En las buenas, malas y peores [Thorki]

Capítulo XI- En las malas.

Había pasado un largo tiempo sin que su cuerpo sintiera aquella calidez extrema que poco a poco se iba transformando en un calor asfixiante.

Se movió tratando de quitarse las cobijas, pero algo realmente pesado lo tenía aprisionado.

Abrió con pereza los ojos y aunque al principio no podía creerlo, su mente le trajo las imágenes de la noche anterior.

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Mientras se encargaba de masturbar a Thor, pues no podía estimularlo con su boca, Loki tuvo que encargarse de prepararse muy bien. No había estado con alguien en mucho tiempo y Thor parecía no recordar cómo era estar con un hombre y lo que esto conllevaba.

Así que, con su cabeza recargada en la pierna de Thor, mantenía su lindo trasero alzado, metiendo y sacando 3 dedos de su interior.

-¿No duele?- Preguntó Thor viendo atentamente aquellos movimientos que le parecían sumamente eróticos.

El pelinegro tomó un poco de aire para poder responder -No si lo hago con cuidado.

-¿Puedo intentarlo?- Dijo acercando su mano.

Loki se sonrió, aquello era lo más parecido a cómo había sido su primera vez.

-Tal vez la próxima vez, ahora en verdad muero por sentirte dentro mío-Dijo acomodándose en su regazo, después de todo llevaba casi 3 años sin él.

Lo besó y dejó que se encargará de ponerse el preservativo.

Alineó el miembro a su entrada y lentamente se deslizó sobre el, sintiendo a Thor aferrarse a sus piernas ante la sensación.

-Se siente muy apretado- Susurró el rubio.

-¿Te lastima?

-No, se siente realmente bien- Dijo tomando el rostro del pelinegro para besarlo sintiendo sus ligeros gemidos contra su boca.

Loki se movía lentamente acostumbrándose a tenerlo en su interior. Casi había olvidado lo que se sentía estar con Thor de esa manera.

-Loki si te lastima podemos parar.

-¿Por qué insistes...

-Tienes de nuevo esa expresión, como si algo te doliera o te incomodara.

Se quedó en silencio unos segundos, no era algo físico lo que le incomodaba, pero antes de que Thor pudiera volver a hablar le robó la palabra.

-Entonces abrázame.

Tan pronto como lo dijo, el rubio lo acercó a su cuerpo rodeándolo completamente, acariciando con cariño su espalda y dándole pequeños besos en su blanca piel.

-Estoy listo Thor- Murmuró cerca de su oído alzando un poco sus caderas para darle oportunidad de moverse.

Entonces las embestidas comenzaron. Lentas pero profundas.

-Más- Pido el pelinegro librándose del abrazo -Quiero más Thor.

Con un leve gruñido Thor aumentó el ritmo escuchando más alto los gemidos de Loki.

Todo aquello se sentía extraño, como si fuera un sueño vívido.

Era como si hubiera hecho aquello tantas veces que podía predecir sus gestos, interpretarlos y reaccionar a ellos.

Por ejemplo, sabía que si aumentaba el ritmo Loki terminaría, pero no podía ni quería detenerse.

Tomó el miembro del chico en su mano para poder masturbarlo mientras disfrutaba de los hermosos gestos en su cara, estaba viendo una obra de arte.