TA'RA

215 36 7
                                    

Caminé por el frío césped, donde las moradas hechas de madera y cubiertas de tierra se adueñaban del paisaje.

Me detuve frente a una.

Una tétrica lápida en dónde se apreciaba tu nombre escrito.

Me agaché y terminé sentado en flor de loto.

Mira Yunho... Te traje gardenias blancas... — mi voz salió ahogada de mi garganta, dejé las flores al pie de la lápida y suspiré.

Saqué mi diario del bolsillo de mi chaqueta y lo dejé junto a las flores.

—Te he escrito muchas cartas... No quiero que te pierdas de nada... —leí todo lo que había escrito, página por página, respirando profundo de vez en cuando, cada vez que las lágrimas amenazaban con salir.

—Mis padres quieren que me vaya de Seúl... Los chicos también opinan lo mismo... Dicen que no puedo seguir aquí... —las lágrimas volvieron a picar contra mis ojos, esta vez no pude detenerlas— pero no puedo irme, mis recuerdos son lo único que tengo... No puedo abandonar lo poco que me queda de ti...

Los sollozos escaparon de mi garganta, mis manos temblaban, mi corazón dolía.

—Te extraño Yunho... No ... No te imaginas cuánto te extraño... Nada tiene sentido sin ti... No sé cómo podré continuar, vivo con esta dolorosa sensación constante, como si... Cómo si alguien atravesara un hierro ardiente a través de mi pecho... Duele... Duele mucho Yunho...

Mis manos presionaron contra la fría lapida de concreto, mis dedos acariciaron cada letra que escribía tu nombre.

Jeong Yunho.

—Te amo tanto... — sollozé — en verdad te amo, Yunho...

En verdad... te amo.

TA'RA  •YunGi• Donde viven las historias. Descúbrelo ahora