C a p i t u l o 3

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~Narra Andrómeda~

"Los ninjas no se comen y no confíes en los duendes que te piden dinero"

-¡ROBÍN HOOD SAL DE ALLÍ Y VEN A AYUDARME!

Robín me cago en ti y en toda tu descendencia. Les resumo muy rápidamente lo que sucede, estamos siendo asaltados por unos delincuentes, y el maldito de Hood sigue metidito en su saco de dormir mientras que yo lucho con uñas y dientes con estos barbaros.

-DESGRACIADO AYÚDAME- le pego en el estómago a uno de los hombres que intentan robarnos. Al hacer eso descuide mi espalda y otro me tomo por la espalda y me tiene atrapada.

-MALDITO HIJO DE PERRA SUELTAME BASTARDO.

-Oh niña, no intentes escapar, con lo flacucha que estas, además así no debería hablar una señorita- dice el bicharraco que tengo delante mientras sonríe perversamente-.

-En primer lugar hablo como quiero, y en segundo si no me sueltan los mataré a todos cuando me suelten- amenazo con la voz llena de furia, a su vez me retuerzo como una lombriz, para ver si el tipo me suelta-.

-Se supone que los que roban somos nosotros ¿No creen?

-COMO QUE LLEGAS UN POCO TARDE ¿NO ROBÍN?

-Me lo agradeces luego- me guiña un ojo, tensa su arco y le dispara en la cabeza al hombre que me sostenía, rápidamente empuje su pesado cuerpo hacia atrás para que no se caiga encima de mí-.

-¿Quién sigue?- digo mirando al bicharraco de la sonrisa perversa que me dijo como debería hablar- me parece que serás tú- me acerco a él, me lanza una patada pero la esquivo- eres muy lento como para dar patadas, afortunadamente para ti no volverás a cometer ese error- lo tiro al piso, saco ágilmente la daga que está en mi bota- nunca subestimes a tu Cazadora- finalmente le apuñalo el pecho varias veces con la daga.

-Tu muchacho, vete y avísale a los demás que no les conviene meterse con Robín Hood y con Cazadora, y que te perdonemos la vida no es porque te tengamos piedad, es que necesitamos que alguien transmita el mensaje de que no hay que meterse con nosotros, ¿Comprendes?- lo miro con asco, es un hombre de alrededor quince años. Me acerco al niño para inspeccionarlo, se nota que lo trajeron como parte de un trato, en primer lugar porque está atado de pies y manos para que no pueda escapar, luego tiene un cartel colgado del cuello que dice "Propiedad de Roger Clark", él era un traficante de esclavos altamente conocido en Los Tres Reinos- ¿No te parece estúpido llevar un cartel con el nombre de tu comprador, y más aún cuando es Roger Clark?

Espero unos segundos pero no contesta.

-¡Contesta!, no te conviene hacerme enojar-

-Si Cazadora, solo que no se lo comenté a los zopencos que tenía como secuestradores ya que con esto al cuello tendría más posibilidades de escapar en el caso de que me encuentre a alguien en el camino.

-Mmm, ya veo, eres bastante inteligente, ¿Cómo te llamas?

-Mi nombre es Gerard Antrack.

-¿El ex lord Antrack de Ostentland?- en estos momentos estoy altamente confundida, este hombre tiene, o más bien tenía una gran influencia en Ostentland, era lord de una de las ciudades más importantes de ese reino, siempre estaba protegido hasta los dientes, por lo que se me hace súper extraño que haya sido secuestrado y vendido a un traficante de esclavos-.

-Así es Cazadora- sonríe y me mira entera con una mirada perversa.

-Robín suéltalo y que se vaya, no me apetece seguir en presencia de un ser tan repulsivo. Y señor Antrack, puede dejar de mirarme así, me produce demasiadas nauseas, no me gustaría tener que quitarle mi "perdón" y ofrecerle el mismo destino que a sus ex acompañantes- rio muy fuerte- a quien engaño, la verdad es que no me molestaría para nada hacerlo si es que no quita sus asquerosos ojos de mi persona, hasta donde yo se la cara la tengo arriba, y me gusta que me miren a los ojos cuando hablo con alguien.

Infraterra: Los Tres Mundos (pausada por el momento)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora