Capitulo 1: Alegría y tristeza

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Magnolia.

Un hermoso día en la ciudad de Magnolia, los niños jugaban de aquí para allá, los padres cuidaban de ellos, el sol iluminaba la ciudad de manera esplendorosa y con su calidez alegraba el día de los habitantes.

Tres magas del famosísimo gremio de Fairy Tail estaban reunidas en la casa de su amiga rubia, las tres habían regresado de visitar a la curandero del gremio, Polyuska. Esa señora de ojo rojos y cabello rosa que decía odiar a los humanos pero que siempre ayudaba a Fairy Tail sin esperar nada a cambio. El ambiente tenso que bien podía percibirse con sólo entrar a la habitación.

- ¿Creen que lo tomen bien? - preguntó la rubia rompiendo el silencio tan abrumador.

- No lo sabemos si no se los decimos - respondió la Maga de escritura sólida.

- Juvia tiene miedo - susurró la mujer de agua.

Y no sólo ella, sus dos amigas igual lo estaban ¿Cómo les dirían? ¿Cómo reaccionarian? Lucy fue la primera en pararse de su cama, vió a sus amigas, en sus ojos se notaba el miedo pero también determinación.

- Vamos al gremio chicas.

- Lu, no estoy muy segura.

- Juvia tampoco.

- No sean cobardes - dijo la chica - debemos hacerlo y no me obliguen a llevarlas a rastras. Saben que soy capaz.

Ambas peli azules suspiraron en derrota, jamás podrían con ella, salieron de la casa de la joven rubia rumbo al gremio, con nervios y emoción, esperaban que la reacción de todos fuera positiva y más la de ellos tres.

- ¡Hola a todos! - gritó como siempre al abrir las puertas Lucy.

Pero al contrario, los rostros de todos estaban serios e incluso había miradas de decepción. La demonio Mirajane fue la primera en acercarse al trio de chicas, quienes estaban asustadas pero sobre todo confundidas muy confundidas.

- ¿Qué ocurre chicos? - preguntó la pequeña Levy.

- ¿Porque? - preguntó la peli blanca viendolas - ¡¿Porque lo hicieron?! - gritó transformándose en demonio y atacandolas.

Las tres se cubrieron como pusieron el ataque de la demonio, sin embargo no fue suficiente, ya tenían raspones en algunas partes del cuerpo. Antes que Mira las volviera a atacar, Cana se interpuso entre ella y las tres magas.

- ¡¿Que acaso estas loca?! - gritó a Mira.

- Quítate Cana, pagarán caro lo que le hicieron a Lissana - contestó con ira.

- No hicimos nada - habló Levy viendo a la albina.

Esta apartó a la castaña y les lanzó otro ataque haciéndolas chicas contra las paredes del gremio, no podían usar magia, las debilitaria más y en su estado era riesgoso. Como pudo, Cana encerró a las tres víctimas en sus cartas.

- ¿Porque las defiendes Cana? - preguntó serio Romeo.

- Confió en ellas, Lucy, Levy y Juvia no son capaces de herir a sus compañeros, menos a Lissana - respondió jadeante.

Elfman usó beast soul con su brazo y noqueo a la magia de las cartas anulando su magia al instante, las tres chicas salieron de las cartas y Mira junto a su hermano y otros miembros del gremio comenzaron a atacarlas. Cubriendo sus estómagos recibían los imlactos de magia, mientras me los dos dragon slayers y el demon slayer veían la escena con decepción.

Confiaban en ellas y traicionaron al gremio agrediendo a uno de sus miembros.

- No quedará rastro de ustedes - dijo Mira aún molesta - ¡Explosión del mal!

Una cortina de polvo creó, al disiparse vio como las tres magas estaban intactas pero inconscientes ¿la razón? El espíritu del león, Loke y el espíritu de la doncella, Virgo salieron por cuenta propia ayudando a su dueña y a sus amigas.

- Loke, apartate - musitó la demonio.

- Virgo, llevate a Levy y a Juvia.

La pelirosada asintió, pero al cargarlas abrió sus ojos de par en par al sentir dos fuentes de magia extra en ellas.

- Onii-san - dijo el espíritu del zodiaco.

Él no escucho, cargo a la rubia con cuidado y al igual que la doncella, sintió una fuente de magia provenir de Lucy.

- Estan... - dejó la frase a medias cuando mira lanzó otra explosión del mal.

Él saltó y aterrizó junto a Virgo y así como aparecieron, asi se fueron sin dejar rastro alguno. Erza y Wendy habían ido de misión junto a Charle y Happy y no regresarian hasta dentro de un día, después de lo sucedido, el gremio quedó en silencio.

Los hermanos Strauss subieron al segundo piso, la enfermería donde la menor de ellos comenzaba a despertar.

- ¿Que ocurrió? - preguntó apenas.

- Descuida ya estás mejor - respondió su hermana mayor.

- Lucy... ¿Dónde está Lucy? - se levantó asorada.

- Tranquila, me encargué de ellas - volvió a decir.

Lissana la quedo viendo con horror, rezaba porque no haya pasado una desgracia.

- ¿A que te refieres Mira-nee? - la vio con temor.

- Les di una lección que jamás olvidarán.

- ¡Vengar a tus hermanos es de hombres!

Los temores de la menor de los hermanos Strauss se hicieron realidad al escuchar la frase de su hermano mayor

- ¡Están locos! - Les gritó llorando Lissana.

- Lissana tranquila, todo esta bien - trato de llegar a su hermana pero la de cabello cortos no se dejó.

Corrió aún débil hacia la planta baja, el gremio la vio preocupados y ella lo estaba aún más al ver el destrozo que había, entró en pánico al no sentir la magia de las tres magas.

- ¿Donde están? - preguntó con hilo en su voz.

- Se fueron, no volverán a lastimarte - informó Macao con una sonrisa.

- ¡Estan todos locos! - Gritó molesta - Ellas no me han lastimado, fue un mal entendido.

- Explicate - Dijo Natsu entre atónito y con miedo.

- Regresaba de comprar víveres cuando tres sujetos me acorralaron en un callejón, intenté defenderme pero uno de ellos anulaba la magia y me golpearon, no dejaban de preguntar por Lucy, Juvia y Levy - contó con la mirada agachada y pequeñas lágrimas en sus ojos - no recuerdo como llegue aquí, por eso repetía el nombre de Lucy.

Terminó de narrar dejando a todo el gremio atónito, la culpa se posó en ellos, lastimaron a sus compañeras sin razón alguna, sin pruebas y sin compasión. Los dos dragon slayers y el demon slayer estaban peor que cualquiera, fueron cobardes y dudaron de ellas, no las defendieron.

- ¡Regresamos! - gritó Erza entrando y viendo el desastre - otra vez pelearon Natsu y Gray ¿verdad?

Nadie le contestó, Wendy y los exceed esperaban pacientes, pero la pequeña tenía un mal presentimiento ¿Cómo explicarían que casi matan a tres miembros del gremio por un mal entendido? Y lo peor ¿Cómo enfrentarían la furia del maestro y la de su amiga Titania?

Ya no sabían que hacer o que decir, Lissana se acercó a ella y se desplomó en el hombro de la película llorando, Cana se acercó a ellos y los llevó a la enfermería, Erza estaría furiosa, es seguro. Pero era mejor una verdad dolorosa a una mentira que matará.

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