Capítulo 13.

973 124 12
                                    

—¿Quien eres tú? - vuelve a preguntar la princesa sin dejar de mirar al joven que permanecía frente a ella_

La armoniosa voz de la chica llegó como una dulce melodía para el demonio, que no podía despergar sus mirada de ella. Era como ver un universo tan magnífico y perfecto que  se perdia en aquellos profundo ojos café que le recordaba el otoño en la tierra. Era un ser irreal con aquellas hebras doradas, que danzaban libremente por el aire que corría parecía que contemplaba a un Ángel en todo el sentido de la palabra.

Aquel hermoso vestido color rosa con algunas partes en blanco era adornado por unas mangas de tela fina que caía lleango a la mitad del brazo y se ajustaban al final, adornado su hebras doradas una diadema del mismo color que su vestimenta.

—¿Acaso no puedes hablar?- se acerca con genuina curiosidad y más por que le atraían aquel par de ojos color carmín_

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


—¿Acaso no puedes hablar?- se acerca con genuina curiosidad y más por que le atraían aquel par de ojos color carmín_

— N..No te acerques más_

— Que hermosa voz tienes todo en ti es hermoso- la princesa alaga estando a pocos mentros de aquel misterioso chico_

El príncipe demonio daba pasos torpes hacia atrás, algo dentro de el le decía que no retrocidiera pero otra parte le dictaba que corriera lo más lejos de ese lugar.

—Tus ojos son hermosos parecen brillar por la luz de la luna - escucha esa dulce voz sintiendo como un cálida meno toca su mejilla, la princesa estaba fascinada por ese calidez que sentía por aquel toque_

—¿Que haces?_

La princesa ríe por lo tanto que sonó aquella pregunta.

—¿Que parece que hago? -le pregunta tomando su rostro con ambas manos_

—¿¡Tocarme sin saber si soy bueno o no!?_

— No eres malo lo puedo saber por tus ojos -toca con suavidad rostro- Tu eres igual que yo llevas una carga que no deseas tener_

Tanto demonio y Ángel se quedan viendo fijamente, analizando todo lo miraban la luna brillaba dando un toque mágico aquel momento que vivían ambos seres tan distintos pero tan similares. Ambos habían encontrado en la mirada contraria lo que necesitaban su complemento, un amor prohibido entre ambas razas que traería consigo solo destrucción a su paso como dolor.

— Tu nombre quiero saberlo_

— Kun Ming -responde bajando aquellas manos de su rostro realmente el demonio estaba a un sorprendido_

— Kun de Universo y el Ming de brillante que nombre más hermoso_

— No lo es si tus padres constantemente te siguen diciendo así
-resopla volviendo a acordarse de su tormento_

— No lo hagas no recuerdes_

La princesa toma aquella mano con fuerza y hace aparecer sus blancas alas, no sabia nada de aquel joven para que mostrara ese parte de ella. Pero no deseba ver aquel tormento en aquellos hermosos ojos, el príncipe demonio no emite ninguna palabra tras ver aquellas hermosas alas de un blanco dándose cuanta que estaba con un Ángel.

En Tu Mirada.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora