días y fue muy divertido.

Los días y semanas transcurrieron normal, interactúe con mis demás compañeros pero nunca dejando a Bill y Michael de lado.

Con el paso de los meses, mis padres notaron que mis notas en materias como matemáticas, ciencias naturales y castellano no eran tan altas en comparación a música, arte e inglés. Por esto, comenzaron a enviarme a reforzamiento después de la escuela, Intentaba entender pero me costaba muchísimo, además, no me gustaban esas materias. No entendía porqué eran tan importantes si en las demás me iba muy bien. Me encantaba dibujar y cantar.

Un día, saliendo del reforzamiento, me encontré a Michael. Era un poco más alto que yo, estaba jugando fútbol en el patio cuando me vio y se acercó. Lo salude sonriendo.

"¿Qué tal las clases?". Me dijo.

"No lo sé, aun me cuesta mucho".

"Tranquilo, es fácil, si quieres te ayudo en los recreos también, a mi me esta yendo mal en música y podrías ayudarme también". Sonreí asintiendo. Luego de eso me despedí ya que mi padre estaba en la puerta de entrada al colegio esperándome.

Con el tiempo mis notas comenzaron a mejorar gracias a Michael, él explicaba todo muy fácil. Al final los estudios en los recreos se transformaron en idas a las casas el fin de semana a estudiar y jugar. Era muy divertido, Bill iba de vez en cuando también.

Pero justo ese día, estábamos solo los dos, solo jugando a la Play Station 2 como solíamos hacer, aunque yo fuera pésimo.

"Oye, Kellin, Bill me contó que besó a una niña". Dijo luego de que me ganara en otra partida.

"¿De verdad? Creí que eso lo hacía la gente más grande". Le respondí tomando un poco de jugo.

"Al parecer no, pero a mi no me gustan las niñas". Dijo con cara de asco.