capítulo 8 "las mentiras tienen patas cortas"

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Las mentiras tienen patas cortas .
Paso una semana desde que encontraron el ramo de flores en la cochera.

Las cámaras mostraron a un hombre encapuchado, no se llegó a ver su rostro, pero tienen varias pistas.
Francisco  tiene sus sospechas a una persona, pero tiene prohibido actuar sin pruebas, todo lo que haga puede jugarle en contra.

Sonia sigue desconfiando que algo pasa, pero no quiere forzar a que Francisco hable necesita que confíe en ella.

— Francisco vamos a llegar tarde otra vez a la empresa, apúrate— dijo Sonia

Eran las7 de la mañana y todavía estaban  dando vueltas en la casa.
Ameli se había marchado el día anterior a lo de la abuela, así que no tuvieron que madrugar.

Por suerte se llevaba muy bien con sus nuevos compañeros, Francisco prefirió cambiarla de colegio para estar más seguro.

Will era el embargo de llevarla y traerla cada vez que ellos no podían. Era en quién  más confiaba,  después de su propia familia.

Sebastián el novio de Catalina, también lo estaba ayudando mucho, le ofreció gente de confianza para la búsqueda de Tahia y la protección de todos en la familia.

Le estaba cayendo bien y por suerte se estaban entendiendo mucho.
Sabia que Catalina estaba en buenas manos.

Francisco hoy tiene una junta con los nuevos inversionistas para la nueva sucursal de Argentina y eso lo tiene bastante preocupado.

— Vamos amor— dijo el

Cuando llegaron, le dio un beso .

— Sonia no salgas de acá hasta que vuelva — dijo el

— Si Francisco quédate tranquilo, te amo suerte.— dijo ella mientras bajaba del auto.

— Si mi amor, solo es firmar, vos ya hiciste lo demás y estoy orgulloso de eso — dijo el y arranco el auto.


Cuando se marcho no se quedo conforme con su palabra y pidió refuerzo de seguridad personal para que estén atentos a cualquier movimiento.


— Buenos días a todos — dijo Sonia mientras entraba a la empresa.

Llamo al ascensor y subió a su piso.
Paso a saludar a Catalina, que justo se encontraba en una llamada, asi que le hizo seña que después pasaba.

— Buenos días Julián, ¿ cómo está?— dijo ella saludando a su suegro.

— Hola querida, muy bien ¿ vos?— dijo el

— Muy bien por suerte, te dejo esto es la copia del contrato que iban a firmar hoy— dijo el

— Perfecto querida, muchas gracias.
Después se sentó en su escritorio y se puso a trabajar.

A media mañana se dirigió a la cocina para preparar un café.

Catalina se encontraba en una reunión así que tampoco pudo acompañarla.
Mientras esperaba siento que  alguien entraba.

— Enrique, no te vi llegar.¿ todo bien, como estas?—pregunto Sonia

— Disculpa, no quise asustarte, ¿ como estas vos?

— Bien, muy bien, ¿ no estas reunido con Catalina? Pensé que tomabas en lugar de Francisco— pregunto Sonia confusa

— Eso es imposible, jamás podría tomar el lugar de el, no tengo su suerte, o lo que tendrá el — dijo de manera irónica

Sonia lo miró extraño .

—¿ por qué decís eso Enrique? Pregunto ella mientras se servía el café-—¿ Francisco en algunos momento te dijo algo?— pregunto ella enojada

— No para nada, al contrario, solo digo por su inteligencia y su capacidad, cambiando de tema ¿ se sabe algo de Tahia?

— No, va por lo menos yo nada, todo eso se encarga Francisco, prefiero mantenerme alejada.

— Si mejor, yo todavía no entiendo dónde puede estar, tanta gente que metió Francisco para encontrarla y todavía nada— dijo mientras se servía su café

Sonia se puso pálida en segundos, sintió su cuerpo dormido, escuchaba y sentía su corazón bombear, veía que el seguía hablando pero no lo escuchaba, vio cuando se marcho y no pudo decirle nada.

Ahora le cerraba todo, ahora sabia que era lo que tanto escondía Francisco.
La había engañado, mentido, estaba totalmente destrozada.

— Sonia¿ estas bien? — dijo Catalina, cuando entro a la cocina.

— No, me mintió, Francisco me mintió cata— dijo ella llorando

— Para Sonia, tranquilízate, ¿ en que te mintió?

— Tahia está suelta todavía, no la encontraron, me viene mintiendo hace 2 meses .—dijo Sonia sin dejar llorar

— Bueno, hagamos una cosa, no se como te habrás enterado pero Francisco tiene una buena razón. Llámalo y habla con el

-—¿ vos lo sabías?, Si lo sabias— dijo Sonia, observando la cara que puso Catalina,— Todos lo sabían y me tomaron de estúpida. Dijo mientras se marchaba.

Se dirigió a la oficina agarro su cartera y salió.

Le pido a uno de seguridad que le llame a will, en apareció en 5 minutos y la dejó en su casa

Francisco estaba volviendo de la reunión, cuando vio que tenía una llamada perdida de Catalina, pero antes de poder marcar su número, entró una llamada de will

— ¿ qué sucede will? —dijo Francisco, mientras conducía

— Señor, acabo de dejar a la señorita Sonia en su casa, no se encontraba bien, creo que estaba llorando señor, no quiso hablar conmigo. — dijo will

— Esta bien will, no se vayan hasta que yo llegue, voy para allá

Sonia estaba muy enojada, se sentía engañada,  odiaba las mentiras con toda su alma, le había ocultado algo muy grave, se dirigió al cuarto y saco toda su ropa.

Metió todo en bolsos, tenía pensado irse, pero no sin antes hablar con el.

Finalmente te Encontré (Parte 2 ) #PremioEstaciones2020 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora