Capítulo 10

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Intenté aferrarme de algo pero nada servía, seguía cayendo por el acantilado y supongo que ya me estaba mentalizando para morir... quizás si hubiera estado más cerca de la pared hubiera conseguido escalar por esta...

Abrí los ojos de par en par cuando un chakra distinto se acerca y antes de darme cuenta, el peliplata me sujeta en brazos.

-¡Hm! Kakashi -él empezó a saltar hasta subir y así me deja en el suelo sobre el acantilado-. Gracias...

-¿Qué sucedió? Cuando volví al campamento no estabas y ¿de repente estás cayendo por un acantilado?

Se veía alterado o quizás preocupado. Levanté mis manos en señal de que se calmara un poco para explicárselo.

-Orochimaru mandó a buscarme, aunque el niño quiso matarme en su lugar.

-¿Orochimaru? -asentí en respuesta y él suspira comenzando a entender-. Está bien... volvamos.

Así fue, regresamos a donde hicimos el campamento para descansar aunque sea un poco y seguir con el viaje a Konoha. Kakashi no volvió a tocar el tema. Nos mantuvimos en silencio hasta llegar a la aldea y nos separamos cada uno por su lado al llegar. Fui a ver a Hiruzen para decirle que finalmente me quedaría. Ya no tenía razones para volver al clan.

-Entonces, me honra nombrarte desde ahora como una Jounin de Konoha... -habla sonriendo dándome un protector ninja con el logo de la aldea.

Me lo puse donde más me gustaba y sonreí teniendo el protector puesto.

-Gracias, Hiruzen... -sonreí mientras él asiente.

-No hay porqué, espera a que te llame para alguna misión, y por cierto, esto es para ti -me tiende un sobre y una llave con un número de casa-. Como te quedarás aquí, decidí darte la casa donde te habías quedado cuando viniste la primera vez, espero que esté bien.

Asentí agradecida y sin tener ninguna disconformidad con la idea.

-Gracias.

Fui a aquella casa, aún recordando en dónde era y la observé por un tiempo desde afuera antes de acercarme a la puerta y abrirla. Miré a todos lados notando lo terriblemente polvoriento que estaba aquí, y no soy una fanática de la limpieza precisamente... Me quejé y con toda la pereza del mundo comencé a limpiar la casa.

Todo estaba amueblado así que no tendría que comprar tanto para esto, solo que al terminar se limpiar la cocina fui a comprar comida para llenar las alacenas. No tardé mucho, saliendo de la tienda tenía dos bolsas llenas de comida.

-Mhm, _________ -miré atrás y me encontré con Kakashi y sus alumnos.

-¡__________-san! -Naruto sonríe ampliamente.

-Hola, _________-san -Sakura sonríe y une sus manos tras su espalda.

-Hola, chicos. Me da gusto verlos.

-¿De compras? -cuestiona Kakashi y yo asentí.

-Sí, algo de comida para la casa.

-¿Uh? ¿Tienes un protector de Konoha? -Naruto apunta a este.

Yo la miré unos segundos y no pude evitar sonreír al verla.

-Así es, ahora soy una ninja de Konoha oficialmente.

De la nada las bolsas en mis manos desaparecen y aparecen en las de Kakashi a mi lado.

-Te ayudaré con eso -miré a Kakashi con una media sonrisa y enarcando una ceja.

-No hace falta... -intenté agarrarlas pero él me esquiva-. Kakashi...

-Vamos.

Se da vuelta para empezar a caminar, lo seguí pero de todas formas me crucé de brazos y seguí quejándome.

-Al menos dame una -pedí y él suspira.

-Bien, toma.

Me da justamente la bolsa pequeña, rodé los ojos aunque me reí y le seguí el paso junto a sus alumnos. Llegamos a mi nueva, pero a la vez vieja casa y yo abrí la puerta para dejarlos pasar.

-Que lindo lugar -mencionan Sakura y Naruto.

Sasuke solo estaba con las manos en sus bolsillos y mirándo. Fui a la cocina junto a Kakashi y dejamos las cosas sobre la mesa. Sakura y Naruto quisieron ayudarme a guardar las cosas, Sasuke se queda parado junto a Kakashi.

-¿Eh, quienes son? -pregunta Sakura mirando la foto que traje del clan.

-Son mis padres -respondí cerrando el refrigerador y luego me acerqué al sofá para tirarme allí, ya que estaba demasiado cansada.

-Chicos, ya pueden irse, nos vemos mañana -dice Kakashi.

-Bien, nos vemos __________-san.

-Adiós, chicos -hablé desde el sofá.

Ellos se van dejándonos solos a Kakashi y a mí, él se me acerca y yo me senté para darle un lugar.

-Te debía ramen por el reencuentro, ¿lo recuerdas? -pregunta de repente.

-Lo recuerdo, ¿quieres ir entonces?

-Por eso lo recordé -responde haciéndome reír.

-Vamos -le sonreí mientras me levantaba.

Salimos de la casa y fuimos a Ichiraku y pedimos nuestros tazones de ramen. Yo volví a mirarlo cuando se llevó la mano al rostro para quitarse la máscara y comer.

-_________, ¿cuándo es que te dan tu primera misión? -pregunta Teuchi distrayéndome.

-Am, pues aún no lo sé. El Hokage dijo que me lo iba a decir en algún momento, pero no dijo cuándo -respondí.

Cuando volví a mirar a Kakashi él tenía el plato de ramen vacío y agradeciendo por la comida.

-¡¿Cuándo?! -mis ojos se pusieron blancos por la sorpresa y mi mandíbula casi toca el suelo. Kakashi me mira confundido.

-¿Aún no empiezas? -pregunta él.

Miré mi ramen y empecé a comer mientras me quejaba de que nunca veré su rostro. Al terminar de comer, Kakashi paga y me acompaña de nuevo a mi casa.

-Gracias, Kakashi, me hacía falta un buen ramen.

-Por nada... Nos vemos.

-Nos vemos.

Nuevamente me acerqué a él y besé su mejilla antes de separarme y entrar en casa. Finalmente iba a descansar de maravilla.

VOLVER A TI || Hatake Kakashi y tú ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora