"Si decido Quedarme".

Capítulo Tres.

Llegamos, estaba en la puerta de mi casa, con Elizabeth.

-Bueno, hemos llegado. -dije.

Elizabeth dio un suspiro y hablo.

-...Espero, volver a verte Jackson. -dijo ella. -Fue un placer...haverte salvado la vida. -me sonríe.

-Gracias Elizabeth, por todo lo que hiciste por mi... -dije. -Nadie en años me había tratado hací.

-Jackson, ¿Puedo abrazarte? -Esas palabras hace años que no las escuchaba, desde que mi pequeña hermana Emma me lo decía.

-Claro, porque no. -la abraze, ella escondió su rostro en mi pecho.

Ese contacto humano, no lo había sentido en años.

Me gustaba.

Dejamos de abrazarnos.

-Nos vemos luego, ¿si? -dijo. -cualquier cosa, si te sientes solo o triste, me llamas. -me sonríe.

-Gracias Elizabeth. -ella me dio un beso en la mejilla y se fue.

Yo entre a mi solitaria y oscura casa.

Me fui a dar una ducha y a cambiarme de ropa.

(...)

23:45 p.m.

-...¡¿Como puedes decir eso?! ¡¿Jackson es tu hijo?! -decía mi madre desesperada.

-¿Èl? ¡¿Mi hijo?!, ¡El es solo un cualquiera! -decía mi padre.

-¡¡No lo hagas!! -Grito mi madre antes de estallar en llanto.

-¡¡¡Ahhh!!! -Gritaba por los golpes. -¡¡¡Ahhh!!!

-¡¡Basta, por Favor!! -decía la madre. -¡¡Marcos Basta!! ¡¡Deja de golpearlo!!... ¡¡El no tiene la culpa!! -decía mi madre con llanto.

-¡¡Claro que tiene la culpa!!, ¡¡Es un malcriado!! -Me da un golpe. -¡¡Un imbécil!! -Me da otro golpe. -¡¡Un estúpido!! -me da otro golpe mas.

-¡¡No tanto, como tu!! -grito mi madre.

-¿A si? -Golpeó a mi madre.

-¡¡¡No!!! -grite parandome. -¡¡¡No la golpees mas, dejala!!!

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Desperté, sudoroso y con lágrimas en los ojos.

¡Otros de esos malditos recuerdos regresaron!

¡Cada vez me siento peor!

Abrace mis piernas y comenze a llorar.

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