Tropiezos (NejiTen)

Entre semana

La vio en el restaurante el lunes mientras almorzaba con sus compañeros de oficina, ella reía con otras personas con las que estaba compartiendo mesa. Era un nuevo restaurante en el barrio y al parecer todas las oficinas de la zona estaban allí. Se veía extraña, él ya se había acostumbrado a saludarla en vestidos pequeños y luego verla sin nada puesto, no podía negar que se veía bastante elegante.

El miércoles en la mañana sintió su teléfono vibrar, de reojo vio que era un mensaje de ella y lo revisó esperando fuera la confirmación de su encuentro de los sábados, se equivocó. "¿Almorzamos?" releyó el mensaje tres veces antes de contestar "¿Dónde?", sabía que trabajaban cerca así que estaba medianamente familiarizado con las opciones, ojalá no escogiera el restaurante en que la había visto, era difícil conseguir mesa. "Teriyaki 1 pm", repasó mentalmente el mapa, era un restaurante pequeño bastante bueno, "Ok". Siguió con su agenda de la mañana un poco extrañado, desde hacía más o menos 6 meses que se veían y en ese tiempo no habían compartido nada más que los mensajes en los que acordaban verse y solo habían tenido un par de desayunos juntos, y eso fue las pocas veces que se fueron a su departamento en vez del loft de ella.

Llegó al restaurante 5 minutos antes de la hora pactada, tenía una reunión a las 2 y no podía demorarse, tal vez debió decirle que ese día no podía almorzar con ella pero se sintió incapaz de rechazarla. Tenten llegó puntual, vestida en una falda verde oscuro ajustada hasta la rodilla, y una blusa vaporosa de color rosa. Se sentó en la silla a su lado y no al frente como había creído que lo haría.

Mientras comían hablaron de cosas insulsas, era casi una conversación que tendría si compartiera almuerzo con cualquier otro compañero de oficina, el plato que ella había pedido se podía comer con un solo cubierto, así que ella tenía una mano libre que disimuladamente puso sobre su pierna mientras seguía comentando sobre las ventajas del nuevo edificio que estaban construyendo en la zona, él contestó algo sobre la generación de nuevos empleos cuando ella movió la mano y la puso mucho más arriba, se sobresaltó empujando sin querer su cuchillo, un empleado del lugar lo recogió y le entregó uno limpio, la mesa tenía un mantel largo que escondía perfectamente la mano de ella.

Tenten subió más la mano y siguió parloteando no supo sobre qué exactamente, él solo disfrutaba el masaje que ella le estaba dando hábilmente, intentando controlar sus expresiones y no hacer nada que los delatara.

- ¿No crees? — la escuchó decir de repente un poco más alto y deteniendo el movimiento

- ¿Qué? — no había escuchado nada de lo anterior

- Decía que faltan 10 minutos para las 2, es hora de volver al trabajo — no, no quería ir a la oficina, se le antojaba mucho mejor ir a buscar algún hotel cercano

- Mierda, tengo una reunión

- Por eso, es hora de irnos — ella se puso de pie y él observó a su alrededor incómodo, al final optó por quitarse el abrigo y doblarlo de modo tal que le permitiera ocultar su problema. Pagó la cuenta y salieron de allí, caminaron juntos hasta el lugar donde se separaban sus caminos y cada uno tenía que seguir hacía su respectiva oficina.

- De verdad, preferiría no tener que ir a esa reunión — ella se puso de puntas pues no estaba en tacones y lo besó

- Lo sé — le dijo tras terminar el beso y empezó a caminar rumbo a su trabajo.

Maldijo en voz baja y siguió su camino hacia la oficina, durante la reunión no se concentró y no pudo dejar de observar su teléfono de forma insistente, esperando ese mensaje que confirmaba que se verían el fin de semana. Ella había sido cruel al hacer eso mientras almorzaban, se notaba que sabía que lo dejaría solamente iniciado. Cuando finalizó la reunión no lo soportó más y le escribió "¿Sábado?", la respuesta llegó un par de minutos después "No", quiso arrojar el teléfono contra la pared, por su cabeza pasó por un momento la idea que esa mujer fuera la maldad hecha persona. Unos minutos después volvió a vibrar "Hoy" ¿hoy? Contó hasta 20 antes de volver a tomar el teléfono en sus manos "tu casa, después de la oficina" el mensaje llegó antes de alcanzar a contestarle, por lo que sabía, ella salía más tarde que él así que escribió un simple "te espero allá".