#3

1.3K 75 13
                                    

Mascotas.
Volkacio.🌈

El día estaba un poco nublado  pero cómo todos los días se levantó gracias a la hermosa cachorra que siempre lo levantaba por las mañanas, un poco somnoliento se estiró sobre la cama mirando a la cachorra quien no despegaba la mirada de su dueño.

— ¿Qué pasa, Perla? ¿tienes hambre? —. habló poniéndose de pie caminando hacia el piso de abajo para dirigirse a la cocina donde estaba la comida de su mascota.

Mientras el caminaba la pequeña perra iba detrás de él moviendo su rabo de un lado hacia el otro emocionada. El de cresta sirvió la comida de su mascota  en el bello cazo rosado, al servir la comida rápidamente la cachorra se dirigió al cazo para comer.

— Este fue tu última comida Perla, más tarde iremos a la tienda de mascotas para comprarte más comida pero mientras disfruta.

Le dió una pequeña caricia en su cabeza para después  sacar unas cosas del refrigerador para comenzar hacer su desayuno, más tarde tendría que ir junto a Perla por su comida.

La mañana paso rápido cosa que el chico de cresta agradeció ya que no quería que su perrita se quedará sin comer, estaba por colocarle la correa a su hermosa caniche cuando su novio empezó a sonar suspiro pesado y atendió a la llamada sin mirar el nombre de contacto.

— ¿Hola?

— ¿Horacio? Hombre hace días que no hablamos, ¿te apetece salir a dar una vuelta o a liarla en plaza central? —. al escuchar la voz de su mejor amigo sonrió ligeramente pero tuvo que negarle aquella salida ya que saldría.

— Eh, sabes que me gustaría salir y liarla por ahí pero justo ahora tengo que salir, Perla se ha quedado sin comida y pues, tengo que ir a comprarle comida, sabes que es muy mimada y si no come sus dos veces al día puede enojarse —. habló mirando a la caniche la cual tan sólo lo miraba sentada.

— Joder con tu perro, eh, pero está bien, aunque me parece que no sólo vas a eso, pero bueno, si después te quieres unir te estaré esperando en plaza central con Emilio quizás, nos vemos, a y no consientas tanto a esa perra que te saldrá muy caro.

Alejó su móvil de su oído al escuchar el pitido que avisaba que la llamada ya había terminado, miró por última vez su móvil antes de meterlo a su bolsillo y tomar nuevamente la correa para colocarsela, miró unos segundos a su mascota pensando ¿En realidad la mimaba demasiado? escucho un claro ladrido de su mascota sacándolo de aquel pequeño trance.

— Está bien, está bien, vámonos.

Tomó las cosas que necesitaría para después salir de su departamento hasta el parking en donde se encontraba su pequeño pero hermoso mini rosa, se montó en este abriendo la puerta de un lado a su mascota la cual también se subió, unos segundos después ya se encontraba conduciendo hacia aquella tienda de mascotas la cual siempre frecuentaba.

(;ŏ﹏ŏ)

Cuando entraron a aquella tienda una pequeña campanita aviso de su presencia ahí, el dueño de la tienda que se encontraba en caja volteó hacia el ruido topándose con aquel chico de cresta que cada semana venía junto a su bella cachorra, sonrió ligeramente al ver cómo se acercaban a él.

— Priviet, Horacio —. se asomó un poco tan sólo ver a la caniche quien movía su rabo de un lado hacia el otro emocionada. — hola perla.

Horaciobowl¿♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora