(04) No te juntes con extraños.

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En el auto camino a casa fue bastante incómodo, Josh estaba enojado y no dejaba de hacer preguntas extrañas sobre Blake y yo.

-¿Y si terminan?-interrumpió el silencio.

-¿Qué? Pero si acabamos de comenzar- contesté, acabamos de iniciar y el ya estaba pensando en cuando termináramos, es un idiota.

-No me importa, si terminan,probablemente mi amistad con Blake también llegue a su fin, ponte a pensar en eso-dijo con un tono severo-además, tienes que contarle sobre tu enfermedad.

-Mi enfermedad no es importante mientras la tenga controlada.-contesté mientras sacaba mi teléfono del bolsillo- Y no quiero que te metas en esto.

-No siempre haré lo que quieres Elena-soltó mientras estacionaba el auto en el garaje trasero.

Inmediatamente subí a mi habitación y le escribí a Dylan.

Dylan está más en mi casa que en la suya y realmente no me molesta, es una compañía agradable después de todo

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Dylan está más en mi casa que en la suya y realmente no me molesta, es una compañía agradable después de todo.

-Enserio tienes suerte de tener un mejor amigo como yo, soy todo lo que cualquier chica podría desear- interrumpió mientras abre la puerta con dos bolsas llenas de comida.

-Concuerdo con todo lo que dices-conteste, recibiendo la bolsas y prendiendo el televisor.

-Entonces ¿le contaste todo a Josh?-pregunto revisando su teléfono.

-Correcto, lo peor de todo es que después de eso tuve un ataque-dije mientras abría un paquete de gomitas.

Nuestra amistad con Dylan tuvo un inicio bastante...diferente.

4 años atrás

-Lena, recuerda, tienes que estar alejada de los niños en el recreo, procura quedarte en el aula de clases-me decía mi madre mientras nos dejaba a Josh y a mí en la escuela.

-Entendido, como todos los años mamá-conteste mientras bajaba del auto.

-Que tengan un gran dia niños, los amo- se despidió y luego se fue.

Era el primer dia de clases, pero, era distinto porque era mi primer dia en sexto grado. Durante los últimos años tuve que tomar clases media jornada en casa, de vez en cuando iba a la escuela pero nunca tuve el permiso de hablar con alguien o de estar tanto tiempo cerca a excepción de mi profesora.

-Enana, nos vemos, no te juntes con extraños.-se despidió Josh antes de ir a saludar a sus amigos.

Y otra vez me quede sola, no se que estaba esperando ¿un amigo tal vez?, era ridículo que alguien quisiera estar cerca de la niña "fantasma" si, así me llamaban.

Decidí ir al aula de clases y ahí me di cuenta de todas las personas nuevas que habían llegado al curso, tantas caras nuevas y ninguna con la cual podría socializar, ninguna seria un amigo nuevo y de seguro estas nuevas personas  no tardarán en conocerme como la fantasma.

E l  S ó t a n oDonde viven las historias. Descúbrelo ahora