calentamiento

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H: -¡Aaah!~ mhh-

Se escuchó levemente como gemia la rubia puesto que su boca seguia ocupada con sus dedos, su mano izquierda recorría su vagina, su nectar de amor ya humectaba dentro de ella.

El ligero dolor que sentía en la mano (producto de la quemadura) ya le era insignificante con el placer que comenzaba a sentir.

Después de que sus dedos recorrieran su interior dando vueltas se concentro en acariciar su zona G, sin dejar lamer sus dedos. Las sensaciones era potenciadas por estar a ciegas, su respiración acelerada, sus mejillas rojas, gran parte de su cuerpo mojado y su zona íntima húmeda, a pesar de lo sucedido y sus manos heridas le estaba encantando este momento.

Después de tanto estimulo a su boca y a su punto G su cuerpo cedió, Ai sintió una ligera tensión y de su vagina salió expulsado un líquido blanco en poca cantidad. Saco los otros dedos de su boca y los dejo junto a su mano flotando en el agua.

- Creí que eyacularía un squirt... Bueno peor es nada - Pensó Hayasaka.

La descarga de placer que obtuvo la rubia le dió un ligero sueño, pero apenas había empezado.
Se detuvo un tiempo.

Volvió a estirarse para alcanzar su bolso y de ahí saco un un control y aparato con un hilo de plástico, un seguro con un pequeño óvalo al final. Hayasaka alzó su pierna izquierda, paso el hilo por su muslo rodeándolo y aseguro el aparato, por último acerco aquella cabeza ovalada a su clítoris, el agua lo movía un poco así que de la misma bolsa saco un calzon de bikini. Levantándose de la tina  se apuro a ponérselo, era de los que se amarraban por lo que no tardó mucho.

Sentada de nuevo y con el bikini presionando el aparato solo movió una parte del calzon para dejar al descubierto su vulva

Con el control del vibrador, lo ajusto a una potencia media, un gemido salió de su boca.

Ai saco de su bolsa un consolador y poco tardó en acariciar sus rozados labios menores con la cabeza de dicho dildo mientras el otro vibrador seguía estimulando su punto más sensible.

A: Fufufu..... Aaah, n-no sé si deba ser tan ruda conmigo... -Dijo Hayasaka- ¡Aaaaah!-

La rubia penetro su vagina con aquel dildo, lo introdujo dejando una parte algo fuera, y tomándolo desde la base empezó a meter y sacar el dildo simulando el acto sexual.

Primero Hayasaka con su mano izquierda movía el dildo recto, y poco a poco agarraba el ritmo de sus canciones, con su mano libre volvía a atacar sus pezones puesto que su otro vibrador ya estimulaba su otro punto erógeno

La chica ojo azul, cegada, excitada y con la cara la roja acariciaba su suave cuerpo sin dejar de mover su dildo, paso su mano derecha desde su boca, volvió a acariciar sus senos, bajo hacia su abdomen y termino en sus muslos acariciandolos y dándoles ligeros golpes como si de una nalgada se tratara

La maid ahora movió el dildo algo diferente, lo metía menos pero lo curveaba dentro de ella para que el glande de plástico rozará su punto G, esto provocó un gemido más fuerte de la rubia y una lubricación mayor en su cavidad vaginal.

El ritual de Hayasaka AiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora