Inicia el plan

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Alexby estaba volviendo de sus actividades. No había obtenido mucha información nueva pero había contratado a alguien que se encargaría de dibujar a una persona hipotética, según lo visto en las cámaras, para poner carteles de "Se busca".

Durante todo el tiempo que estuvo fuera de su área de trabajo, sintió miedo. Era completamente consciente de que, cualquier paso en falso, podría costarle la vida y eso le aterraba.

Llevó a plantearse que, pasado todo este tema, debía tomarse vacaciones, pero se arrepintió en el mismo instante en el que ese pensamiento llegó a su cabeza, descartandolo al segundo. No había otra razón que la del búho del cual no dejaba de pensar. En toda su peligrosa misión, ese fue el único momento en el que pensó en él.

Aunque en parte era beneficioso para su trabajo, él era mas eficiente cuando intentaba no pensar en Fargan. Se le ocurrió buscar una imágen de referencia para que el pueblo le ayude a buscar a su criminal personal justo en ese momento ya mencionado.

Cuando vió que estaba cerca de la comisaría se sintió un poco más en paz, permitiendose cerrar los ojos y respirar profundamente. Había vuelto sano y salvo.

Por otro lado, Luzu llevaba ya unos cuantos minutos en el tejado de uno de los edificios cercanos a aquel lugar.

Se había tardado más de lo habitual en hacer la flecha que usaría, la había tallado a mano y lijó un poco los bordes de la punta para que parezcan un corazón. Sin dudas había sido la más hermosa y elaborada que usaría en su vida, pero temía no llegar a tiempo.

Lo primero que hizo al llegar, fue revisar en cuál de todos los puntos altos de los alrededores se pondría a esperar y, luego, se le ocurrió entrar a la estación de policías para preguntar por su amigo de baja estatura.

Si le decían que se había ido, vería en qué otro lugar podría ponerse para que vea la dichosa carta que, por cierto, no había logrado leer por estar cerrada. Si llegaba a estar ahí, se inventaría una excusa como que pasaba para ver cómo estaba y luego se iría.

Se llevó una sorpresa cuando los oficiales que estaban por ahí le dijeron que estaba en una misión y que volvería pronto, pero lo tomó como una positiva de que no debía cambiar mucho su plan.

Se subió hasta lo más alto del árbol que había en la plaza justo al lado del complejo y esperó.

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