Prólogo

1.9K 272 36
                                    

—ESTE LUGAR ME DA ESCALOFRÍOS

—A mí también

Laureen Steward da un tropiezo al poner un pie en el puente camino al castillo de Hogwarts. Éste se alza imponente frente a ella obligándola a tomarse del brazo de su compañera para no irse de nuca contra el piso. Es un castillo enorme, como ningún otro. Laureen no recuerda haber visto nunca una maravilla similar, ni siquiera el castillo de sus antepasados americanos parecía ser suficiente para comparar sus muros de cantera con los de piedra caliza de la escuela escocesa.

El brazo de Fedora se tensa debajo del suyo mientras caminan hacia el umbral bajo las miradas quisquillosas de los alumnos desde lo alto de las torres. Laureen logra bisbisar a varios de ellos murmurar, quizá por los harapos que llevan puestos o la forma en que sus pies descalzos limpian la suciedad del puente. Fedora se muestra incómoda por el asunto, pero Laureen le apremia para continuar hacia adelante ignorando los cuchicheos de los infantes.

—¿Crees que es una buena idea? ¿Venir hasta acá por una simple suposición?

—Él me llamó, no podía rechazar su invitación, sería una descortesía

—Laureen tú de verdad necesitas ordenar tus prioridades

—Si lo que dijo en su carta es verdad, si él encontró la manera de postergar la maldición entonces se lo debo

—Tienes suerte de que haya un grupo de nuestras hermanas en estas tierras, de lo contrario hubiera declinado tu oferta de venir hasta acá para hablar con un mago que no conoces

—Lo conozco y él a mi

—Me corrijo: venir a entrevistarte con un mago que sabe muy poco de ti

—Sabe lo suficiente y eso me basta—finaliza Laureen apretando su agarre sobre el brazo de la mujer

Las puertas del colegio se abren levantando una pequeña nube de polvo mostrando del otro lado a una mujer de faldas largas con estampados escoceses junto a un muy pintoresco gorro de bombín. Laureen se traga una carcajada, inclinando la cabeza ante la mujer que les mira con el ceño fruncido.

—Perdone, llegamos justo a tiempo. Tenemos una reunión con...

—Albus Dumbledore, lo sé. Él personalmente me ha comunicado al respecto

—¡Perfecto!—Laureen sonríe, dando un brinco en su lugar para después entrar al castillo jalando el brazo de Fedora. La mujer de falda escocesa pestañea, descolocada por la intromisión—¿Podría llevarnos a dónde está? Tenemos un poco de prisa, ¿sabe? Por lo que nos gustaría terminar con el tema lo más pronto posible

—Por supuesto—responde, intentando recomponerse por la algarabía de la joven. Se arregla el moño de su blusa antes de enfilarse hacia las escaleras—Detrás de mí, por favor

Laureen aprieta su agarre sobre Fedora pues la mujer parece pronta a escapar por la puerta del comedor en busca de una salida. Eso le causa muchísima gracia. La gran Fedora Cronwell asustada por una simple visita de cortesía a un profesor de colegio. Es un evento que no se aprecia todos los días.

La mujer les lleva hasta una de las torres más altas del castillo donde alumnos con uniformes de colores salen del aula hablando entre ellos, aparentemente emocionados por la lección antes impartida. Las tres mujeres esperan la salida de cada uno antes de ingresar, deteniéndose a la mitad de la sala donde un hombre delgado, alto y con una cabello apenas canoso les da la espalda.

—Albus—dice la mujer, aclarándose la garganta—Tú amiga llegó

Albus Dumbledore se da la vuelta, recibiendo a sus invitadas con una amplia sonrisa en los labios. Se acerca, aun con varios pergaminos sobre sus manos saludándolas con un pequeño asentimiento de cabeza.

Nightingale⁰ [Newt Scamander] LUNAE LUMEN SAGAWhere stories live. Discover now