CAPITULO 32

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CAPITULO 32

"Dos ... ¿Doscientos millones de bayas?" Usopp preguntó con temor.

Los tres Sombreros de Paja estaban sentados en una lujosa habitación dentro del intercambio más grande de la ciudad, con un gigantesco montón de oro extendido sobre la mesa frente a ellos.

El tasador bajó la lupa que sostenía en su mano. "Sin duda, ¡todo esto es oro viejo, vale cada baya!"

"¡Woooaahh! ¡Podemos comprar muchas cosas con eso!" Luffy se rio.

El tasador ocultó una sonrisa ante la ingenuidad de los dos, "Si no hay nada más, prepararé el dinero para-"

Un pie golpeó la mesa con un fuerte golpe, silenciando al tasador.

Nami miró al tasador con una sonrisa propia, "¿Doscientos millones que dices?"

"Sí ... sí señorita ..." la tasadora tartamudeó, estremeciéndose bajo su mirada.

El navegador resopló antes de señalar con el pulgar a Luffy: "Sentado frente a usted hay un contralmirante de la sede de la Marina, si continúa con su estafa, lo arrestaremos aquí mismo y cerraremos este negocio".

Retirando su pierna de la mesa, la navegante se cruzó de brazos con una sonrisa, "Entonces ... ¿Cuál fue el precio que ofreció de nuevo?"

Los dientes del tasador rechinaron al escuchar sus palabras.

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Usopp salió del edificio mientras agarraba dos maletas grandes cerca de su pecho, sus ojos se movían furtivamente. Siguiendo detrás de él, Nami se aferró a dos maletas con un agarre de hierro, desafiando a cualquiera a que le quitara sus premios.

Por otro lado, Luffy sostuvo ambas maletas con una mano mientras cavaba su nariz con la otra, lo que no importa en el mundo.

"Quién hubiera sabido ... que obtuvimos seiscientos millones de eso ..." murmuró Usopp, aferrando las maletas más cerca de sí mismo.

"Ya esperaba esto para empezar", se rió Nami nerviosamente. "Pero aún así ... Ver tanto dinero a la vez es bastante estresante para mí".

Luffy se echó a reír, arrojando ambas maletas sobre su hombro, "Estas ni siquiera son la mayor parte de lo que tenemos. ¡Todavía tenemos el oro del arca también!"

"Ya les dije a Sanji y Zoro los términos del acuerdo para el desguace del arca", comentó Nami, trepando a bordo del toro Yagara junto con los demás. "Mientras no hagan nada estúpido, también obtendríamos un buen trato de la chatarra".

Siguiendo la corriente de agua por el canal, el trío regresó al enorme muelle que habían visto camino al intercambio.

"Oye, la multitud se ha ido", señaló Usopp, estacionando su toro cerca de las puertas gigantes.

"¡Genial! ¡Vamos a buscar a ese tipo de Iceburg!" Luffy exclamó, marchando hacia el muelle.

"¡Luffy! ¿Estás seguro de que no necesitamos una cita o algo así?" Protestó Nami.

"¡OYE!" Gritó Luffy, ya tratando de trepar la valla.

"¿Por qué siquiera pregunté?" El navegante suspiró.

Antes de que el Contralmirante pueda saltar sobre la cerca, una figura apareció frente a él, su palma empujando contra el pecho de Luffy para evitar que fuera más lejos.

"Woah, esta es un área restringida. Incluso los marines necesitan autorización para entrar aquí", anunció la figura.

Al alejarse de la cerca, Luffy echó un buen vistazo a la figura que lo detuvo.

LUFFY MARINEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora