Mi vida contigo (touka x kaneki) [EDITANDO]

Capítulo 3 [EDITADO]

Luego de que Hinami y Yomo fueran a comprar comida para Hetare.

-¡Touka no te quedes sin hacer nada! ¡Ayúdame! -Grito un Nishiki irritado.

-¿Por qué te ayudaría? Y NO ME GRITES NO ESTOY SORDA. -Grite para luego lanzarle un frasco a la cabeza.

-¡ESO DUELE MALDITA! -Dijo quejándose.

-¿Y ahora por qué pelean? -dijo Kaneki apareciendo.

-NO ESTAMOS PELEANDO... DEJA DE DECIR LO MISMO QUE YO. -Dijimos los dos tomándonos por el pelo.

-Ustedes dos ya me tienen cansado con sus peleas de niños. -dijo irritado Enji.

-¡EL EMPEZO A GRITARME! -Me defendí mientras le mordí el brazo a Nishiki para que me soltara.

-¡ESTUPIDA! -Grito soltándome para sobarse el brazo.

- Eso te lo ganas por jalarme del pelo. -dije mientras me ponía al lado de Kaneki Nishiki se paraba, aproveche la ocasión haciendo que sus pies se enredaran y cayera al piso. Obviamente corri por mi vida.

Narra Kaneki:
Creo que estos dos nunca dejaran de pelear, es verdad que parecen dos niños.

-Maldita, ya verás. -dijo Nishiki enfadado para empezar a perseguir a Touka por todo el edificio.

-Creo que ni en un millón de años se llevaran bien... -dije suspirando.

-Bueno, si ellos no pelearan el lugar sería muy aburrido. -Dijo Yoshimura sonriendo al lado de nosotros- Oye Kaneki...

- ¿Si? -pregunte mientras dirigía mi mirada a él.

-¿Por qué Touka parecía triste anoche? -pregunto, y a decir verdad no tenía la más mínima idea...

-Llego a mi cuarto algo desanimada pero pensé que era porque no podía dormir... -dije agachando la mirada.

Mientras Nishiki perseguía aun a Touka, Uta entra a Anteiku.

-Buenos días... ¿esta Touka? -pregunto, y en ese momento se escuchó un gran escándalo arriba por los dos "niños" que correteaban.

-Puede que estén arriba. -dijo Yoshimura limpiando un par de vasos.

Uta subió, mientras que los demás ayudábamos a que la tienda se viera impecable para cuando empiecen a llegar los clientes.

Narra Uta:
Yoshimura me dijo que probablemente estén donde se escuchó el estruendo.
No tarde mucho en llegar, abrí la puerta y un frasco de ¿Mayonesa? Voló sobre mi cabeza.

- ¡Mierda Touka quédate quieta! -Decía Nishiki mientras se tiraban a muerte mayonesa.

-YA VERAS -Dijo arrojándole un frasco de mayonesa pero este lo esquivo, haciendo que este parara en mi cara.

-LO SIENTO UTA-SAN NO TE HABIA VISTO. -Dijo Touka lamentándose.

-No importa...-dije mientras me limpiaba con una servilleta.

- ¡Ja! No puedes conmigo pequeña. -dijo Nishiki lanzándole mucho Kétchup.

-YA PARAAAAAA. -Dijo Touka. Acto seguido ato a una silla a Nishiki y le puso una papa en la boca- de ahí no te muevas... ¿Qué haces aquí Uta-san? -pregunto viéndome.

-Queria hablar antes de ir con Hinami a la tienda de muñecas. -dije viendo a Nishiki en la silla.

-Bueno, vamos a mi habitación. -dijo ella para luego salir ambos de ese cuarto dejando a un Nishiki atado solo.

Llegamos a su cuarto.

-Bien, ya podemos hablar. -dijo ella mientras se sentaba en su cama.

-Queria pedirte disculpas, por lo de anoche... -dije rascándome la nuca.

-No importa... pero... -hizo una pausa- quiero que me contestes algo.

-Claro. -dije.

-¿Desde cuándo te gusto? -pregunto mirando sus rodillas.

-Desde hace tres años... -dije desviando mi mirada.

-¿Y porque esperaste a que fuera feliz con otra persona para decírmelo? -pregunto en un tono molesto.

-Porque creí que te podría superar pero me di cuenta que no...-dije agarrándola del brazo y acercándola a mí para poder depositar un beso en sus labios.

-¡NO PUEDES! -Dijo empujándome con los ojos cristalizados.

-Nadie se enterara. -la tome nuevamente y la bese.

-¡Yo amo a Kaneki! -Dijo medio llorando empujándome.

-Entiendo, pero nunca me rendiré. -dije y me fui dando un portazo.

Narra Touka:

Uta me había besado... ¿Por qué me hace esto?
Yo soy feliz con Kaneki y él quiere separarme de él.
Solo porque creyó que podría superarme... Que estúpido que es.
Me limpie la cara y baje en busca de Kaneki, obviamente estaba decidida a contarle que paso.

-Touka-chan ¿Qué pasa? -pregunto mientras lavaba unos platos.

-Kaneki...-dije mientras corrí hacia el abrazándolo por la espalda para romper en llanto.

-Tranquila...¿Qué pasa? -dijo mientras tomaba mi rostro entre sus manos.

-Uta-san me beso... -dije mirándolo con los ojos cristalizados.

-Tranquila, no fue tu culpa ¿si? -dijo mientras me abrazaba fuertemente.

-Perdoname... -dije casi sin aliento.

-Tranquila, solo recuérdame algo... -dijo mirándome los ojos.

-¿Qué cosa? -pregunte mientras le abrazaba.

-No destriparlo cuando le vea. -dijo sonriente.

Sonreí al ver que lo había entendido, le di un tierno beso en la comisura de sus labios.

-Awww pero miren a la pareja feliz. -dijo Yomo riendo.

-¡Están enamorados! -dijo Hinami corriendo hacia nosotros para abrazarnos.

-Volviste. -dije sonriente

-Siii, ahora me iré a preparar para ir con Uta-san para ver muñecaaaas -dijo riendo para luego ir corriendo a su cuarto.

-¿Todavía la dejaras salir con Uta? -pregunto Kaneki mirándome.

-No le prohibiré ver a Uta por mis cosas Kaneki. -dije con una sonrisita de medio lado.

-Bueno... ¿Qué te parece si esta tarde vamos al parque a dar un paseo? -dijo algo nervioso jugando con sus dedos.

-Me parece bien. -dije sonriendo, después de todo me vendría bien salir un poco- me sorprende este lado tuyo Kaneki -dije saltando a sus brazos haciendo que el me tome por las piernas.

-Tendrás que acostumbrarte. -dijo mientras depositaba un beso en mi cuello- Dime...

-¿Qué? -dije enredando mis brazos en su cuello.

-¿Cuándo hijos quieres hacer? -pregunto mirándome con una cara picara.

-N-No lose... ¿Que cosas dices? -pregunte sonrojada.

-Pues yo quiero 3 o 4 -dijo lamiendo mi cuello.

-¿Sabes que tendremos que hacerlo muchas veces?... aparte es complicado tener hijos Ghouls... -dije desviando la mirada.

-No importa, lo hare cuantas veces sean posibles. Me encantas -dijo coqueto mientras mordisqueaba mi oreja.

-¡No digas eso en voz alta! -dije pegándole suavemente en la cabeza.

-Eso dueleeee~ -dijo frotándose la cabeza.

-Eres hombre, aguántatela. -sonreí.

-El hecho de que sea Hombre no significa que me puedas pegar sin que sienta dolor -dijo molesto.

-Madura Kaneki -dije sonriendo, iba a besarlo pero se escuchaba un ruido raro arriba... como si alguien estuviera saltando...

-No los- recordé instantáneamente que había dejado a Nishiki atado a la silla, corrimos inmediatamente ahí.

Cuando llegamos lo desatamos y le sacamos la papa de la boca.

- ¡Esto es el colmo! ¡Primero me dejas lleno de mayonesa! ¡Y ahora me dejas olvidado en una silla atado! -grito muy enojado.

-Agradece que me acorde de ti. -dije bufando.

-Con que... Kaneki quiere tener niños con la pequeña Touka... -dijo pícaramente a lo que los dos nos sonrojamos.

No sé de dónde pero le pegue fuertemente con una sartén.

-¡DEJA DE ESCUCHAR NUESTRAS CONVERSACIONES! -Dije molesta.

-Bueno tortolos, me iré, chaitoooo -dijo Nishiki para luego desaparecer tras la puerta.

-Vamos Kaneki, durmamos un poco antes de ir al parque. -dije mientras me levantaba.

-Iré a guardar los platos que deje y voy. -asentí y deposito un beso en mi frente.

Tenía planeado algo muy pervertido para el.

Corrí hacia su habitación y saque una pequeña bolsa con lencería. (Multimedia)
Me la puse rápidamente, y espere a Kaneki acostada en su cama.

Narra Kaneki:
Baje a guardar los platos que había lavado anteriormente, para luego subir y dormir un poco con Touka.
PERO PARA MI GRAN GRAN SUERTE al entrar a la habitación Touka vestía una lencería muy bonita que hacia que su hermoso cuerpo resaltara mas.

-T-Touka-chan... -dije sonrojado como un tomate.

-Bueno... Ya que quiero recompensarte lo de Uta había pensado en esto. -dijo sonriente mientras se me acercaba para rodear mi cuello con sus brazos.

Sonrei mientras la tomaba de sus caderas haciendo que ella enrede sus piernas en mi cintura.

Narradora omnisciente
Kaneki camino unos centímetros para luego caer en la cama con su novia besándole apasionadamente. Se necesitaban y necesitaban olvidar todos los problemas que les rodeaban.

Se deseaban tanto que en menos de media hora toda la ropa que alguna vez estuvo en sus cuerpos, estaba en el piso o arrojada por cualquier lado de la habitación.

Inundados de gemidos y de sudor.
Tanto era la excitación que los rodeaba que por fin sus orgasmos se mezclaron.
No les importo usar condón.
No seria un problema pensaron.